Derritiendo Tu Frío Corazón- N°5 Serie Amigos de la Realeza

Capítulo 13 "Feliz y..."

Un cosquilleo en mi espalda, fue lo que me despertó. Abrí mis ojos confundida. Escuché la suave risa de Danilo y me despeje por completo. Jamás lo había escuchado reír. Al verlo acostado a mi lado, con la cabeza apoyada en su brazo, supe que no fue un sueño. Sonreí satisfecha.

- ¿Qué hora es?---pregunté acariciando su pecho.

- Las tres de la mañana---respondió él pasando su dedo índice por mi columna vertebral. Sentí escalofríos.

- ¿Estás loco? ¿por qué me despiertas a esta hora?---me queje. Danilo sonrió traviesamente

- ¿Es necesario que lo preguntes?---me quedé sin respiración--- te deseo otra vez---Danilo beso mis labios y me colocó encima de él---ahora tu tienes el poder. Puedes hacer lo que quieras---lo miré nerviosa. Acaricié su pecho y besé sus pezones. El excitado miembro de Danilo acariaba mis partes, así que lo agarré y lo conduje a mi interior con lentitud. Danilo apretó los dientes. Cerré los ojos y suspiré cuando lo tuve completamente dentro de mi. Comencé a moverme despacio. Luego cuando vi el rostro apasionado de Danilo me moví con más fuerza. Mis caderas se movían desesperadas. Danilo apretó y masajeo mis senos. Gemía de placer. Cuando por fin llegué al final del tunel grité por la liberación.

Aun con los estragos de ese orgasmo, Danilo sin aún separarse de mi, se sentó y se movió con fuerza. Lo miré sorprendida. En esa posición podía llegar mucho más profundo. Lo abracé con fuerza y sentí cada embiste de pasión. Mordi su cuello por los temblores que comenzaba a percibir. En mi interior algo explotó nuevamente dejándome en la casi inconsciencia. Danilo dejo caer su cabeza hacia atrás y gritó por la fuerza de su orgasmo. Sentí como me llenaba por completo. Ambos temblabamos. Danilo me arrastró con él hacia la cama y nos acariciamos con ternura. Sus susurros y acaricias me dejaron apaciguada. Y de un momento a otro, me quede dormida entre sus brazos.

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Los rayos del sol me despertaron. Recordé todo lo ocurrido y suspiré feliz. Estiré mi brazo para buscar a Danilo, pero el espacio donde se supone debería estar Danilo, estaba vacío. Abrí mis ojos y suspiré resignada. El día comenzó y lo de anoche sólo fue un sueño. Me levanté y mi cuerpo estaba totalmente adolorido. Me senté con una mueca. Si no fuese porque el cuerpo lo tenía destruido y me sentía satisfecha, pensaría que tuve un sueño salvaje. Vi la hora y era tarde. Ya iba a ser mediodía. Suspiré.

Observé toda mi habitación buscando algún indicio de que Danilo pasara la noche conmigo, pero nada. No había rastro de él. Solo mi ropa estaba desperdigada por el suelo. Me levanté despacio y fui al baño. Llené la bañera de agua caliente y luego me sumergí.

"¿cómo fue que ocurrió todo anoche?" pensé alucinada. No puedo creer todo lo que pasó. No si he hecho algo así con alguien en mi pasado, pero lo que hice con Danilo fue especial. Lo siento en mi alma. Él fue tan dulce y a la vez salvaje, que jamás borraré de mi memoria nuestro encuentro. Lo amaba. Loco, pero cierto. Cerré lo ojos y suspiré feliz. Era como un sueño.

Las únicas cosas que enturbiaban esta reciente felicidad son que primero no recuerdo mi pasado y cabe la posibilidad que este casada y segundo que Danilo es imprevisible. Nunca sé lo que piensa. Lo de anoche fue anormal. Es decir, se que me deseaba, pero ¿me amaba? en ningún momento de la noche me dijo que sentía por mi. El único momento que sentí una compenetración entre los dos, fue cuando le hice la promesa. Sin embargo, él no dijo nada de su parte. Lo que puede significar que solo me desea. Nada mas allá.

Suspiré con tristeza. "¿Qué va a pasar a partir de ahora?" Pensé reflexiva. Me terminé de bañar y salí con la toalla puesta. Busqué entre mis cosas la ropa interior y un pantalón de chandal y una blusa suelta. Peine mi cabello y luego me puse a recoger la evidencia de ayer. Guarde el vestido y las sandalias. Mientras arreglaba la cama, me percaté de la nota de papel que estaba en la mesa de noche. La vi curiosa. Era de Danilo.