Derritiendo Tu Frío Corazón- N°5 Serie Amigos de la Realeza

Capítulo 21 "¿Comenzamos de nuevo?"

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Miré el reloj de pared y suspiré. Danilo se ha tardado en bajar. Le di un sorbo a mi taza de café. Julia nos preparó unos sándwich de jamón y queso con una jarra de café. Estaba nerviosa con lo que ocurriría ahorita. Podía entender el carácter frío y déspota de Danilo, fue su forma de escudarse ante el dolor. Y no es para menos. Tener unos padres como los suyos es lo peor que le puede pasar a un niño. Una madre alcohólica, drogadicta, desapegada, maltratadora y... bueno son tantos los calificativos que me cansaría de tan solo pensarlos. Y un padre también desapegado que lo ignoró durante toda su niñez. Una vida nada fácil. Nunca ha sido querido y amado. Y a un hombre así siempre le será difícil cambiar y aceptar que alguien lo pueda querer. Escuché ruido y me levanté al verlo entrar a la cocina. Se veía incomodo y con la mirada perdida. Le sonreí con ternura.

- Siéntate Dan, te servire una taza de café... ¡Ah! Pero antes tómate la aspirina y ahí está con un vaso de agua---se la señalé mientras sacaba una taza de cafe--- ya verás que eso aliviará tu dolor de cabeza---Danilo asintió e hizo le que le dije. Se sentó en una de las butacas. Cuando terminé le tendí la taza de café y luego le serví en dos platos los sándwich--- deben estar buenísimos. Julia cocina espectacular. Así que buen provecho--- me senté al frente de él y comencé a comer. Danilo me veía con intensidad, pero no dijo nada. Solo me imitó y se comió el sándwich. Cuando terminamos, me serví otro café---¿quieres más café?

-Si por favor---respondió Danilo. Le serví el café y nos quedamos en silencio. Al rato Danilo suspiró y me observó con intensidad--- Clare.. anoche... yo...---Danilo balbuceaba las palabras

- Danilo no te voy a juzgar---lo miré con intensidad--- Si crees que te voy a compadecer olvidalo. Ya eres un hombre hecho y derecho. Si te puedo decir que me me da coraje lo que me contaste de tu madre. Era una arpía que no merecía tener hijos, sin embargo naciste tu y eso hay que agradecerlo. Si lo pienso bien, lo unico que si compadezco es al niño que alguna vez fuiste. Todos merecemos amor, en especial de nuestros progenitores---agarré su mano y la apreté--- y siendo niños esperamos eso---Danilo me observaba con intensidad sin decir nada---se que te odias ahorita mismo por haberme contado tu pasado. Eres tan cerrado que para ti eso es como pecado capital, pero Dan no puedes vivir toda la vida con eso. Muchas veces necesitamos desahogarnos para seguir con nuestras vidas---Danilo miró mis manos mientras yo hablaba--- todas las mujeres que han estado contigo han sido una basura, pero no todas somos así Dan. Yo no soy así y mis amigas tampoco---me quedé callada. Duramos unos minutos en silencio hasta que Danilo se levantó e hizo que me levantara para abrazarme con fuerza. Escondió su cara en la curva de mi cuello y podía sentir su fuerza de voluntad para no derrumbarse. Su cuerpo temblaba por las emociones reprimidas. Yo solo lo abracé con  fuerza y acaricié su nuca para darle ánimos. Duramos así un buen tiempo, hasta que él recuperó su temple y se separó de mi

- Gracias por tus palabras Clare---acarició mi mejilla--- supe desde la primera vez que te conoci que serías única. No se como lo haces, pero sabes como me siento y lo que pienso. Y aunque eso me perturba porque nadie ha podido hacer eso, tambien me agrada---tomó una de mis manos y besó mis nudillos---quiero decirte que sinceramente lamento todo lo que te hecho. Se que pasará toda mi vida para poder recompensarte por todas las humillaciones que te hice. No creo que yo mismo me perdone. Lo de mi madre...---su voz se cortó. Le coloque un dedo su boca.

- Cuando te sientas preparado para destapar tu corazón para hablar de tu madre en un estado totalmente sobrio, estaré ahí para ti Dan. Siempre lo estaré---acaricié su mejillla--- y con respecto a tus disculpas, las acepto, y te digo que es algo dificil para mi porque me has tratado como una prostituta desde que nos conocimos, y a pesar de eso te perdono, pero créeme que no será tan fácil para ti recuperar lo que siento por ti. Necesito saber que vas a cambiar y no volverás a tratarme así---lo miré fijamente--- porque no me voy a dejar Danilo. Soy capaz de cortarte en pedacitos muy cortitos---Danilo sonrió levemente

- Pero tu...--él me observó aturdido--- tu me dijiste ayer que me odiabas y no querías saber nada de mi

- Es cierto, lo dije, pero decirlo no quiere decir que sea verdad---exclamé con una mueca--- A veces te odio, y otras no. Dependerá de tu comportamiento Dan. Tus palabras pasadas aun me duelen aquí---señalé mi mente---y sobretodo aquí---señalé mi corazón--- Fuiste muy malo Dan y es muy dificil de olvidar todo eso, pero haré el intento, si tu cambias de ser---el rostro de Danilo era un poema de confusión y contradicción--- tal vez creas que cambié de la noche a la mañana de pensamiento y puede ser así. Al entender porque eres así, hizo que te viera de otra forma mucho más profunda---él arrugó el rostro. Sonreí---y con esto no quiere decir que te tengo lástima, porque amigo mío, dejame decirte que eso es lo último que siento por ti. Es solo que te entiendo y quiero darte una oportunidad de cambiar---él suspiró y asomó una leve sonrisa en la comisura de sus labios.

- Gracias por darme una oportunidad Clare. Quiero que comencemos de nuevo---él  cerró los ojos unos instantes, respiró hondo y al abrirlo noté un cambio en ellos. Se veían más amables. Extendió su mano derecha--- Hola, me llamo Danilo Álvarez y llevo mucho rato observándote mientras bailas por el salón----sonreí por su intento y extendí mi mano para estrecharselo

- Soy Clare Payne y déjame decirte que desde que llegaste al salón mis ojos no se apartan de ti---Danilo sonrió y pasó su mano por mi cintura y me apretó a su cuerpo.

- Entonces nuestras emociones están en total sincronía---comentó él con una hermosa sonrisa. Mi corazón latió desbocado.

- Si eso creo---exclamé con una sonrisa. Podía ver el claro deseo de Danilo por besar mis labios, y estoy segura que él puede ver el mío, pero no se lo podía poner fácil. Sonreí traviesa, besé su mejilla y me separé de él. Danilo me miró confundido y sonreí--- señor Álvarez se que quiere besar mis labios, pero no quiero que piense que soy tan fácil así como para besarlo la primera vez de conocerlo---Danilo me observó con intensidad y suspiró para luego sonreír.

- No podría pensar eso señorita---ambos sonreímos---Se que te hecho mucho daño Clare, pero te retribuiré toda mi vida. Cambiaré y te lo demostraré---él me observó con intensidad--- ¿Entonces comenzamos de nuevo Clare?--- lo miré con cariño y sonreí.

- Comenzamos de nuevo Danilo...