El Amor De Un Príncipe ▪YoonMin▪

DE SUEÑOS Y ESPERANZAS.

La notícia había corrido como polvora, todos estaban buscando a YoonGi.

No sabían nada de él. Ahora mismo estaban tan preocupados que ahora no sabían que hacer ni donde buscar.

JungKook sonrió cuando escucho a dos mujeres hablar de lo sucedido. Ahora mismo pasaba desapercibido por todos.

Volvió a la pequeña casita que había rentado de un buen hombre que le había ayudado cuando escapó.

Entró dejando su abrigo y los víveres que había comprado.

-Lo están buscando, cualquier momento vendrán aquí y será nuestro fin JungKook - habló él hombre que se había echo su amigo.

-Lo sé, solo se quedará hasta que mejore. - le aseguró - No se quedará tantos días, no se preocupe - JungKook sonrió.

Él hombre asintió suspirando, no dijo más y salió de la pequeña habitación.

JungKook se dio la vuelta para ver a YoonGi, él mayor estaba recostado en la cama del castaño. JungKook sólo se acercó lo sufiente para moverlo del brazo y despertarlo.

YoonGi se levantó sobresaltado, mirando a JungKook algo confundido.

-¿Quieres comer algo? - JungKook le sonrío.

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-Busquenlo por todos lados, hasta debajo de las piedras si es necesario - mandó él Rey.

Varios guardias salieron en la búsqueda de YoonGi, se habían encargado de hacer llegar la noticia hasta en los Reinos más lejanos.

La desaparición de YoonGi habia ocurrido dos semanas atrás, dando por consiguiente que ahora en todos los Reinos se buscaba al pelinegro.

Hoseok y TaeHyung habían llegado ayer por la mañana. Ambos hermanos preocupados por la desaparición de su primo.

Hoseok había empezado inmediatamente una búsqueda con todos los guardias de su Reino.

TaeHyung aparte de la culpa que tenía, acompañaba a su hermano y de vez en cuando preguntaba por YoonGi. Pero nadie lo había visto.

Y aunque TaeHyung se preguntaba como es que estaba Jimin y aunque se moría de ganas por saber, no hizo nada. Guardó distancia ese día que lo habia visto en rl pueblo.

En su rostro ya no estaba la flamante sonrisa que siempre traía, ahora más bien su semblante era serio y estaba muy pálido.

Claro que el rubio lo habia visto también y antes de que Jimin haga algo hacía él. TaeHyung ya se había dado la vuelta para marcharse.

El amargo sabor de culpabilidad lo llenaba cada vez que veía como estaba la situación. Tampoco había sabido nada de JungKook y aunque sueñe y siempre se preguntase del paradero del castaño no hacia nada.

Más solo ver como las cosas iban en ese entonces.

Jimin en parte era otra cosa, la preocupación y ansiedad de los antojos no ayudaban en nada.

Ya se había pasado comiendo toda la tarde, mermelada de mani con chocolate y todos los alimentos que hacían una mezcla rara que si bien nunca imaginó comer, ahora lo encontraba deliciosamente satisfactorio.

-Jin.

-¿Si Alteza?

-¿Dónde crees que esté YoonGi? Y ¿Con quién? - preguntó con la voz triste y preocupada.