Natalia
Alguien me acosa… ya estoy segura.
Lo que me faltaba, genial.
Seguro es un viejo —o varios, quién sabe— que me mantuvo vigilada, sabe que estoy completamente sola unas buenas horas hasta que anochezca por completo. No es por drama, pero tal vez esto es por la trata de blancas y tienen su ojo en mí.
Okay Natalia, no lleves todo a los extremos, tal vez es un chico que me está echando ojo; empero, igual se lo hace un acosador, pues espiar a una desconocida no me parece normal. Llevo a suponer esto puesto que sí había un poco de gente caminando alrededor de la plaza, pero como que un chico —solo lo vi de espaldas— caminaba un poco más a prisas. O es mi paranoia o es él quien me espía. No sé.
Lo más prudente sería no volver aquí y buscarme otro rinconcito, y puede que lo haga. No obstante, primero quiero saber quién me observa. Me arriesgo, pero debo enfrentarlo.
N/A:
Natalia ya sospecha de la existencia de nuestro Tiago. ¿De verdad estará decidida a descubrirlo? ¿Lo hará? Descúbrelo en el siguiente capítulo.
165 palabras
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Al ponerse el sol
Short StoryÉl siempre la veía sentada ahí, a esa linda joven, mirando las puestas de sol. ¿Qué sentido tendría aquello? ¿Cómo iba a saber? Si con esa misma risueña y distraída sonrisa que ella observaba el atardecer y el paisaje de alrededor, él la contemplaba...
