U n o

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Iba Jinyoung con su comida dirigiéndose a la cafetería para poder encontrar una mesa vacía en la cual sentarse solo como todos los días, se quedó quieto en la puerta buscando una con la mirada, cuando por fin encontró una se dirigió a ella esquivando a toda que persona que pasaba para no tener que tocarla o viceversa, cada que esquivaba una lo veían raro, ya que todos ya lo conocían como "el raro" a quien nadie lo había tocado con anterioridad.

Cuando llegó a la mesa, alguien más ya se estaba sentando así que se dirigió a la siguiente pero al llegar se estaban sentando un grupo de chicos, así que de nuevo volvió a buscar otra, hasta que encontró otra en la segunda planta una vacía, así que se dispuso a subir y sentarse en ella.

Al llegar por fin pudo sentarse a comer, pero cuando apenas iba a probar bocado, una voz lo interrumpió.

— Eres Park Jinyoung, ¿cierto? — dijo un chico recargado en una de las sillas y sonriéndole.

— S-sí — dijo nervioso.

— Es bueno el lugar, ¿no? — dijo el chico para posteriormente sentarse.

Jinyoung simplemente se quedó callado viéndolo para luego articular un "Con permiso" que apenas y se escuchó, para levantarse para ir a otro lugar donde SÍ estuviera solo.

Pero en cuanto se levantó el otro chico también lo hizo.

— Oye oye, ¿Qué te pasa? Si tú no estás aquí no hay motivo para sentarme.

— No tiene nada que ver conmigo el que te quedes en esta mesa - dijo Jinyoung dispuesto a irse.

— Te digo que esperes. Sabes quién soy, ¿verdad? — dijo el otro con orgullo.

— No, lo siento — fue lo que dijo Jinyoung, al mismo tiempo que hacía una pequeña reverencia con la cabeza y dando un paso adelante, que fue interrumpido por el otro chico.

— Si no lo sabes, entonces no puedo dejarte ir hasta que lo sepas — dijo para posteriormente tocarle el hombro con la mano.

En cuanto Jinyoung sintió el tacto, recuerdos llegaron a él volviéndolo a perturbar como cada noche. Entonces de un manotazo quitó aquella mano. El otro chico al ver esto sólo soltó una pequeña risa.

— Oye, no es que te vaya a comer. Quería invitarte a esto — y sacó dos boletos del bolsillo de su suéter.

— Muchas gracias, pero no hay razón para que lo acepte.

— No la tendrás, pero yo sí. Es una cita.

Jinyoung sólo se quedó con cara de disgusto.

— ¿Invitar a un hombre a una cita?

— ¿Hay algún problema?

— No estoy interesado — dijo para al fin irse, pero al darse la vuelta y dar solo dos pasos el otro chico azotó su puño contra la mesa.

— No te vayas, yo me iré — dijo a la vez que agarraba su comida pero al llegar a su lado dijo — Pero... no es que me haya rendido. Te invitaré otra vez — dijo para al fin irse dejando a Jinyoung desconcertado.

Pero simplemente se dio la vuelta y se volvió a sentar en su asiento. Cuando al fin estaba comiendo tranquilo un grupo de chicos se acercó a él.

— Esa actitud... hacia un alumno superior y capitán del equipo de básquetbol. En verdad, no sabes en la posición en la que te encuentras.

Pero Jinyoung simplemente lo ignoró y siguió comiendo.

— ¿Qué tiene con esa actitud? Me molesta que tipos tan insípidos como tú se crean la gran cosa.

— Es lo que tú piensas, pero yo no tengo nada que ver - dijo para seguir comiendo.

— Hasta a mí me contestas — dijo para verlo con desprecio — ¡TÚ! ¡¿Acaso te estás burlando de mí?! — gritó al mismo tiempo que azotaba sus puños contra la mesa.

Entonces uno de los chicos del grupo le arrebató su comida lanzándola hacia él, él solo se encogió en su asiento y cerró los ojos por instinto esperando el impacto, el cual nunca llegó. Abrió los ojos para ver que había sucedido y al hacerlo sólo vio a un chico delgado parado frente a él cubriéndolo de recibir alguna agresión, y en la ropa de éste se encontraba el plato que el chico que le gritó había lanzado, resbalándose.

— M-mark — dijo el chico, líder del grupo.

El chico llamado Mark sólo se levantó y lo volteó a ver manteniéndose derecho. Todos en la cafetería al escuchar ese nombre voltearon hacia donde provenía todo el alboroto mientras miraban con asombro, un chico de entre el grupo que acompañaban al agresor sólo pronunció el nombre de Jinyoung algo desconcertado.

— N-no fue mi intención — dijo el chico que había lanzado el plato.

— ¿Cómo que no lo fue? — dijo acercándose a él lentamente — ¿Qué se supone que harás con mi uniforme para remendar tu mala acción? — dijo sin dejar de verlo, el chico sólo bajó la mirada intimidado.

— ¿Estás bien Mark? — dijo el líder del grupo.

— Tú no te metas — dijo alejándolo de un manotazo, los demás del grupo sólo lo atraparon antes de que cayera.

Mark se dio lo vuelta y se dirigió hacia Jinyoung.

— ¿Estás bien? — dijo al ya estar enfrente de éste.

— Sí... — dijo casi en un susurro, para que sólo él pudiera escuchar.

Mark dirigió su mano hacia el hombro del otro, pero sólo le dio una palmada cuando Jinyoung ya había aventado su mano alejándolo de él. Mark lo volteó a ver y se limitó a sonreírle con dulzura.

— Lo siento — fue lo único que dijo manteniendo su sonrisa.

— ¿Eh? — dijo Jinyoung sin entender.

Pero Mark solo se alejó y se dio la vuelta dispuesto a irse, pero estaba el grupo estaba en medio de su camino.

— Están en mi camino — dijo volviendo a poner su rostro serio — Apártense.

El grupo sólo  dieron paso lo más rápido que pudieron. Al ir alejándose Mark el líder se tiró de rodillas al suelo.

— Mark!!

Los demás del grupo sólo decían — ¿Estás bien? Ya déjalo. Es un malvado. No lo perdonaré.

De pronto otro chico se acercó al líder del grupo gritando su nombre.

— BamBam!! ¿Qué pasó? Dime...

— ¡No me toques! ¡Déjame en paz! — se limitó a decir para posterior levantarse del suelo — Vamos — dijo dirigiéndose a su grupo, quienes éstos asintieron y lo siguieron.

Touch || ᴍᴀʀᴋᴊɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora