Capítulo cuatro. "Sam"

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Michael's POV:

Realmente era reconfortante tenerla abrazada a mi su cuerpo le daba calor al mío y era perfecto, ya que la noche era fría. Se veía tan asustada en el bar.

_____ POV:

Estábamos viajando por la carretera, el viento soplaba y yo no la estaba pasando mal, pero quería estar en mi cama tomando café y leyendo. De repente la motocicleta se fue deteniendo, poco a poco.

-¡Diablos!-se quejó Clifford.

-¿Qué pasa?-pregunté preocupada.

-¿Te gusta caminar?-respondió mi pregunta con otra.

-¡Eres un estúpido!

Me baje de la motocicleta y comencé a caminar.

-¿A donde vas?-pregunto desde la motocicleta.

-Lejos de ti y esa mierda que no tiene gasolina.-señale y comencé a caminar sin rumbo para adelante, pero realmente me asustaba la noche, estábamos al lado de un bosque, así que baje el paso.

-Wow, espera caprichosa, entiendo que yo te caiga mal, aunque soy encantador, pero no te metas con Sam.

Me di vuelta para mirarlo.

-¿Tu motocicleta tiene nombre?

Reí fuertemente, Michael Clifford es una caja de sorpresas.

-Así me encariño más, además, es encantadora.

-Como digas.

Rodé los ojos, en un segundo, Clifford apareció a mi lado, llevando a "Sam" por el manubrio.

-¿Puedes quedarte quieta?

-¿Puedes llevarme a casa? Creo que no.

-Eres tan arrogante, me gusta.

-Siquiera te preocupa que estemos en el medio de la nada, en el medio de la noche.

-Tú lo dijiste, estamos, no veo cual es el problema.

-¿Tienes señal?

Negó con la cabeza. Agregue:

-Maldición, yo no tengo batería.

-Dices bastantes malas palabras para ser una chica.

-Es que tu me sacas de quicio.

-Si si, claro, amas estar conmigo.

¿Él era así todo el tiempo? que desesperante.

Él se sentó en la carretera, al lado de su motocicleta y señaló la acera que estaba a su lado. Me senté, porque realmente no sabía que hacer.

*

Mentalmente habrá pasado una hora y media desde que nos habíamos quedado parados aquí.

-Hey, ¿por que tiñes tu cabello todo el tiempo?

Recien había notado que ahora estaba azul, literalmente azul. Él río ligeramente.

-No se, creo que estoy obsesionado con eso. Me gusta.

-A mi igual, es genial.

-Tal vez algún día te lo tiña de un color, mmm ¿violeta?

-No creo, pero me gustaría.

-Cuando no te pones loca y cuestionas todo, todo el tiempo, eres agradable.

Never Be》(Michael Clifford)Where stories live. Discover now