Insoportable amor | Sterek & Thiam |

Capítulo 15

Revelación: Acónito.

El ambiente en Los Ángeles se sentía diferente, el olor, el viento, los sonidos. Incluso parecía ser la primera vez que pisaba aquel lugar. Pues desde aquella tormentosa noche donde corría por el bosque, ya que amaba correr bajo la lluvia; un desconocido Alpha le mordió en la mano. No recordaba lo que hizo después o cómo fue que llegó a casa esa misma noche, ni tampoco lo que pasó días después, pero sí tenía fijo en su memoria el ardiente dolor que recorrió cada átomo de su ser segundos después de la mordida. Un dolor imposible de olvidar.

Por fortuna, en ese entonces Derek se encargaba de mantener el balance en el pueblo y se aseguraba de que todo estuviera en orden, y gracias a que percibió la esencia de un nuevo hombre lobo, lo encontró y le ayudó con sus nuevas habilidades. Desde entonces, supo que le debía mucho al moreno y por eso aceptó alcanzarle el wolfsbane que precisaba para probar que un amigo era o no, un licántropo.

...

- Creo que me gusta este. - apuntó Stiles hacia el estante de madera marrón oscuro que vio en el catálogo en línea mientras permanecía pegado y recostando el brazo por el hombro de Derek. Se encontraban en la cocina, navegando en el ordenador y haciendo compañía a Lydia y Allison; quienes estaban haciendo espaguetis caseros para cenar, un antojo de las chicas.

Después de lo acontecido días atrás y el destrozo que causaron aquellos monstruos, según como los nombraba Stiles, se decidió renovar la decoración de su sala; desde comprar muebles nuevos hasta cambiar la pintura, y de esa forma poder olvidar la noche que más terror había sentido en su vida. Ese domingo habían quedado en cenar todos juntos y pasar la luna llena cerca de Stilinski, para confirmar si era cierto o no que estar cerca de él los podría tranquilizar.

La mera verdad y hasta podría animarse a admitir frente a Cora, que nunca en su vida había estado tan tranquilo al principio de la noche. Apenas se puso el sol, estando al lado del humano, puesto que estuvieron juntos desde la mañana, una increíble paz se apoderó de su cuerpo. Puede que eso se debía al simple hecho de estar cerca del muchacho que le gustaba y también por estar con sus hermanos, pero lo cierto era que el desasosiego era inexistente.

Aún así le parecía que Stiles tenía algo extraño. Tal vez sí era una criatura sobrenatural que simplemente no tenía conocimiento de qué tipo era, pero esa noche estaba dispuesto a averiguarlo, a como diera lugar.

Derek puso los ojos en blanco y torció la boca antes de mirar al castaño que estaba muy cerca de él, donde podía aspirar su aroma que tanto le agradaba. Se encontró con esos ojos claros detrás del cristal de sus gafas y le fulminó con la mirada.

- ¿Qué? - inquirió el chico bajando la guardia y alejándose unos centímetros para no molestarle.

Pero Derek se sintió un tanto disconforme ante la escasa lejanía. Rogaba porque Stiles permaneciera ahí a su lado. - Dijiste que querías darle un cambio radical a tu sala. Este es exactamente el mismo mueble que tenías. Solo que aquí tiene un cajón de más. -

El castaño hizo una mueca frunciendo los labios, recalculando su opinión. Derek tenía toda la razón. Cosa que no dejaba de sorprenderlo. - Es cierto. ¿Cómo es que sabes que era igual? Ese mueble quedó destrozado. -

- Tengo buena memoria. - musitó con simpleza. El moreno siempre tuvo excelente memoria y ese mueble solía gustarle.  

- Entonces lo dejo a tu criterio. Elije los muebles que te guste. Elije por mí. -

Con el ceño fruncido, el lobo escaneó la cara del chico, buscando y percibiendo cierto tono desafiante que de algún modo le resultaba atractivo, más con las chicas trabajando cerca de ellos y claramente escuchando la conversación. Pero justo entonces Lyds y Alli salieron de la cocina sin decir nada. Solo vio como la pelirroja sacaba el móvil del bolsillo y lo llevaba a su oreja. Entonces Derek volvió la vista al humano y al monitor, intercaladamente. - Creo que no hay nadie mejor que tú para escoger tus cosas. Yo solo dije que... -