Viviendo En Un Internado [Secuela De VCMH] [Editando]

31. Ya vienen

-Vamos, vamos, que ya llegaron.- Nos apura Sam desde la puerta de mi habitación.

-Tranquila, que tu amado te estará esperando aunque te demores...- Comenta Jane riendo y saliendo de mi habitación.

Y tiene razón.

Hoy es sábado y, además de volver a casa, es el cumpleaños de Chase.

No pueden imaginar lo emocionada que está Sam.

-¿Y? ¿Qué sorpresa le harás?- Pregunta Emma saliendo después de Jane.

Sam sonríe. -Es un secreto...

-Espera.- Digo deteniéndome frente a ella.- ¿Eso significa que no nos vas a decir?

Sam se encoje de hombros.

¡No me puede dejar así! Soy muy curiosa y su sorpresa me tendrá intrigada todo el día.

Antes de decir otra cosa más, Sam me empuja afuera de mi habitación y me obliga a seguir caminando.

Salimos del edificio y caminamos para encontrarnos con los chicos.

¿Quieren saber que ha pasado con Nate desde el jueves?

No ha pasado nada. Literalmente.

No nos vemos desde el viernes en la mañana. Y no es porque no hubiésemos querido, es porque simplemente no hemos coincidido.

¿Es extraño decir que lo extraño mucho? Por que lo hago. Y eso me asusta.

Al llegar afuera, caminamos hacia dónde nos encontraríamos con mi padre para que nos lleve a casa, pero en vez de eso, nos encontramos con dos autos. De ellos salen Jess y Chase.

Sam al verlo, corre hacia él y lo abraza con fuerza, gritando un fuerte: "¡Feliz cumpleaños!"

-¿Qué hacen aquí?- Dice Sam luego de llenar a Chase de besos en toda su cara.

-Venimos a buscarlos y aprovechando... Estrenamos el nuevo regalo de Chase.- Dice Jess apuntando al un nuevo auto aparcado en el estacionamiento, de donde salió Chase.

Un "Guau" masivo escapa de todos nosotros, observando el nuevo auto de Chase. Recién me doy cuenta que ya todos los demás están acá. Pero solo uno de ellos me importa.

Sí, lo sé, soné demasiado cursi.

Mi mirada se encuentra con la de Nate, haciendo que todo mi cuerpo se altere. Me sonríe y guiña un ojo.

¿Este hombre quiere que muera?

Mi respuesta es una sonrisa nerviosa. Luego de saludar a Jess y a Chase, además de felicitar a este, Jesse silba.

-¡Que auto!

Y sí que lo es, es... Lindo. No puedo decir más porque ni siquiera sé que marca es, ni mucho menos que modelo.

Todos reímos por lo emocionado que suena Jesse.

-¿Me dejas conducirlo? Por favor, por favor, por favor.- Le roga Jesse a Chase.

-Claro que no.- Dice Chase sosteniendo aún en sus brazos a Sam.- Por ahora.- Chase le sonríe a Jesse y él salta emocionado.

-Entonces, ¿En qué auto va quién?- Pregunta Jane.

-Yo quiero ir contigo, amor.- Dice Sam dándole un pequeño beso a Chase.

Bien, ellos ya superaron lo cursi.

Jane se queja. -Ya me dieron diabetes.

-¡Yo voy con Chase!- Jesse grita y entra rápidamente al auto de Chase. Kile lo sigue, lanzandole un beso a Jane.