15| Positivo

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Eric sonrió mientras miraba a su novio, en su frente se leía claramente en un papel la palabra "bebé", estaba cien por ciento seguro de que con la descripción que le diría adivinaría.

-Eres minúsculo, siempre gritando por ninguna razón aparente, no haces nada en todo el día excepto dormir, cagar y chupar..-Kyle pareció no dudar mucho en su respuesta.

-¿Soy tú?

-...-Kyle sonreía por la reacción de Eric, su rostro estaba rojo.-Te odio.

-¿No acerté?

-Te odio tanto judío.

-Yo también te amo, bebé.

-Hijo de-.

(...)

Yotoko Turaja se convirtió en una especie de lugar en donde Eric y Kyle recurrían a diario, y no exactamente para hablar. Era el único lugar en donde no eran interrumpidos pues ellos eran los únicos que tenían la llave del lugar.

Eric se mostraba sentimental aveces, más de una vez durante esa semana ambos trataron de hacerlo, pero el castaño rompía en llanto sin razón aparente.

-Khal, tengo hambreee.-Se quejó y el nombrado lo miró.

-Siempre tienes hambre, más últimamente.-Dijo un poco pensativo.-No creo que sea bueno para tu salud comer tanto y más sí es comida chatarra..

-Sabes, sí me consigues pastel de naranja te hago una mamada.-Kyle levantó una ceja divertido.-¡Hablo enserio! Te haré una mamada a cambio de pastel de naranja.

-Suena tentador, pero me niego a dañar tu salud cariño.-Eric de inmediato se cruzó de brazos molesto.

-Me rompes las bolas Khal, me las rompes.

-Creo que rompo otra cosa..-Murmuró para sí mismo.

-Khal.

-Dime.

-Quiero pastel.

-No.

El castaño tenía el ceño ligeramente fruncido, sus ojos se humedecieron un poco y comenzó a gritar con una voz un tanto aguda que aturdía al pobre judío.

-¡Te odio! ¡Yo sólo quiero un maldito trozo de pastel y me desprecias de esa manera! ¿¡Sabes qué!? ¡Jódete! ¡Jódete Kyle!

-¡Diablos, calmate! Iré a comprar el trozo de pastel.-Eric sonrió dejando de llorar, bueno, esos cambios de humor repentinos lo ayudaban a conseguir lo que quería.

Kyle se marchó de la casa del castaño para poder comprarle el tan aclamado trozo de pastel, tuvo que aguantar una fila larga para pagar y cuando finalmente regreso a la casa encontró a Eric viendo televisión.

-Ten.-Dijo extendiéndole la caja con el trozo de pastel adentro.

-Ah, ya no quiero.

Kyle puso una cara de pocker y frunció el ceño.

-¿Cómo que ya no quieres?

-Te tardaste un milenio, Khal, ahora quiero jugo de tomate, y eso es asqueroso.-Hizo una mueca, el jugo de tomate no le gustaba para nada, pero el antojo era muy grande.

A Kyle le gustaba mimar a su novio, pero de vez en cuando este se pasaba, bufó y se sentó junto a él, abrazandolo como de costumbre, Eric recostó su cabeza en su pecho mientras veían aquella película. El alfa se sentía aturdido por el olor que el omega desprendía, era dulce, muy dulce, olía a fresas el cual no era su olor característico.

Había algo extraño en Eric.

(...)

Eric despertó es mañana con repentinas náuseas y tuvo que salir corriendo hasta el baño, dónde vomitó. Se sentía mareado y enfermo, no era un sensación para nada gratificante, ya era la tercera vez que despertaba de esa manera y comenzaba a asustarle.

Decidió no ir ese día a la escuela, no se sentía para nada bien, así que se quedó en cama todo el día.

Escuchó el timbre de la casa, así que bajo las escaleras con un poco de flojera, Liane no se encontraba en casa pues estaba trabajando. Abrió la puerta y observó a Leopold quien el sonreía sosteniendo una bolsa en sus manos.

-Al fin llegas, pensé que nunca vendrías..

-Lo siento, fue más difícil de lo que pensé convencer a Kyle de que estabas bien Eric, estuvo molesto con todos todo el día porque faltaste.-Explicó, Eric suspiró y lo dejó pasar.

-¿Trajiste lo que te pedí?-Preguntó un poco nervioso, Butters asintió.

-No entiendo porqué lo necesitas, digo, e-eres un alfa.-Dijo inocentemente, Eric río.

-Oh Butters, soy un mugroso omega, gracias por la observación pedazo de mierda.-Sí antes estaba tranquilo, ahora estaba molesto, Butters se exaltó por su cambio de humor y su declaración.-Ahora dame esa maldita cosa y cállate.

-E-está bien.-Dijo con nerviosismo, abrió la bolsa y le entregó aquella caja al castaño, quien se la arrebató de las manos.

Ambos subieron las escaleras, Eric se dirigió al baño mientras que Butters entró a su habitación. Cartman leyó la caja antes de abrirla y sacar uno de eso aparatos, lo miró nervioso y hizo lo que las instrucciones establecían, tuvo que esperar quince minutos por el resultado de aquel test.

Cuando finalmente aquellos quince minutos pasaron, un poco tembloroso tomó el test de embarazo y lo observó. Dos rayitas.

Gritó y Butters de inmediato corrió hasta el baño y abrió la puerta asustado.

-¿¡Qué pasa Eric!?-Preguntó preocupado, el castaño lloraba.

Cartman le enseñó el test.

-Estoy embarazado.

fucking jew [kyman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora