Te contaré tres secretos de mí, en los que fui pensando en mis sueños que no eran tan sueños, al parecer.
1: Una vez robé diez caramelos de un mercado a media cuadra de mi casa cuando tenía cinco años y jamás se lo dije a nadie hasta hoy.
2: Me sabía todas las canciones de Elvis una vez que estuve dos meses en la cabaña de mis abuelos.
3: Traté de suicidarme cuando tenía quince años en la bañera de mi casa al ver como mi madre engañaba a mi padre con el esposo de mi tía.
Si bien pensé en todo aquello cuando estaba intentando despertar, pensé en cuan estúpida fui en aquel entonces cuando estaba llorando en la bañera con un cuchillo en mi mano.
Hoy después de años comprendí que vivir era lo que más quería hacer. Que no podía irme sin perdonar a Mamá, sin decirle a mi hermana que la amaba con todo el corazón y abrazar a papá que seguramente tenía en cuenta aquel secreto, él seguía sonriendo con felicidad cada vez que ella le decía "Te amo".
Jamás me enojé con mi mamá porque no era un asunto mío, pero aún así sentí asco, repulsión, y pizca de traición hacia mí porque era como si estuviese engañando a toda la familia.
Así que debía luchar si quería permanecer ahí.
Necesitaba saber algo de Will porque sabía que estaba pasando algo malo.
Pero sentí que me intercambiaban de sitio y una mano fría me agarraba la mano y la apretaba hasta solo volver a sentir frío y caer en oscuridad.
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Looking for you
Teen FictionKendall, devastada, escribe cartas de remitente a Sanders, para sentir que está cerca de él. Pero no solo descubrirá lo que ha pasado todo este tiempo que han estado separados, también se enterará que no todo es como ella lo había deseado. D...
