El Amor De Un Príncipe ▪YoonMin▪

CONSUMACIÓN

Todos estaban alegres, todos bailaban y celebraban en el reino. Con objetivo de divertir a los Reyes y ya a los futuros reyes.

YoonGi sin notarlo había entrelazado la mano con Jimin y este hizo lo mismo cuando sintió la suave piel del pelinegro entre sus dedos.

No sabía la razón, pero estar cerca de YoonGi le ponia nervioso y sonrojado.

Ellos también bailaron, sus típicas danzas después de casarce estaban presentes. Se veían felices, muy felices. Además el pueblo. Tendrían otros reyes que sin duda gobernarían muy bien.

La pareja se miraba a los ojos, como si nada a su alrededor mas existiera...

Entrelazaron ambas manos y empezaron a bailar una melodía muy linda y suave como una balada.

Sus ojos no dejaban de mirarse, porque querían decirse más, pero las palabras no salían y solo se sentían cómodos mirándose a los ojos.

Jimin suspiró apoyando la cabeza en el hombro de YoonGi, y, una vez más inhaló ese característico aroma del pelinegro. Le encantaba.

YoonGi solo sonrió, y lo atrajo más a su cuerpo. Sin ser consciente que no eran los únicos en el salón. Que había muchas personas mirándolos, otros con felicidad y devoción, otros con pura tristeza.

TaeHyung estaba ahí, feliz y a la vez triste...ver a su hermano y sus padres le hizo un sentir una emoción y calidez en su corazón, pero sin embargo ni los abrazos de su padres y su hermano, ni los besos en su rostro de parte de su madre, calmaron su malestar en el corazón.

¿Habia visto bien? Quería creer que no, y que solo era una ilusión en su mente, el abrazo de JungKook hacia Jimin era tan significativo. Tan...duradero y lleno de sentimientos.

Sólo rogaba porque lo que estaba pensado no era cierto.

Porque JungKook y Jimin no podían... ¿Cierto?

👑👑

Cuando ya todo había acabado los reyes, los sirvientes y demás , se dispusieron a decorar y arreglar la habitación donde los príncipes consumarían su matrimonio.

Decir que Jimin estaba tranquilo, seria mentir sin piedad...porque justamente ahora el rubio no paraba de morderse las uñas y dar vueltas en su habitación.

Lo propio con YoonGi, que parecía un niño haciendo berrinche encima de su cama, en precensia de su sirviente.

—¡Nooo! ¡No me obligues! — YoonGi lloriquiaba dando leves saltitos encima de su cama.

— Alteza...sabe que yo no lo obligo...son los reyes — dijo el sirviente, un tanto divertido por ver al príncipe tan serio e indiferente comportandose como un niño.

—Mis padres lo dicen muy fácil, porque ellos no tendrán que dormir en la misma cama con un desconocido.

— Le recuerdo alteza que el príncipe Jimin no es ningún desconocido, es su esposo.

YoonGi chasqueo la lengua — Lo sé...pero-

—Perdona que lo interrumpa mi señor...pero esque esto es lo que siempre se hace después de contraer matrimonio. Admita que le atrae el príncipe Jimin. — él sirviente habló con una sonrisa.

— N-no es eso...— YoonGi se ruborizó — Solo es que...te voy a extrañar... Si eso...te voy a extrañar.

—Si claro alteza —el sirviente agarro una mano de YoonGi — Y yo soy él siguiente heredero de Inglaterra.

Hablo el sirviente mientras sacaba casi a rastras a YoonGi de la habitación.

Jimin por su parte estaba ansioso, nunca había pasado por esto...y se le hacia demasiado difícil.