Siguiendo el rastro

63 9 0
                                    

Ámsterdam, 2015

Estábamos tratando de comprender cómo era posible todo aquello y con tanto tiempo libre, habíamos decido rastrear la historia de aquel antiguo cuadro. Mis hijos estaban más emocionados que yo misma y créanme, era sumamente emocionante verte clonada como si hubieras tenido otra vida o viajado por el tiempo; de golpe encontrarte en un cuadro de historia mundial al otro lado del mundo. Por supuesto que yo estaba muy emocionada, pero no tenía la menor idea de por donde comenzar y por ese motivo, decidí dejar todo en manos de mis hijos. 

Luego de aquella visita al museo, dejé correr los días y una semana después, aparecieron en la sala con muchos libros, fotos y sus notebooks a cuestas, me hacía pensar en que no podía decir que había hecho mal con ellos, aún sin saber nada de la vida al momento de quedar embarazada, ellos eran mi orgullo más grande y sabía que llegarían muy lejos.

Se habían tomado el trabajo de seguir los rastros que pudieran encontrar de aquella pintura y lo que habían logrado hallar, fue lo que me comunicaron aquella tarde.

-Madre, tenemos noticias -dijo Demian sentándose a mi lado. Yo estaba muy tranquila revisando mis correos cuando ellos dos salieron de su cuarto para reunirse conmigo. Me acomodé dejando de lado la tablet y escuché lo que tenían para decirme, pues si bien no había movido un dedo para saber de aquella jovencita idéntica a mi, estaba muriendo de curiosidad.

-Resulta ser que ese cuadro, por lo que pudimos traducir, pertenece a parte de la familia Real de Antoiné V, Rey de Francia en el siglo XVI -agregó Dylan sentado en el sillón particular y me mostró una fotografía de otro cuadro, el cuadro de aquel Rey Francés- Pero lo curioso, es que esa joven idéntica a tí, no es nombrada. No es reconocida realmente, tan sólo se dice que podría ser una hija no reconocida de dicho Rey.

-El cuadro ha sido modificado en un momento no definido, se cree que antes de que el Rey Antoine dejara de gobernar, pero no se sabe el motivo de dicha modificación... -Continuó Demian al tiempo que volteaba su noteboook para mostrarme la imagen de un cuadro, el mismo del libro, pero sin mi toppelganger en él.- Ésta es la versión que hoy en día está exhibida en el museo de bellas artes en París, con un  viaje de seis horas, ya estamos allí y lo visitamos. ¿Qué te parece?

-Un momento, paren un poco.... -les digo procurando ser paciente- ¿Pretenden ir hasta París sólo para ver esa pintura? Creo que están abusando de mi curiosidad para sus ambiciones de niños exploradores.

-¡Oh, vamos mamá!-suplicó Dylan-Esto podría significar un hallazgo enorme para la historia, quizás descubramos algo que jamás se supo. O quizás no, pero al menos es algo que hacer mientras tanto. Además, imagínate si descubres que tienes sangre francesa, que un antepasado tuyo sea hija de un Rey es algo que no siempre ocurre.

-Si fuera una hija no reconocida de un Rey, esa muchacha debería de aparecer o al menos ser nombrada en todos los libros de historia, por más que fuera una hija bastarda. Los hijos de Enrique VIII son reconocidos, al menos se le conocen sus nombres y quién fue su madre. Esta muchacha ahí dibujada no tiene registro alguno, estaríamos yendo tras algo invisible, algo sin certeza de que exista siquiera.

-Bueno, pues tengo buenas noticias -dijo Demian con una enorme sonrisa en los labios, había estado esperando que me negara rotundamente sólo para sorprenderme y hacer que me retractara-  Resulta que hay un historiador en París que por un tiempo considerable estuvo estudiando al Rey Antoine y se había topado con esta noticia de un supuesto hijo bastardo que fue sumamente importante para él, tanto así que se cree que fue la razón de su locura y muerte. Ha estado mucho tiempo tratando saber qué fue de ese hijo o hija, la aparición de este cuadro poco popular hizo más fuerte la teoría de que sea una hija pero se desconoce el motivo de su destierro, pues nada dice de esa muchacha. Algo pasó que se la quitó de la historia, literalmente, pues habían enviado a modificar aquel cuadro para quitarla de él.

-Ordenes del Rey, o bueno... eso creemos nosotros... El caso es mamá, que intentaremos comunicarnos con ese historiador para una reunión. Saber que puede contarnos, sería divertido y sumamente interesante.

Dylan era toda una luz, pero una que soñaba mucho. Yo no dejaba de pensar que todo aquello era una locura y que no podía sumergirme en fantasías de niña investigadora en esos momento, no sabiendo que iba tras de algo difícil de hallar aunque no poco valioso, pero si muy difícil de conseguir y siendo algo tan lejano no me convencía del todo que fuera algo crucial para mi vida.

Podía seguir con mi vida sin saber quién era esa jovencita y podía continuar con mi vida aunque moría de deseos y de intriga por saber quién había sido y cómo era posible que yo fuera idéntica a ella. Nuevamente les aseguré que era una locura y que de muy poco serviría intentar aquello, pues no teníamos las herramientas para una investigación como corresponde. Pero mis hijos me sorprendieron nuevamente y me dejaron boquiabierta.

Dyland me enseñó un mail que le había enviado a este historiador hacía tan sólo diez minutos. Era nada más y nada menos, que dos fotos: Una de la muchacha en el cuadro del libro y otra de mí en mi adolescencia.

-Si nos responde... -quiso saber Demian- ¿Iríamos a París, madre?

SeleneWhere stories live. Discover now