Capítulo 8

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-Vale Molly, eres genial, lo conseguiré, te quiero, adiós.

Cuelgo el teléfono del locutorio, y salgo de ese establecimiento como si no hubiera pasado nada.
Voy andando por la calle tranquilamente, me gusta andar.
Me gusta el instituto, me gustan mis padres, me gusta la ciudad, me gusta la comida, me gustan mis amigos, no me gusta Marck, es tan imbécil, un minuto nos aguantamos y en el otro ya nos estamos tirando cosas a la cabeza, es desesperante.

Voy hacia la tienda apple, he quedado con Aaron, estoy a cincuenta metros de la tienda y veo sus manos alzarse y saludar, le devuelvo el saludo y acelero mi paso.

-Hola, ¿dónde iremos?-pregunto alegre.

-Puedo enseñarte un poco la ciudad, llevas una semana justa cariño, ya es jueves, el jueves pasado es cuando hicieron todo ese espectáculo de la puerta-se burla-, y aún no te has movido de casa-dice con un tono de diva.

-No me lo recuerdes, lo pase fatal- respondo acordándome de las sensaciones de ese momento-
y tienes razón enseñame esta ciudad como nunca antes lo has hecho- enlazo mi barzo con el suyo y empezamos a andar.

Ya han pasado dos horas enseñándome la ciudad es bonita, pero tengo que hacer lo que me ha dicho Molly.

-Aaron, ya han pasado dos horas me tengo que ir a casa mañana nos vemos-le doy un abrazo y el se marcha, me aseguro que se haya ido bien lejos y suspiro de alivio.

El aire polvoriento, hace juego con el crujido de la madera que mis pies tocan, el leve murmullo de una radio estropeada se oye a lo lejos juntamente con una risa femenina.
Mis ojos alcanzan muy poco, ya que todo esta oscuro como un trozo de carbón, de repente oigo una voz gruesa, fuerte, que hace un gruñido asqueroso, como si de un tigre se tratara.

-Contraseña-dice la voz.

-estoyenelladoizquierdo-nunca olvidaré esta contraseña.

Todo las luces se abren, como una explosión, mi visión capta una mujer y un hombre.

-¿Tienes mi pedido?-pregunto.

-Sí, pero tendremos que ir dandotelo por turnos, por seguridad, una por semana, todos los jueves-responde la pelirroja.

-perfecto, quiero el primer paquete-el rubio se dirige atrás y saca una bolsa grande de color negra, me la entrega y me doy por aludida.

Ya en casa escondo la bolsa y hago como si no hubiera pasado nada, se me da bien, tengo practica.
Arya nos llama para ir a cenar, me siento en mi silla de siempre y como en silencio.Noto un pie que me da una patada en la espinilla, no digo nada y me aguanto el dolor durante un minuto, miro a Mark y esta sonriendo con insuficiencia, con todas mis fuerzas cojo impulso y le doy un patada también, hace cara de dolor y se levanta de la mesa.

-Voy al baño-anda cojeando y me río por lo bajo mientras el me fulmina con la mirada.

-Martha-me dice Arya, la miro-mañana iremos a cenar con unos socios, y la cocinera no estará,¿sabes cocinar?-pregunta.

-sí, no me quedaba más remedio que aprender-digo sin darle importancia.

-Mañana,¿te importaría hacer tu la cena?-niego con la cabeza-genial, tienes todo lo que quieras en la despensa, y obliga a Mark a ayudarte y si no me llamas.

Mark vulve con una expresión seria y enfadada pero se sienta en la silla.

-Mark mañana estareis solos para cenar, ayuda a tu hermana hacer la cena.

-Claro mamá- su cara de niño bueno no engaña ni a un niño de dos años.

-Id a lavar los platos tu padre y yo lo hemos echo al mediodía os toca a vosotros, a partir de hoy se hará así todos los días-informa y se levanta de la mesa junto a Thomas, suben escaleras arriba, supongo que se van a la cama.

Nos levantamos empezamos a recoger cubiertos, platos y comida sobrante, lo llevamos a la cocina y yo me encargo de lavar los platos y el de dármelos.

-No laves los platos mano-dice al ver lo que estoy haciendo-mételos en el rentaplatos-lo miro con cara de no saber de que está hablando-¿no sabes el que es un rentaplatos?-niego, y pone cara de cansancio-esta bien, ¿ves esto?-asiento mirando una especie de cuadrado metálico-se abre por aquí-intruduce los dedos por una espècie de rendija y tira hacia él, y de allí la caja metálica se abre-coges estos cajones de metal y los estiras, aquí van los platos-señala una superfície de metal-aquí los cubiertos y aquí los vasos-abre la misma parte pero situada encima, empiezo a poner los utensilios como me ha explicado, terminamos de hacerlo todo pero Mark dice-no creas que me importas, porqué no es así, pero tengo curiosidad, que hacías todos los días, es decir, ¿qual era tu rutina?-pregunta apoyándose al marco de la puerta.

-Mi rutina era sencilla, levantarme a las cinco, prepararme en diez minutos irme a trabajar, no tenía un trabajo en concreto cada día tenía una obligación diferente es el funcionamiento de muchas personas, a menos que seas médico, profesor, pero es muy difícil poder estudiar y solo pueden los chicos, también si tus padres son de allí cobras el doble y haces menos horas, pero la gente que somos huérfanos, lo tenemos más difícil, bueno lo que te iba diciendo, a las siete tenía que estar en la sede central, salía tan pronto porqué des del orfanato a la sede hay casi dos horas andando, y no hay coches, ni autobuses, ni nada de eso, así que cuando llegaba ya estaba cansada, trabajaba todo el día y tenia diez minutos para comer, los que tenían padres allí tenían un hora y a partir de allí hasta las once no terminaba mi horario laboral, y luego tenía que volver a casa andando, llegaba sobre la una y media porque me vostaba andar y dormía un poco más de tres horas y vuelta a empezar, todos los días de mi vida des de que tengo diez años han sido así, es....agotador.

Holaaa,esperooo que os guste el capítulo hay mucho misterio y mucho drama, poco a poco sabreis quien es Molly que hay dentro de la bolsa, ...
Un beso

La excepciónWhere stories live. Discover now