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Una vez en su apartamento, Lauren se percató de que Lucy había destruido algunas cosas del lugar, incluso sus fotos juntas que tenía guardadas en una gaveta.

Lauren buscó a Lucy por todos los rincones del apartamento, pero no había rastro de ella.

Eso era preocupante.

Dejó sus pertenencias tiradas en el sofá y salió de su apartamento rápidamente.

Por favor Lucy contesta.–Susurró mientras marcaba el celular dentro del elevador, pero Lucy no contestó.

Al llegar al lobby le encargó a una de las chicas que trabajaba en el lugar, que si veía a Lucy en algún momento, le notificara, y continuó caminando a paso ligero hasta el estacionamiento.

Una vez allí vio que la camioneta de Lucy no estaba, por lo que volvió a marcarle, pero nuevamente, no respondió.

Sabía que lo que había hecho estaba mal, y que no debió tratar a su chica así.

Lauren y Lucy se conocen desde pequeñas, y algo que muy bien Lauren sabía de Lucy era que cuando algo le dolía, se iba lo más lejos posible y cometía cualquier locura.

Y sí que era una locura.

* * * * *

En la mente de Camila solo aparecía el rostro de esa preciosa y delicada mujer. Esa mujer misteriosa la cual le dejó su numero en su vestido.

Tomó el pequeño pedazo de papel y lo observó.

Por alguna razón la chica no escribió su nombre, sino solo una "L", junto a un corazón.

Vamos Camila, llámala.–Susurró con los ojos cerrados.–Esta es tu oportunidad.–Continuó, y marcó.

Espero y espero, y unos segundos después, se escuchó una dulce voz en el otro lado de la llamada.

¿Bueno?–Habló la misteriosa chica.

Eh, hola. Soy la chica a la que le dejaste el número de...

Si llamaste. Estoy sorprendida.–Interrumpió casi gritando emocionada.

Sí.–Rió.–No sé como me atreví a hacerlo.–Esta vez la chica rió, y luego ambas lo hicieron.

¿Estás ocupada? Digo, son las 12 de la madrugada, pero conozco un lugar bonito para ir.

Pues no.

¿Te gustaría salir conmigo esta noche?–Preguntó sin problema alguno, cosa que sorprendió a Camila.

Va, me arreglo y nos encontramos.

La chica le dió la dirección a Camila y al terminar de arreglarse, fue hasta allá.

Una vez allí, se encontró con la chica, en un pequeño puente frente a una cafetería en la playa.

El lugar era tranquilo, y muy bonito. A lo lejos se podía ver la ciudad iluminada, y se podía escuchar música a lo lejos que combinaba con el ambiente.

Estás muy hermosa.–Habló la chica mientras observaba a Camila.

Gracias, tú igual.–Sonrió mirándola a los ojos, los cuales brillaban demasiado, pero no era por algo bueno.–¿Estás bien?–Preguntó Camila una vez se dio cuenta.

Sí.–Suspiró y miró hacia el lado opuesto para que Camila no pudiera ver las lágrimas que ya caían por sus mejillas. Camila simplemente asintió no muy convencida y miró hacia la ciudad, haciendo que su mente volara.

El celular de la chica sonó, y eso sacó a Camila de sus pensamientos, más bien recuerdos.

Camila miró a la chica que parecía estar frustrada y pasó su mano por su hombro para calmarla.

De un momento a otro la chica besó tiernamente los labios de Camila, pero el celular volvió a interrumpir.

La chica sacó su celular y Camila alcanzó a ver quien llamaba.

Era Lauren.

Esa chica era la novia de Lauren.

Esa chica era Lucy.

Los dejo con la intriga nuevamente jaja pero no se preocupen, publicaré otro capítulo en unas horas.

No olviden votar.

Gracias por leer.

Vecina Caliente; CamrenWhere stories live. Discover now