fucking jew [kyman]

16| Not Ready

Eric no se sentía listo para eso, era demasiado para él.

Faltó a la escuela por el resto de la semana y siempre que Kyle trataba de verlo, le pedía a Liane que no lo dejará pasar. Su madre no hizo muchas preguntas al respecto, pues pensaba que era una pelea típica de las parejas.

Se encerraba en su habitación completamente deprimido, pensando en lo patética que era aquella situación, todo por no usar protección sabiendo perfectamente el riesgo que corrían. Estaba molesto consigo mismo y con Kyle.

Él quería estudiar una carrera en la universidad, quería divertirse y posiblemente mudarse junto a Kyle a un pequeño apartamento. Ambos estaban en el último años y no faltaba más de dos semanas para finalmente graduarse.

La idea de abortar cruzó más de una vez por su cabeza, completamente sumido en la tristeza que sentía, pues sus sentimientos se alteraban rápidamente y de manera peligrosa

Butters lo visitaba a diario, él le suplicaba que no abortara, que hablara de eso con Kyle, pero al castaño le aterraba su reacción, le aterraba que lo abandonara. Pero hubo un momento en el que todo se le desbordó de las manos, tuvo que regresar al instituto por los exámenes finales y tuvo que encarar a Kyle.

—Eric, enserio, ¿Qué ocurre? Llevas una semana entera ignorandome.—Escuchó la voz de Kyle mientras organizaba su casillero.—Sí quieres terminar conmigo, dímelo de una vez.

Eric cerró de golpe su casillero y miró a su novio, Kyle tenía el ceño fruncido, pero aún así se notaba dolido y preocupado.

—Eres un idiota por creer que quiero terminar contigo.—Dijo mirándolo fijamente.

—¿Entonces qué ocurre?

El castaño suspiró mordiendo suavemente su labio inferior mirando a ambos lados del pasillo, para luego dirigir nuevamente su mirada a su novio, Kyle esperaba impaciente una respuesta.

—Estoy bien Kyle, enserio.—Eric sonrió levemente, pero el judío notó que era una sonrisa falsa.—Sólo estoy un poco estresado por todo esto..

Kyle suspiró, no quería forzar a Eric, pero era más que obvio que le ocultaba algo, se preocupaba por él. El judío rodeó con sus brazos el cuerpo del más bajo, proporcionándole un cálido abrazo, Eric sintiendo un nudo en su garganta y apunto de romper en llanto correspondió aquel gesto. Kyle comenzó a decirle cursilerías al mismo tiempo que besaba sus mejillas, de no ser por Butters, Eric hubiese llorado y hubiese tenido que dar explicaciones.

—Eric ¿Puedo hablar contigo un segundo?—Dijo el rubio, mirando un poco incomodo a la acaramelada pareja.

Eric y Kyle tenían una relación un tanto peculiar, aveces eran extremadamente melosos y otras, parecía que estallaría la tercera guerra mundial.

El castaño miró de reojo a Butters y luego susurró algo casi inaudible, Kyle lo soltó de inmediato y suspiró, Eric le sonrió y luego tomó el brazo de Butters, comenzando a arrastrarlo hasta el gimnasio.

—Habla.

—¿Por qué carajos aún no le has dicho a Kyle?—Preguntó sin rodeos, Eric desvío la mirada.—Él merece saberlo Eric.

—No lo entiendes Butters, es difícil.

—Sé qué es difícil pero él debe saberlo.—Butters tenía el ceño fruncido, realmente se preocupaba por sus amigos.—Sí tu no le dices, yo lo haré.

—Sí lo haces nunca te perdonaré.—Dijo molesto, frunciendo el ceño también.

—Entonces supongo que nunca me perdonarás.—Eric apretó su mandíbula mirando como el rubio se retiraba del gimnasio.

(...)

Después de la pequeña discusión con Leopold, Eric se mantuvo a cierta distancia de él, sabía que el rubio hablaba enserio y no quería que algo tan serio e importante saliera de la boca de alguien más.

Él quería decirle a Kyle, pero no encontraba el momento indicado. Y ahí estaban ahora, un fotógrafo les tomaba fotos, ambos vestían sus mejores trajes y Eric llevaba una especie de pulsera de flores en su mano mientras que Kyle le sonreía a la cámara y sujetaba con una mano la cintura del castaño.

Estaban en el baile de graduación y Eric esperaba que Leopold no tratará de decirle a Kyle, no esa noche.