-¿Me recuerdas?

Me congele en mi lugar y mis retinas no eran capaces de absorber la situación,no podían creer lo que estaban viendo,un miedo profundo,una angustia y miles de recuerdos.

-Tú...-Susurre.

-Claro que soy yo.-Dejo aquella postura tan relajada para ponerse en una encorvada mientras daba un paso hacia mi.

-No te muevas.-Mis manos no paraban de temblar y me odiaba por eso <<Vamos estupidas no me fallen>>

-Quien lo diría.-Dio otro paso y mi corazón se aceleraba más.-Qué la vida de una chica que pudo estar tanto...-Alargó la palabra con tanto asco.-...pero tanto tiempo junto al innombrable Jeff,o como es que lo llaman hoy en día ¿Jeff the killer? Bueno no importa ¿Como es que te tuve en mis manos y no te asesine?

-¿Que es lo que quieres?-¿Y aún peor como conoces a jeff? No me sorprende que venga de la misma línea de psicopatas desquiciados de donde vino el.

-¿Que es lo que quieres tú?-Y sin pensarlo tomo la navaja de entre mis dedos con lentitud observando cómo es que yo no hacía absolutamente nada para negarme,mi mente gritaba que hiciera algo pero mi cuerpo no podía reaccionar.-Lo que yo quiero no es nada agradable.

-Dime ya.-Logre retroceder.

-Toma asiento.-Me señaló el sofá,pero me negué rotundamente aún intentando retroceder.-No quieres que esto sea por las malas,mas te vale tomar asiento.

Cerré los ojos con fuerza y dije.-No.

-Toma asiento.-Dijo del mismo modo que al principio,volví a negar y entonces lanzó la cuchilla justo por un lado de mi cabeza y solté un chillido horrorizado.-¡Siéntate ya!

Alce las manos cubriendo mi cabeza de otro posible intento de ataque y me senté en el sofá,tomó asiento aún lado de mi,pude observar una vez más su máscara blanca con las cuencas de sus ojos y labios totalmente negras,sin ninguna expresión en concreto.

-Veras,mi amigo jeff...-Solto una carcajada agria,con todo menos humor.-Digamos que a echo muchas cosas malas y digamos que a nosotros no nos gusta que se metan en nuestros asuntos.

¿Nosotros? Mi mirada completamente confundida era verdaderamente no fácil de ver,barrí el lugar con mi mirada y lo vi escondido entre las sombras observando,solo siendo más que un partícipe en silencio de todo esto.

-E decidido tomar cartas en el asunto,créeme que a sido difícil encontrar algo con lo cual poder hacerle sufrir,pero por fin.-Se puso de pie con rapidez.-Seguir el rastro de pequeñas muertes por una caza recompensas que no esta interesa por asegurarse de esconder esas pequeñas evidencias con las que e llegado aquí y me pregunto yo ¿Que acaso la policía es una basura?

Me inquietaba su intensa charla sobre él como me encontró y sobre el fin que obtendrá de mi para hacerle pagar a jeff de algo que yo desconozco,pero sobre todo me inquietaba el tipo que en cuclillas miraba sin mover un solo pelo.

-Dime ¿Acaso lo amabas? ¿Era una especie de síndrome de Estocolmo?

-No.-Solté en un susurro ahogado.-Lo odio.

-¿Has escuchado Hoodie?

El tipo en cuclillas se puso de pie y podía ver aquella locura en su forma de caminar,en su manera de mover la cabeza hacia los lados como si estuviera teniendo una charla y en sus manos siendo como dos ojos que tocaban todo lo que tuviera frente suyo.

-Yo no te creo ¿Tú le crees? -Siguió hablándole al tipo que simplemente aún no se acercaba a nosotros,recibió una negativa en respuesta y luego se dirigió a mi.-¿Por que no te creo?

<<No lo se,estás loco,loco igual que jeff>>

-No estas ayudando mucho,necesito algo.

-Déjame en paz.-Intente ponerme de pie pero su gran mano me empujó muy cerca del cuello haciéndome caer de nuevo al sofá,acercó su rostro al mío y con el dorso de su mano acarició mis mejillas.

-Necesito que me digas algo.-Su voz dejo de sonar como un chico normal para convertirse en una potente enroquecida por probablemente odio.-¿Por que estuviste tanto tiempo con el? ¿Como sobreviviste?

Afligida por sus cuestionamientos,por su cercanía,por su locura,estaba logrando que me quedara sin aire,sin ideas,sin absolutamente nada coherente.

-Déjame ir.-Le escupí con rabia.

-Esto no está funcionando.-Sentí unas manos tomar mi cabeza y pegarla al sofá con fuerza,barrí la estancia y el tipo ya no se encontraba ahí,estaba detrás mío,él era el que me tomaba con tanta fuerza de la cabeza para que no me moviera,lo mire con un pasamontañas negro,con los ojos en color rojo y la boca triste del mismo color,la capucha puesta y esto lo hacía mas escalofriante.

Crisis,era lo que sentía en este momento.

-¿Por que estuviste tanto tiempo con el?

No habían alternativas,no sabía que era lo que ocurría o que carajos había echo jeff y por qué yo tenia algo que ver si hace ya tiempo había dejado de formar parte de su vida y el de la mía.

-No lo se,hace mucho tiempo que no lo veo y sinceramente no quiero tener algo que ver con el o con ustedes así que,mas vale que me dejen en paz de una vez.

-Bueno,tendremos que averiguarlo ya que te niegas a cooperar.

-Te e dicho lo que quieres.-Dije entre dientes,apretando los puños intentando reunir coraje y odiaba el que estuviera tan débil,de haber sabido que estaría en esta situación no habría permitido que me dieran tal paliza antes.

-No me has dicho lo que quiero.

Oh claro,como se exactamente qué es lo que quieres.

-Eres un hijo de puta,suéltame de una maldita vez,estás totalmente loco igual que jeff.

-¿No entiendo por qué tú?-Hubo un largo silencio.-Inmadura e idiota.

Estaba tocando fondo y no andaba en mis mejores momentos,intenté con la poca energía que aún me quedaba alejarlos pero me tenían muy bien retenida.

-Hoodie,trae a Jeff.

Mi Propiedad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora