Mi mate es un Alpha

Capitulo 5

Alison

No me lo puedo creer. Es la casa del tarado, ¿Qué se supone que vamos ha hacer aquí?.

Un hombre nos abrió la puerta y pasamos directamente al salón, donde habían varias personas.

Cuando el chico se dio cuenta de mi presencia por poco se ahoga con el refresco y luego sonrió de lado, tan arrogante que me quema los ojos.

-Hola Marco, me alegro de volver a verte- saludó mi padre al que parece ser el padre del tarado.

-Yo también me alegro de verte Lucas. Y a ti también Ashley- dijo refiriéndose al final a mi madre.

-Yo también, veo que los niños han crecido mucho desde la última vez que los vi-

-Sí, cada día están más grandes-

-Están todos muy guapos. Por cierto, ¿Dónde está Alicia?-

-Todavía se está preparando, a lo mejor si subes a verla puede que se de un poco más de prisa. Dile que la comida ya está lista- dice sonriente y mi madre asiente y se va.

-Marco, te presento a mis hijos: James, Jack y Alison- dijo mi padre señalándonos a cada uno.

- Hola chicos encantado de conoceros al fin, he oído grandes cosas sobre vosotros -habló Marco.

-Encantados de conocerte- decimos los tres.

- Y estos son mis hijos, Mateo y Sofía ( los gemelos), Nate y Liam- preferiría no haber conocido al último.

-Hola- saluda Sofía con una gran sonrisa en la cara.

-Hola, me gusta mucho tu vestido-

-Gracias- se ríe y se va junto a su hermano, es muy dulce.

-Bueno Alison, Liam me ha contado que tú eres su mate, supongo que ya eres parte de la familia- dice Marco.

-¿La qué de quién?- medio grité algo sorprendida. Todos se me quedaron mirando fijamente y eso no ayudaba a la situación. Liam se levantó del sillón y se acercó a mi.

-Como ya te dije antes, eres mi mate- que yo recuerde sus palabras no fueron precisamente esas, directamente me dijo que era suya, como si de un objeto se tratara. Se intentó acercar un poco más a mi, pero levanté la mano para mantener la distancia y le aparté.

-Ali, ya te explicamos lo que es un mate. Se trata de tu...-

-Lo entendí perfectamente papá, pero también dijiste que lo sabías cuando tenías los 16 y yo aún no los tengo-

-Pero yo sí lo sé- contesta Liam.

-Escucha, vamos a hacer una cosa. Hace nada que me he enterado de todo esto- para ser exactos, ayer- y se me hace muy raro tener que vivir con alguien el resto de mi vida sin conocerle para nada y mucho menos teniendo en cuenta todo lo que ha pasado desde que nos conocemos. Quiero tomar las riendas de esta situación. La semana que viene es mi cumpleaños y hasta entonces propongo que quedemos. No solo tenemos que caernos bien, sino que nos tenemos que gustar, así que vamos a buscar la manera de hacer que esto no sea tan raro- no me puedo creer que esté proponiendo esta locura.

-Trato hecho, te recojo mañana a las 10-

-Está bien- bueno, algo es algo.

-Bueno chicos, si ya habéis terminado de hablar el asunto, vamos a ir sentándonos en la mesa para cenar-

-Si, ya tengo hambre- dice Jack y a continuación vamos a sentarnos.

-Hola chicos, perdonad la tardanza- llega la madre de Liam.