SINGS (JUNGKOOK Y TÚ)- Short Story [+18]

「4」+18

"Cortaré aquí para seguir ahora" –Dijo él tras la cámara.

"Nos está quedando bien, creo" –Añadí. Kookie asintió.

"Toca la conversación en pareja" –Asentí de nuevo. Kookie dio a un botón y se volvió a sentar frente a mí. Conversamos cortamente hasta que...

"Nunca te he preguntado, ¿Cómo acabamos así?" –Me cogió muy de sorpresa su pregunta. Respondí intentando seguir el juego.

"¿Así como?"

"Hablando, pero sin hablar" –Sonrío.

"Hay muchas cosas que no sabes de mí, cielo" –Añadí, bebí de mi copa.

"¿Ah sí? Bien, ahora quiero saber más"

"¿Más?"

"Antes de mí... ¿Cuántos hubo?" –Su pregunta me resultó demasiado personal.

"Eso ya lo sabes"-Dije intentando no fastidiarla. Kookie sorbió de su copa, me examinó bajo una atenta mirada.

"No. No lo has entendido" –Dijo algo serio- "Quiero, saberlo" –Luego se dejó caer en la banqueta, y dejó escapar un soplido, lo que hizo que me erizara. Por lo que veía, la conversación estaba siendo muy seria. Levanté uno de mis dedos, esa fue mi respuesta- "Para solo haber tenido un novio, pareces muy cercana al amor" –Dijo con una sonrisa. Yo medio sonreí- "¿Él también era así?"

"¿Así cómo?"

"Mudo" –Negué.

"Tenía una voz muy varonil"

"Yo también" –Sonrió juguetón y enarcó una ceja. Mi pecho subía y bajaba cada vez más rápido. Jungkook y yo nos quedamos en silencio y mirando a los ojos. De repente él se alzó hacia delante, haciendo sonar la banqueta levemente- "¿Te gustaría oír mi voz?"

"No, gracias" –Dije educadamente, el tono de la conversación me estaba poniendo nerviosa. Kookie sonrió.

"Eres preciosa" –Dijo finalmente, y sonrió muy dulce.

"Eres muy guapo" –Dije. Me salió del alma, notaba el calor en mí. Kookie pareció sorprendido. La cámara se apagó de repente, fruto de mis despistes al no cargarla, pero no nos importó, nos seguimos mirando y hablando en el mismo tono- "Me gustan tus labios" –Me atreví a decir. Kookie fue sonriendo cada vez más.

"Me gusta todo de ti" –Dijo. De nuevo el silencio.

"Quiero quitarte la ropa" –Kookie me miró desafiante, enarcó una ceja.

"No podrás hacerlo en la distancia" –Sonríe. Avanzo hasta quedarme ante él, justo como me tenía antes, entre sus piernas. Mis manos se deslizan sobre el cuello de su suéter, miro sus hombros firmes, sé que él me está mirando. Deslizo mis manos levemente por su cuello y luego alcanzo hasta su nuca, ascendiendo con mis dedos hasta su cabello y lo aprieto, en ese instante Kookie me pega a su cuerpo y sonríe. Nos miramos. Abre su boca, queriendo decir algo, pero duda antes de hacerlo. Asiento levemente. Es como si temiéramos que la magia acabara.

Movida por la excitación dejo caer mi oído lo más cerca de su boca, haciendo que su respiración llegue a mí. Él está muy agitado, tanto como yo. Espero paciente, pero lo que recibo, son besos suaves en mi lóbulo desnudo. Gimo sin querer ante el contacto, y eso lo vuelve loco. Desliza su otra mano dentro de mi vestido, al ver que no me opongo, desliza sus dedos dentro de mi intimidad. Sus dedos hábiles me frotan suavemente, yo no puedo contenerme y gimo cerca de su oreja, noto como está feliz con lo que oye. Me hace mirarlo de repente.