Rosas en llamas

Luna Roja

Advertencia:

BL, Slash, Chico/Chico. Dos chicos sosteniendo una relación romántica, espero enserio haya quedado claro. No tiendo a sobrevalorar personajes, así que no, aquí Star no será un perfecto copo de nieve brillante, será lo que es: una chica con defectos que tiende a ser a veces irritante. Y no, NO habrá bashing a ningún personaje.

Ligero cambio al canon, cambio sólo algunos detalles del episodio de la Luna Roja.

Notas:

Siempre quise hacer algo sobre el baile de la Luna Roja y ya que ningún fic me había podido satisfacer, hice este fic. Así que esta historia es tanto un regalo para Moon Erebos, por haberme hecho un par de regalos a pesar de nuestra repelencia mutua (porque el significado de "Te quiero pero de lejos" nunca se inclinó más a la agresividad que con nosotras), así como un capricho que quería satisfacer.

Espero puedan disfrutar este conjunto de viñetas. :)

Regalo para  MoonErebos, y para todo el que quiera leerlo.

También aprovecho para mandar un saludo a mis amigas del grupo Servidores del Lado Oscuro y el Lado Oscuro de la Fama. Por hacer mis días tan miserables como entretenidos. ¡Felices fiestas queridas!

Gracias Sthef por betear <3

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1. Luna roja.

El sueño de la cinta roja fue solo el principio, uno tras otros, sueños vívidos ocuparon sus noches, nunca parecieron realmente importantes al despertar el siguiente día, así que Marco no lo mencionó hasta ese sueño.

Era muy sencillo, en realidad. Nada de supuestos entretejidos del inconsciente, nada que su cerebro pudiera confundir con distintos significados. Era, básicamente, el Baile de la Luna Roja repitiéndose en su cabeza, la luz rojiza bañando la pista en el momento justo en que Tom tomaba su brazo para apartarlo de Star, todo se congelaba allí, borrando por completo a la audiencia del lugar para dejarlos solos en un paramo despejado bajo la luna y la brisa del exterior.

—Elije. —Star sentenció, su rostro inescrutable ensombrecido por la mortecina luz de la luna.

—¿Qué?—Ese era el momento en el que, a pesar de ser un sueño, el agarre férreo de Star contra su brazo se sentía real.

—Elije. —Repitió Tom, sus ojos rojos, sin una pizca de su iris o su pupila en ellos. El tacto de su mano contra la ropa quemaba.

—Chicos, vamos, estos es espeluznante, no-

La luna en el fondo empezó a resquebrajarse, el agarre de ambos en sus brazos a apretar cada vez más.

—¡Elije uno!

Y despertaba, sin más, con el sudor corriéndole por la frente y un desagradable sin sabor en la boca. Siempre con miedo, no había una noche para que ese sueño no provocara ansiedad en él. Con cuidado, revisó bajo las mangas de su pijama, y como era usual, las marcas de dedos en sus antebrazos estaban allí, incluso podría jurar que al colocar las manos de Tom y Star en cada brazo, las marcas coincidirían.

Muy bien, se dijo, ese sueño llegaba hasta esa noche.