Amor Inmortal [COMPLETA]*

Capítulo XXXI. La unión hace la fuerza.

El chico señaló su gema de su cinturón, para luego sonreirle a Mu.

Leonor: Hermanos, iré junto a ustedes- dijo, mirando a la nada, su vista se volvió borrosa- Seremos felices en la eternidad.

Pero antes de expirar, Kanon le presionó un punto donde impidió la hemorragia. El otro chico se sorprendio por lo que hizo y se sonrojo.

Kanon: Seré malo y manipulador, pero también tengo conciencia, pero...- dijo, para luego señalarlo de manera amenazante- ¡Déjanos en paz!
Leonor: Ehh...- dijo, mirando los ojos de Kanon y con las mejillas rojas- S-si... Señor.

Saga no le gustó ese sonrojo, aunque debía de admitir que su hermano era muy bondadoso desde que está al servicio de Saori. Sip, este había cambiado por completo.

En otro lado, Seiya combatía contra el Titan. Era muy fuerte y Seiya ya se estaba quedando sin fuerzas.

Seiya: ¡Maldición! Es muy fuerte- dijo, lanzando otro ataque pero el Titan lo evadio.
Hyoga: ¡Seiya!- dijo, lanzando un ataque de hielo al Titan, pero este rompió el hielo que lo retenía.
Shun: ¡Hyoga!- le llamo- Que tal si usas el mismo truco que hiciste cuando uno de los caballeros de plata secuestro a Saori- sugirió.
Shiryu: ¡Buena idea, Shun!- apoyo.

Hyoga invoco su poder e hizo lo mismo como aquella vez. El Titan, al no tener escapatoria, Seiya lo golpeó y al fin, acabaron con el y fueron hacia el centro del templo. Solo había escombros y no hallaban a nadie, excepto...

A1: ¿Que hacen ustedes aquí?- pregunto, incredula.
Seiya: Somos los caballeros de Athena, soy Pegaso.
Hyoga: Yo soy Hyoga de Cisne...
A1: Sé quienes son, pero...- los miro de reojo- ¿Que hacen aquí los caballeros de Athena, cuando deben de salvarla?
Shun: ¿Eres amiga o enemiga?- pregunto, en pose defensiva.
A1: Eso depende de lo que pienses, Shun de Andrómeda.
Shun: ¿Cómo sabe mi nombre?- pregunto, asombrado.
A1: Porque soy alguien que no deben hacer enfadar, créanme, hasta yo me desconozco.... ¡¿Pero que hacen aquí?! ¡Largo! ¡Vayan con Athena y salvenla!
Shiryu: Gracias- dijo, saliendo de ahí junto con los otros.

Cuando salieron...

Seiya: ¿Quién será?- pregunto, avanzando a la salida.
Hyoga: No lo se, pero se veía amigable- dijo, un poco pensativo.

Shun no lo tomo para nada bien y lo miro enojado.

Shiryu: Sea quien sea, no me gustó su mirada- dijo, bajando por la montaña con los otros.
Shun: Su mirada... Era diferente a la de nosotros...- dijo, pensativo- ¿Quién será?

Dejando eso de lado, nuestra desconocida veía todo desde las alturas.

A1: Espero y lo logren,- mira hacia el cielo- No seas cruel y ayúdanos.

Por otro lado, los demás caballeros llegaron al centro del templo de Eos. Cada uno llevaba una gema y Saga y Kanon llevaban de prisionero a Leonor.

Shaka: ¿Es uno de ellos?- pregunto, mirándolo de pies a cabeza.
Saga: Despreocupate, que el que le dará una paliza seré yo.
Leonor: Las gemas harán que se recupere su diosa, pero aún estará débil- dijo, con la mirada baja.
Kanon: ¿Por qué lo dices?- pregunto, amenazante.

El otro no respondió, solo se sonrojo. Saga no le agradaba ese tipo y no dejaría que nadie le arrebataran a Kanon.

Aioros: ¡Señorita Athena!- dijo, llegando con Shura, ya mejor y con Shion- ¿Donde está?
Milo: La buscamos pero no la hallamos, no sabemos donde está y su cosmo es muy débil.
Camus: Creo que se en donde está, miren- dijo, señalando una esfera.

Todos miraron hacia la dirección que apunto Camus y vieron a Hades y a Poseidón en unas esferas blancas y ellos se veían como estatuas.

DM: Ahí tienen lo que merecen- dijo, burlón.
Todos menos DM: ¡Death Mask!

Pero Aioros observó atrás de ellos y vio a Saori, estaba pálida y su color de cabello había cambiado a gris, como el de una anciana.

Aioros: ¡Athena!-grito, horrorizado.

Todos vieron esa escena. La diosa Athena estaba sin vida y su único poder era un pequeño brillo que tenía en sus labios.

Shura: ¿Qué hacemos, Patriarca?- pregunto, mirando a Shion.

Todos lo miraron y el solo cerró sus ojos y guardo silencio. Después de un rato, abrió sus ojos y ordeno:

Shion: ¡Traigan el báculo de Athena!-ordeno.

Aioros y Shura fueron por el, los otros solo esperaron por lo pedido. Leonor vio como algunos se llevaban bien y peleaban como niños pequeños, tanto que le recordó su infancia con su hermanos y compañeros.

Leonor: Patriarca- llamo, Shion lo miro- Necesito hacer una prueba.
Shion: De acuerdo- dijo, no muy seguro.

Leonor extendió su mano a los caballeros.

Leonor: Denme las gemas de mis hermanos- pidió serio.

Todos se miraron, no les pareció buena idea.

Saga: Y, ¿Si intentas escapar o destruirnos?- dijo, con dureza.
Leonor: No lo haré, confíen en mi- dijo, mirando a Kanon.
Shion: Dénselo- ordenó.

Todos acataron la orden y el joven se inclinó hacia Saori y elevó sus manos al rostro de Saori.

Leonor: Diosa Eos, dios Titono,- dijo, con una potente voz- Hermanos...- dijo en un susurro- Permítanme usar este poder para que la diosa Athena pueda vivir- dijo, mientras brillaban las gemas como estrellas- ¡Por favor!

Pero no sucedió nada, Saori aún estaba inconsciente.

Leonor: Imposible...- dijo, arrodillandose- Debería de funcionar.
Aioros: Patriarca- llamo, ganandose la atención de los demas- Aquí está el báculo de Athena.
Shion: Gracias, Aioros- lo tomo.
Shura: Patriarca, ¿Que piensa hacer?
Shion: Ya veran- dijo, esbozando una sonrisa.

Shion elevó el báculo y lo coloco a la altura de la esfera que contenía la diosa.

Shion: Señorita Athena, por favor, oiga la voz de sus caballeros, despierte- suplico.

Pero fue interrumpido el ritual cuando una fuerza estampo a Shion contra un pilar. Todos se pusieron en guardia.

Titono: Pero miren que tenemos aquí,- dijo, apareciendo en escena- los inútiles caballeros de Athena, la pagana.
Shaka: Maestro Dohko, ¿Que cree que dice?- dijo, furioso.
Titono: Hmm, no soy Dohko- dijo furioso, extendiendo una espada- mi nombre es... ¡Titono!- grito.

Shion, con trabajo podía levantarse, pero eso no significaba que lo hirió por completo, sino fuera por Nike, no estuviera respirando. Y esto solo era el principio.
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Continuará...