Lobo Feroz.

3.2K 307 21
                                    

Iba por la vida escuchando música cuando me dieron ganas de escribir sobre el festín de navidad como un baile normal. Mientras que Charlie le coquetea. Aunque todo fue culpa de mi beta Jun-Asai que en realidad lo planeaba para una historia de Crepúsculo. Hasta que pensé que habíamos visto poco de Charlie. Ella es la que toma mis ideas de Crepúsculo y me hace verlas de otra forma, pero terminó alentando este capítulo. Aún así le dedicó está escritura especial. La canción que estoy usando es Lobo Feroz de los Benders. Quería usar Viuda Negra pero en definitiva esa iría para la historia de Crepúsculo en la que Jun me ayuda. Así que espero que les guste. Además sería un Hard pero la canción tiene ritmo. Me gusta para un baile.

¡Hey!
Caperucita se te acusa de bonito

Observo a los alumnos bailar en un tumulto de cuerpos que se movían al ritmo de las canciones. Algunas eran viejas, y unas eran tan buenas a pesar de ser de la década pasada. Harry le había abandonado en la mesa desde hace un tiempo para ir a bailar con Tom. Los gemelos se habían ido con la tía Bella mientras que Percy se había quedado junto a Charlie que ahora era maestro. Se aburrió rápidamente de estar sentado. Snape le dió algo parecido a una sonrisa de dolor desde la distancia y nada pudo animarle más que su padrino diciéndole con la mirada que se divirtiera.

Después simplemente se levantó de su lugar y a pasos lentos fue hasta la persona que estaba buscando desde que se dió el anunció del banquete de Navidad. Tal vez tendría suerte y pondrían Viuda Negra, sin duda unas de sus favoritas hasta el momento.

Al recargarse en una de las mesas cernas para hablar con sus amigos Slytherin inevitablemente quedo en una posición en la que su trasero respingón hacia que varias personas lo voltearan a ver. Él rubio estaba bastante concentrado en hablar con Pansy sobre el enamoramiento que tenía con una hija nacida de Muggles o eso fue hasta que una mano se posó en su cadera.

Es que ya antojo sangre
a mí ya me dio hambre
y no me digan que estoy mal

—Niño bonito dime que me consederas este baile—le sonrió el hombre de ojos azules y reluciente saco negro.

—No soy bonito—se dio la vuelta para ver al hombre de frente, hizo una mueca que parecía más un adorable puchero. Le ofendía que lo tomaran como bonito él ya era un adolescente. No podía seguir viéndose ¨Bonito¨ él quería que lo vieran atractivo e incluso a los ojos de algunos otros, verse sexy—. Y tampoco bailare contigo.

Charlie no se detuvo, había tenido enfrentamientos con Dragones más peligrosos que esté pequeño adolescente que tenía caderas perfectas. Agradecida a su madre que cuidaba a su pequeño esa noche, porque no creía poder aguantar.

—Claro que eres bonito, he de suponer que esos bonitos ojos los heredaste de tu abuela—le comento Charlie acercándose más a Draco—esta sonrisa coqueta y sínica la heredaste de tu mamá.

De verte no me canso
si no corres yo te alcanzo
yo te quiero almorzar

Draco se puso a reír ante los intentos de coqueteo que parecían algo baratos y sobre todo que él tenía dos padres. Charlie lo sabía perfectamente. Y nadie mejor que el chico de cabello rubio caoba sabía que Serpens le ahorcaria por llamarle abuelita.

¡auh!
Todo se puede
¡auh!
Saber que tiene
¡auh!
Lo que adrede y eso loco a mí me tiene
¡auh!

Colateral (En Revisión). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora