Summer Nights || Lee Felix || Stray Kids ¡Publicado En Físico!

Capítulo 17

El camino a de vuelta a casa fue callado y realmente no me apetecía hacer nada que no fuera mirar hacia el suelo en aquel momento. 
—¿Felix?— Nos detuvimos al escuchar la voz de Anne en frente de nuestro camino. Fue entonces cuando levante la vista del suelo, viendo a Anne acercarse con rapidez a Felix. La chica tenía el ceño fruncido, lleno de preocupación, sonreí por lo bajo al pensar en todo el cariño que Anne debía de tener hacia Felix. —¿Qué les pasó?— preguntó cuando notó mi rodilla y el rostro golpeado de Felix, pero al final ninguno de los dos respondimos. Anne dejó salir un suspiro pesado, llevando su mano a la mejilla de Felix, acariciándolo con ternura, el chico se dejo ser sin decir nada. —Tienes el labio reventado— murmuró ella, examinando los labios del rubio, me estremecí un momento cuando la vi acariciarlos con sus pulgares, pero al instante Felix sujeto los brazos de Anne, alejándolos de sus labios. —Lo siento... debe de doler— se disculpó, llevando la mirada al suelo por un instante. 
—Nos tenemos que ir, nos vemos luego, Anne— habló Felix mientras retomaba nuestro camino, me despedí de Anne con un saludo de manos rápido para después apresurarme a alcanzar al rubio. 
—No seas tan frío con ella— murmure algo nerviosa mientras le miraba la espalda.
—No es mi intención— contestó —Solo que en este momento hay otra persona que me gusta— confesó haciendo que me apresurara a caminar a su lado para voltear a verle a la cara.
—¡Wua! Yo pensé que te gustaba Anne— solté sonriendo mientras llevaba la mirada al frente. —¿Está en tu clase?— pregunté después de un rato, Felix me volteó a ver. 
—¿Quién? ¿Anne?— respondió, le negué con la cabeza repetidas veces.
—La otra chica que te gusta. Eres muy bobo Lix, ¿cómo puedes gustarle a las chicas?— reí por lo bajo.
 —Tal vez ese es mi encanto— contestó con aires de grandeza, provocando que me riera nuevamente de él.
—Lo dudo mucho, gato bobo— respondí fingiendo desinterés. 
Después de aquella pequeña charla el silencio se hizo presente, dejándome pensativa respecto a ello. ¿Entonces Felix estaba interesado por alguien más?
—Deberías decírselo a Anne— solté rompiendo el silencio y volteándolo a ver, encontrándome con su mirada al instante. —Se nota que ella realmente te aprecia y te quiere mucho...— El chico dejó escapar una sonrisilla triste.
—Si, debería hacerlo— respondió por lo bajo.
— ¿Ocurre algo?— me atreví a preguntar cuando sentí que el aura del ambiente había cambiado a uno un tanto melancólico. Felix me observó con una sonrisa más alegre antes de responder.
—No ocurre nada— me aseguro mientras golpeaba levemente mi frente. —Hemos tenido demasiado drama este día por esos dos sujetos, demonos prisa para llegar a casa— le asentí con la cabeza colocándome nuevamente a su costado, comenzando a caminar

[...]

—¡Muévete Felix! Estás estorbando— me queje intentando  pasar a su auto virtual que conducía con una lentitud.
—¿Te han dicho que eres muy agresiva cuando juegas videojuegos?— habló él mientras me volteaba a ver, lo miré con rapidez para sacarle la lengua y volver a ver hacia el frente. —Inmadura— soltó por lo bajo.
—Cállate, gato tonto— conteste, estrellando mi coche contra el suyo.
—¡Oye! Eso me saldrá un ojo de la cara en el taller mecánico— bromeó.
—Ja, ja, ja diles que te hagan un descuento por los siguientes— le respondí mientras volvía a golpear su coche en repetidas ocasiones. 

La puerta sonó haciendo que Felix le pusiera pausa a la jugada.
—Thomas está aquí— nos avisó la señora Lee, ambos nos pusimos de pie y bajamos a la sala hasta llegar con Thomas, le sonreí al igual que él a mí.
—¡Hey!— saludé, el chico pareció notar los moretones de ambos, mirándonos con una ceja alzada.
—¿Están castigados?— preguntó curioso, Felix y yo le asentimos con la cabeza al unísono.
—Solo serán unos cuantos días— le avisé, dejándome caer en el sofá individual, realmente amaba ese sofá pequeñito. Thomas soltó una risa leve.
—No puedo creer que se hayan metido en una pelea— habló Thomas mientras nos miraba a ambos, Felix se encogió de hombros dejándose caer a lado del pelinegro.
—Nos llaman señor y señora problemas— dijo el rubio con aires de grandeza mientras levantaba el meñique por los aires. Reí por lo bajo mientras observaba a Thomas rodar los ojos. 
—Ya había pasado un tiempo desde que no tenías una pelea, ¿qué sería? ¿tercero de secundaria?— Felix se quedó pensativo por unos instantes ante la pregunta de Thomas.
—Si, creo que si— finalmente respondió mientras soltaba una risilla. 
—¿Le contaste a Matt?— le pregunté a Thomas, volteándolo a ver.
—Por supuesto, está impaciente por ir a la piscina ahora que ya está mejor— respondió con un tono irritado mientras volvía a rodar los ojos. 
—Pues la piscina tendrá que esperar un poco más— habló Felix, atrayendo ambas miradas hacia él.
—¿Por qué?- preguntamos confundidos al unísono, Felix soltó un largo y pesado suspiro dejándose hundir en el sillón. 
—Porque nos vamos a ir a acampar por órdenes de nuestras madres— finalmente contestó haciendo que Thomas y yo lo observáramos, está vez con algo de asombro.

—¡Espera! ¡Espera! ¿Matt y yo no estamos incluidos en eso, o si?— se apresuró a hablar el pelinegro, con un tono de voz claramente nervioso, era obvio que al chico no le agrada la idea de ir a dormir a la intemperie. Felix lo observó con una sonrisa maligna y asintió levemente con la cabeza.
—Mi madre a hablado con las suyas está mañana así que si, querido amigo, dormirás en una choza con un montón de zancudos en la peligrosa Australia— respondió Lix. Los ojos de Thomas se abrieron con notoriedad ante las palabras del rubio, seguramente se estaba imaginando cosas terribles sobre la estancia del lugar, por otro lado, a mi no me parecía tan terrible, nunca había ido de campamento con Felix, así que este sería nuestro primer verano en un campamento juntos.
—¡Hey! Thomas, ¿Recuerdas ese día de sexto grado?— el pelinegro fingió que un escalofrío le recorría por el cuerpo sacudiendo sus brazos y su espalda.
—¡Cállate Felix!— le ordenó mientras se ponía de pie de manera repentina. —Tengo que ir a detener esa salida lo antes posible— soltó, desapareció cuando cruzó la sala y doblo a la derecha, el sonido de la puerta siendo cerrada no tardó mucho en escucharse, indicando que el chico se había ido, probablemente corriendo, de la casa. Félix me lanzo una miradita mientras reía y se ponía de pie nuevamente.
A veces, Felix era tan malvado, ¿Dónde guardaba tanta maldad? ¿En esas pecas tan lindas?

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Hi, Jelou -u- ¿Cómo les va?
Perdón si no actualicé ayer, estaba de vacaciones en el mar UwUr

Me la pasé muy bien por si se lo preguntaban -u-
Pero no encontré a mi amor de verano :'v

Ahí les dejo unas cuantas fotos, las demás las subí a Instagram UnU

Espero que el capítulo de hoy les haya gustado ^-^