Capítulo 13 Solo un consejo

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Mientras trataba de desayunar llamaron a la puerta. Era Connor.

-Hola, ___. ¿Puedo pasar? –dijo con una media sonrisa.

Lo salude y dejé que pasara. Se sentó en la sala mientras yo fui a la cocina y le ofrecí algo.

-¿Qué ocurre? –Ayer se había comportado de una manera tan extraña y ahora viene con cara de preocupación.

-Adeleine, eso pasó. –soltó aire.

-¿Está bien? ¿Le ha ocurrido algo?

-Está perfectamente. Solo que no quiere… olvídalo ¿quieres ir al centro?

Subí una ceja –No quiere...qué?

-Lo que ocurre es que no quiere que pase mucho tiempo contigo –se frotó la barbilla- Y pues solo me di media vuelta y vine –me dedicó una gran sonrisa.

No había hablado mucho con la madre de Connor, no entendía la razón de por qué no le agradaba. Sólo me había dado una carta, que por cierto la había dejado sellada, y ya.

-Preferiría quedarme –dije al final

-oh ¡vamos! Por lo menos a caminar cerca de aquí si es que no quieres ir al centro.

Iba a contestar pero me vi interrumpida por el llamado a la puerta. Esta vez era Liam. Desde “el beso” no lo había visto.

No había pensado en eso.  Quizá habría posibilidades de que yo les gustara, también de que había terminado con Claire ya que un hombre como él no le sería infiel a alguien, al menos yo no lo creo capaz de eso.

Estaba recargado en el pórtico de la entrada, al verme puso una sonrisa.

-Siento no venir ayer, tuve que hacer unas cosas –Se aceró y me di un gran abrazo.

Sonreí  y luego la voz de Connor se oyó de fondo diciendo “¿Quién es?”

-¿Hay alguien más contigo? –frunció el ceño.

-Es solo un amigo que conocí apenas.

Paso a donde Connor, él solo le dedicó una sonrisa desafiante y Liam le devolvió el ceño fruncido y a la vez desconcertante. El ambiente se puso tenso.

-Liam, él es Connor. Connor, Liam.

Pareció como si no hubiese hablado, los dos seguían con sus miradas como tratando de reclamar un terreno que de cierta manera ninguno tenía derecho.

Al final Liam fue el primero en estrechar su mano –Liam, novio de ____.

Me quedé en shock ¿por qué lo había dicho? Las palabras se atoraron en mi garganta.

-Interesante, ___ me había dicho que no tenía novio.

-Y… ¿qué te trae por aquí? –dijo Liam ignorando el comentario de Connor.

-Nada que te interese.

-¡Ya basta los dos! Liam, por favor acompáñame a la salida.

Bufó y a regañadientes salió con grandes pisadas hasta la carretera sin detenerse, tuve que correr para alcanzarlo. Gritaba que se detuviera pero no me hizo caso hasta que alcancé su brazo.

-¿¡Qué te ocurre!?

-Sera mejor que regreses adentro o “Connor” se enojará.

-¡Él y yo apenas nos conocimos, tengo que conocer a más gente, no puedo estar todo el tiempo contigo!

-Yo estaría todo el tiempo que pudiera contigo –su confesión hizo que me quedara sin palabras, al no ver mi respuesta continuo- Un beso no se le da a cualquiera, espero y comprendas lo que siento por ti –dio media vuelta y siguió caminando, esta vez no lo detuve.

Regresé con Connor, él estaba ya en la entrada esperando que le dijera algo.

-Déjame ir por las llaves y vamos a caminar.

Nos adentramos más en el bosque, se podía oler la tierra húmeda de la noche anterior y se oía cada vez más como el agua chocaba contra las rocas. Nos detuvimos en  una cortina de hojas.

-Cada vez que me siento frustrado, que ha ocurrido algo o simplemente quiero pensar vengo aquí, bueno no aquí –tomo mi mano y nos adentró al otro lado de la cortina- sino aquí.

Estábamos enfrente de donde el río se rompe en múltiples cascadas pequeñas, había más vegetación y los rayos que atravesaban los frondosos árboles se reflejaban en el agua haciendo parecer como si llevara consigo pequeños cristales.

-Es un hermoso lugar.

-Lo sé. La mejor parte es que solo nosotros dos sabemos de este lugar.

Me di cuenta de que nuestras manos todavía estaban sujetas, no dije nada por medio a arruinar el momento, no quería sentirme torpe; solo me recargué en una roca que estaba a lado de nosotros lo bastante grande para los dos, él se sentó junto a mí sin soltar mi mano. Su dedos eran bastante largos y no muy gruesos, su mano estaba tibia en comparación a las mías que siempre están frías. Tal vez se percató de eso que puso mi mano entre las suyas y la llevo a su pecho.

Empezamos a hablar, supe que tenía 21 años, trabajaba medio tiempo en un lugar de comida rápida para poder pagar la universidad, le faltaban dos años para graduarse. También me dijo que siempre había vivido únicamente con su madre ya que nunca conoció a su padre pero no le importa.

-Un día me gustaría conocer a Evan, podríamos llegar a ser buenos amigos. –dijo divertido.

-Posiblemente –le devolví la sonrisa.

Estaba un poco nerviosa pero después las palabras salieron naturalmente: -¿Qué pasó contigo cuando llegó Liam?

Soltó una sonrisa y bajo la mirada –Sabía que me preguntarías eso –hizo una pequeña pausa- Para ser sinceros no soporte la manera en la que llego como reclamar por su propiedad, como si le tuvieras que pedir permiso para socializar. Tú no perteneces a nadie, eres más inteligente que eso. Hazte un favor y no dejes que nada ni nada te controle, tú eres la única que tomas las decisiones en tu vida sean malas o buenas –tomó mi barbilla entre sus dedos- No es un regaño, solo es un consejo –puso su media sonrisa.

El tono de su voz era profundo y las palabras le salían lentamente, podría seducir a cualquiera con tan solo hablarle cerca del oído si quisiera, y creo que no se da cuenta de eso.

¡HOLA! Sé que me quieren matar y no las culpo, pero para recompensarlas subiré en un momento más otro capítulo.

**Me han estado pidiendo que les cuente el pasado de rayita, esto lo van a saber cuándo terminé esta primera temporada, voy a ser como un paréntesis en la historia y contare lo que paso, después de que terminé con eso voy a seguir con la segunda temporada.

PD: Dejen su comentario si quieren que les dedique el próximo cap.

Tristeza teñida de rojo |Liam & ___(TN)|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora