El rostro del asesino (Malec)

26. Yo maté a Imasu

Porque puedes ver el mundo en colores que otros no ven. Porque me siento bien cuando estoy contigo. Porque cuando estoy cerca de ti comienzo a ver los colores como tú lo haces.
(Jet Mikles)

* * *

POV MAGNUS

Una semana después de que Ragnor me dijera que quería que alguien estuviera conmigo y me quisiera cuando él ya no estuviera, no puedo dejar de pensar en ello.

Él dijo que era sólo un decir, que no estaba enfermo gravemente o de muerte, que no pensaba renunciar, mudarse de ciudad, ni dejar de ser mi amigo o cualquiera de las cosas absurdas que se me ocurrieron -absurdas según él-.

No me engaña. Después de conocernos por tanto tiempo, sé que me miente. Algo pasa y no me lo dice.

Un sonoro suspiro de Alexander me saca de mis pensamientos. Volteo a tiempo de verlo dejar sus lápices y su bloc en el sofá y caminar hasta la cama, su cama.

De nuevo estamos en su casa.

Habíamos comenzado con él dibujándome... "Hay algo en tu mirada hoy -me dijo en cuanto entre-, hay vida, como si un velo se hubiera deslizado lejos y por fin tus ojos me vieran realmente, el disfraz que usas que oculta tu verdadero rostro empieza a caer...", pero entonces mis pensamientos fueron hacia Ragnor y...

Él comienza a gatear hacia mí, hasta sentarse sobre mí. Sus ojos buscando los míos, sus manos acunando mi rostro cuando se acerca y me besa, tan lento, tan suave, y aun así me corta la respiración, se lleva todo mi aire, mis preocupaciones, mis pensamientos...

-Dime qué te pasa -suspira al separarse, rompiendo el beso sólo lo suficiente para hablar, sus labios todavía rozando los míos-. Algo te preocupa, Magnus. Confía en mí. Quiero lo mejor para ti, quiero ayudarte, no sólo con lo de Imasu, o no sólo dibujarte, quiero que me dejes entrar a tu vida y tu corazón. Que tú quieras estar en la mía.

Me pierdo en esos ojos azules, a sólo centímetros de los míos, y estaba a punto de confesarle lo sucedido con Ragnor, de decirle que no soy el asesino, que sólo le mentí porque tenía miedo de lo rápido que me estoy acostumbrando a él, a como él me ve como si realmente fuera bueno y valioso, cuando su móvil sonó.

Alexander gruñé, pero le digo que responda. Su expresión cambia de molestia a sorpresa y luego todavía más molestia y dice varias veces que "¡Eso es imposible, Jace!". Es obvio para mí que evita mi mirada. Al final, después de un "Voy para allá", cuelga. Sigue sin mirarme.

Entonces mi propio móvil suena.

POV ALEC

Jace, como era de esperarse, llama también a Magnus.

Resulta que, en una segunda investigación en el hotel, encontraron que en la habitación de en frente había ropa que podía comprometer a Magnus, y fue alquilada por alguien que no dio su nombre y pagó muy bien, pero nunca regresó las llaves ni retiró sus cosas. Los encargados del hotel las guardaron, como siempre hacen, pero nadie las reclamó.

Iban a revisar nuevamente las cámaras de seguridad mientras Jace, y yo, hacemos un nuevo interrogatorio a Magnus -el sospechoso- y Camille -la testigo-, si ella pudiera recordar la ropa del asesino, si Magnus puede comprobar que no estuvo en esa habitación...

Apenas puedo respirar cuando llegamos a la Central. Yo unos minutos antes que Magnus para no levantar sospechas.

A Camille, que tiene una gran sonrisa cuando llego, ya la han interrogado Jace e Izzy.

Cuando Magnus llega, Jace le muestra la bolsa con las pertenencias dejadas en el hotel, antes incluso de que podamos preguntar si las reconoce, él lo confirma: -¿Qué hacen mis cosas aquí? Pensé que estaban perdidas...

No. Por dios, no.

El rostro de Jace se endurece cuando explica dónde estaban. -¿Sigue diciendo que es inocente, señor Bane? ¿Sigue sin querer usar su coartada?

Magnus no me mira. Sus ojos están en la bolsa. -¿Puedo verlo más de cerca?

Jace lo permite, aunque sin sacarlas de la bolsa en que están por su protección.

Algo cambia en la mirada de Magnus. Hay resolución ahí cuando vuelve a hablar, todavía sin mirarme: -Es mío. No tienen que buscar ni investigar más. Fui yo, no pude soportar que Imasu hubiera querido violarme y lo maté. Fui yo. Arréstenme y cierren la investigación, por favor.

Jace sonríe y está empezando a explicarle su situación. Y sé lo que parece, pero estuve con él y sé que no es culpable.

-¡No! -mi grito hace que Jace me mire mal, Magnus sigue tranquilo, como si yo no existiera.

-¿Qué te pasa? -me gruñé Jace.

-¡Él no fue!

-¡Está confesando, Alec!

-Él. No. Fue.

-¿Cómo lo sabes?

-Tiene una coartada.

-Una coartada que no quiere usar y acaba de confesar. Para mí, es culpable. No me importa lo que era Imasu, pudo poner una denuncia y no hacer justicia por su propia mano. Punto.

-¡Jace!

-Alec, sal si no puedes hacer esto... ¿Y usted -se dirige a Magnus sin esperar que yo hable o salga- quiere llamar a su abogado para una declaración escrita?

-Jace...

-¡Alec, sal, maldita sea,  y déjame hacer mi trabajo!

-Jace, soy yo. Soy su coartada.

CONTINUARÁ...

Ya están por saber quién es el asesino, así que la historia se acerca a su final 💔