Capítulo 6.

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Eran las 13:00 horas y me dirigí a la sala de castigo. Me había despedido de Vivi y unos cuantos compañeros.

No iba a ser tan terrible, sólo era una hora. Ahora, el problema estaba en qué le diría a mis padres.

Decidí llamar a mamá, ella comprendería mejor.

-¿Mamá?-

-____,- sonaba emocionada, nunca la había llamado a su trabajo- ¿qué tal tu primer día?

-Bueno... digamos que no del todo bien, me castigaron-.

-¿Por qué?- jamás imaginaría que yo, ____ le diría esto.

-Tuve un problema en un test de electividad con un compañero-.

-Ya veo... está bien. ¿Qué tendrás que hacer?-

-Debo quedarme hasta las 14:00 aburrida en el aula de castigo-

-Oh -suspiró aliviada- está bien, ve, gracias por avisarme, amor. Adiós.-

-Adiós, mamá-.

Y me dirigí y estaba él sentado escuchando música. Por él, me castigaron por primera vez en mi vida, por este tipo tendré que enfrentarme al duro reto de mi padre y quizás a qué otras cosas.

Por lo tanto, me alejé y me senté en el último asiento para tener a la peste lo más lejos de mi.

Un minuto después llegó Wesley y me empezó a dar golpecitos a la mesa en señal de que debía sentarme al lado de este tipo.

Enojada, fui, y éste miro dandose cuenta de que tomé asiento ahí porque la música que escuchaba lo mantenía concentrado.

Ok, mis monos -¿Y usted no se ha visto? pensé- como no hicieron la actividad que les pedí y además se faltaron el respeto, les haré hacer una actividad aún mayor. Cada uno deberá escribir un ensayo.

-fácil- pensé. Pero no será un ensayo cualquiera. Deberan escribir uno de su compañero; su vida y sus gustos.

¿Pero esto es en serio? ¿Qué escribiré sobre este tipo que tengo a mi lado?

-¿En serio me hará escribir un ensayo sobre -lo miré lo más despreciable posible- él?- cuestioné.

Y él rió, como si lo que estuviese diciendo le provacara gracia.

-Sí, tienen 1 semana, y son dos planas completas.

-¿Y cómo se supone que escribiré de él?- pregunté enojada 2 planas, 1 semana, y sobre ese tipo.

-Bueno, tendrán que hablarse, supongo, no es mi problema, usted se lo buscó, no yo.

Sólo me limité a suspirar frustada.

¿Tengo opción?

-Ok, mira, esta esa la primera vez que me castigan y te aseguro que es la última, así que hagamos esto rápido. ¿Te parece?

No hay respuesta.

-Hey, estoy hablando.

Sigue viendo cosas en su celular y escuchando música.

Retiré un audifono de su oído y lo volvió a poner.

-¡AH!- dije casi gritando y poniendo mis manos en mi cara.

-Está bien, si así lo quieres hacer, tú lo buscaste-

Y creo estar segura de que me escuchó porque al pararme del asiento y dirigirme al otro rincón de la sala, me miró.

"Hola, soy Luke Hemmings, les hablaré un poco de mi maravillosa vida, soy maleducado y grosero y más aún con la gente que es educada conmigo. Uso el uniforme del colegio de manera que parezca un vago, no tengo amigos y lo único que me hace sentir bien es tener mi celular en las manos todo el tiempo. Miro a la gente de reojo, no a la cara como los verdaderos hombres y eso no es todo, además los miro feo porque soy superior a todos y no me importa nada de nada".

Bien, con esto ya tengo la mitad de la hoja.

Lo vuelvo a leer y me causa risa.

Espero a que Wesley llegue y cuando voy hacia allá veo que este tipo también tiene algo escrito.

Me siento calmada ya que sé que no dirá nada malo de mi.

ANTÍTESIS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora