Cap 34: Viaje al Planeta de Bills.

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Antes que nada, me disculpo (de nuevo :v) por no actualizar y ya saben el cuento :v. Como decía, aquí habrán cambios que tenga que ver con lo cannon en la serie, como leyes y teorías, etc. Quiere decir que algunas cosas que lean no serán iguales a como dice en el manga y anime, sólo para poder hacer concordancia con el fic (Aviso por si algo no les cuadra en el capítulo)

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-Whis.

-¿Si, mi señor?

-Supongo que estás a punto de irte.

-Exactamente, Señor Bills.

-Bien, asegúrate de no hacerla enfadar... Y si ves a ese Gako o Goku, como se llame ese saiyajin o a Vegeta, no dejes que te distraigan. Si es necesario, que se queden aquí donde no les pueda pasar nada.

-Entendido, señor. Ya me retiro.

-(Ten cuidado con esa engendro de ojos enormes...)- Bills asintió con la cabeza al ver a su ángel guardián desaparecer, siendo ahora el único en ese santuario junto al Pez Oráculo.- Dime una cosa.- Se dirigió al Pez antes mencionado que apenas había llegado- ¿Crees que todo salga como lo planeo?

-Ummm... Yo creo que si... - El dios soltó un suspiro de alivio-... Pero también creo que no... - Y ahora casi que se desmaya.

-¡No digas estupideces y dime la verdad!

-Ummmm.... La verdad es... Que no tengo idea de lo que me hablas.- Respondió el pececito de lo más normal, cosa que hizo a Bills caerse tipo anime.

-Agh, olvidalo, no tiene caso preguntarte.

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-Muy bien... Excelente, ya casi lo logras, pequeña...

-Ahh~... Me voy a caer~...

-No te vas a caer, yo sé que puedes.

-¡Niiiiii!- Con un gran impulso, Mary por fin estaba flotando en el aire, después de muchos intentos.- Hey... ¡Hey, Piccolo! ¡E-estoy volando!

-Ehh... Si, supongo que si... - Piccolo se dio cuenta de que en lugar de estar volando, las manos y pies de Mary expulsaban esa aura de color otra vez, haciéndola flotar.

-¿Pasa algo? ¿Estoy haciendo algo mal?- Preguntó la más pequeña tratando de mantaner el equilibrio.

-No, no es eso... ¿Puedes hacer que tu ki se propague en todo tu cuerpo mientras vuelas? Quizás se te sea más fácil.

-Mmm... No, no puedo. Estuve intentando hacer eso toda la semana y así fue como me resultó.

-Entiendo... - Él la miraba como si hubiese recibido un buen susto de su parte, pues esos poderes lo estaban impresionando cada vez más.

-Oye, creo que ya... Ya estoy bien... - Dijo poniéndose recta en el aire.

-Bien, ¿Qué esperas para empezar a dar una vuelta?- Preguntó impaciente, con los brazos cruzados.

-¿¡C-cómo!?

-No creas que te quedarás ahí parada, comienza a volar... Lo más lejos que puedas.- Exigió indiferente, intentando provocar de alguna manera a la más pequeña.

-¡Ngh! ¡Bien, haré lo que pueda!- Y así, empezó a volar lenta y torpemente en dirección a la cuidad, si se iba a caer en algún lado tenía que haber gente ¿no?

Mary seguía volando de la misma manera, mientras que en todo el trayecto, era observada por Piccolo. Luego de media hora volando (y de quitarse hojas y ramitas por los árboles con que chocaba), volvieron al punto donde habían comenzado para ir a lo que Mary quería probrar.

Mi chica kawaii [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora