Paris

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Amsterdam, 2015

Fueron tres largos días esperando una respuesta y finalmente, cuando ya casi nos habíamos resignado, aparece Dylan con su notebook saltando sobre los sillones mientras que el resto de la familia tomaba un respiro luego de un almuerzo abundante.
La respuesta del historiador había llegado en un momento inesperado y no supe cómo manejarlo, todavía ni había hablado con mi esposo respecto a todo aquello de un posible viaje a Paris con los dos chicos en busca de la historia de una figura desconocida y casi olvidada por todos, de no ser por esa única fotografía de un cuadro en la época victoriana.
Dylan nos leyó el mail que decía así:

"Estimado señor, lamento la demora de mi respuesta aunque espero que comprenda que no soy un hombre de mucho tiempo libre, sobre todo ahora que estoy a punto de publicar un nuevo libro.
Sin duda alguna me ha llamado la atención su archivo adjunto y debo de decir que es simplemente inquietante y me gustaría conocer a su madre en persona para hablar respecto a la joven del cuadro. Es algo que ya casi me había rendido a investigar, pero no porque dejara de interesarme. Si lo creen conveniente y se encuentran en condiciones, pueden visitarme un día de estos. Le dejo la ubicación de mi despacho personal a continuación."

-¡Mamá, nos invitó a verlo! ¡Podremos saber de qué se trata! -Exclamó Dylan con una amplia sonrisa en su rostro y yo permanecí boquiabierta al no saber qué decir, mi esposo tan sólo me miraba sin comprender y Demian sonreía aunque con menos intensidad que su hermano aunque claro, sólo porque era reservado pero no quería decir que la idea lo estaba volviendo loco de emoción.

-Wow, wow... Esperen... ¿De qué me perdí? -quiso saber Thomas y los chicos no tardaron en ponerlo al tanto de todo, y mucho menos de pedirle autorización para el viaje a Paris.- Entonces... ¿Quieren decir que ahora son investigadores históricos?

-Vamos papá, no puedes negar que es muy misterioso todo y que sería increible saber si algo une a mamá con la historia de Francia -dijo Demian.

-No, niños... Su padre tiene razón, viajar y hacer tanto por simplemente una curiosidad es una locura -dije yo comenzando a levantar los platos de la mesa.

-Espera un momento Lena, yo jamás dije que fuera una locura...

A la mañana siguiente, nos subimos al auto luego de despedir a Thomas y le prometimos que le llamaríamos en cuanto llegáramos al hotel que habíamos reservado la noche anterior. Él no tenía problema alguno con todo aquello, es más, de no ser por la montaña de trabajo que lo mantenía más fuera de casa que dentro de ella, nos hubiera acompañado.Los mellizos llevaban fotos del libro que habíamos visto en la biblioteca, otros libros donde hablaba del Rey Antoine V e inclusive habían preparado una especie de árbol genealógico para ir volviendo al pasado en caso de que realmente se me vinculada con la muchacha del cuadro. Fotos mías, las notebooks y cuadernos en blanco para llenar. Ellos iban muy preparados para todo y yo simplemente había hecho mi bolso con muda de ropa para una semana, no tenía planeado quedarme más tiempo, no tenía idea cuánto podría tomarnos, pero sabía que podría ser divertido.
Por más de que aquello no llevara a nada o fuera una simple coincidencia, valía la pena aquel viaje, pues al menos conocería Paris y no voy a ser hipócrita... Moría de ganas de caminar sus calles, de sentir sus perfumes y escuchar el idioma en cada rincón.
¿Quién no quisiera conocer París?

SeleneWhere stories live. Discover now