Real Friends|S.M|TERMINADA|

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-Adiós, cariño, te deje dinero donde sabes, cuídate mucho -mi mamá me apretaba en un abrazo, su cabeza estaba en mi pecho y se notaba a kilómetros que no quería soltarme, la abrace por los hombros con fuerza, sin aplastarla.

-Es solo una semana y no hacía falta que me dejes dinero, el trabajo que conseguí en la tienda me paga por día -mi mamá me miro y dejo un beso en mi mejilla. Con un último apretón hacia mi cuerpo con sus brazos, camino hacia el auto.

-Créeme le cuesta dejarte solo -mi papá me dio un par de palmadas en la espalda y camino al auto, para abrirlo y entrar junto a mi mama.

-Adiós, grandulón, que no te coman los fantasmas -me dio un abrazo y corrió al auto. Tardaron un poco en arrancar, de seguro mi papá repaso en voz alta todo lo que necesitan y se cercioro que no se olvidaran nada. Cerré la puerta, la casa se sentía vacía, hasta el perro va a disfrutar de sus vacaciones. Mire la hora, las siete de la mañana en una hora entraba a trabajar.

Había conseguido un trabajo de 10 horas los fines de semana, mientras que los días de semana eran solo seis horas. Justo cruzaba la calle cuando, en la gasolinera, apareció un cartel diciendo que necesitaban un empleado para operar la caja registradora y limpiar el lugar. Al tener 18 años, muy pronto 19, y sabiendo que mis papás ya no podían cubrir mis gastos, entre a pedir el puesto, me preguntaron un par de cosas, como experiencia, lo cuál respondí que limpiaba mi casa, y un par de preguntas más. Me dieron el trabajo, con la condición de que me pagaban dependiendo de la cantidad de dinero que ganen en el día. 

Escuche el timbre de la casa en el momento que me estaba colocando la ropa, me apresure en terminar y me puse las zapatillas. Revolviendo mi pelo baje la escalera y una vez con la ropa acomodada, abrí la puerta.

-Hola, vengo a venderte galletas de chocolate -iba hablar-, estamos juntando dinero para donar al orfanato de la zona, dado de que sus suministros se están acabando, me encuentro acá tratando de amenazarte para que compres nuestros productos -la niña me miro-, son caseras -me aproximo una caja al pecho para que la agarre. La tome y le di el doble del dinero que costaban, era para una buena causa. La niña me sonrió y corrió hacia la calle, me miro e hizo una ademán de manos para subirse al auto que la esperaba.

Me coloque una chaqueta y un gorro, tome mi celular y lo guarde en el bolsillo. Me cerciore que estén todas las ventanas cerradas y salí rumbo al trabajo. Quedaba a unas 20 cuadras de mi casa, así que decidí caminar. Pase por el frente de una casa y escuche un grito, me frené y mire la puerta. Esta se abrió de golpe y un chico corriendo salió de esta, miraba hacia atrás y segundos después salió una chica. El chico choco contra mí y caímos al suelo. Sin disculparse, se levantó y siguió corriendo.

-Y NO VUELVAS! -la chica miro como el chico que iba corriendo. Me levante del suelo y sacudí mis pantalones-, mucho gusto, soy Greta -la chica extendió su mano hacia mí y le sonreí-. Espero que olvides lo que acaba de pasar, ese chico me quería someter y sé cuidarme, digamos que casi lo golpeó con una escoba, nada de otro mundo -me sonrió y fruncí el ceño. La chica estaba despeinada y vestía el pijama- Me dirás tu nombre o eres mudo, oh! -exclamó-, dime que no eres mudo, me sentiría muy mal, sí así es. Hablo por hablar y digo cosas sin sentido, sí no me entiendes, eres sordo? -me reí por lo rápido que hablaba y todas las suposiciones que hizo-, de que te ríes?

-No soy mudo, ni sordo, tranquila, soy Shawn -extendí mi mano y la estrechamos. Agarré mi gorro que estaba en el suelo y me lo puse en la cabeza.

-Dios, que irrespetuoso fue tirarte al suelo y no haberte pedido disculpas -la chica me acodo el gorro y el cabello-, pido disculpas por parte de él, sé que jamás haría algo así, puede ser un idiota pero estaba asustando, es un niño de mamá -me sonrió, permanecimos así un par de minutos hasta que reaccioné.

-Lo siento, debo irme, tengo trabajo -le di un ademán de manos y empece a caminar, cuando estaba a un par de pasos, pude escucharla murmurar un "hasta trabaja", la mire sobre mi hombro mientras caminaba, y le sonreí. Pude notar que se ruborizó.

(...)

Llegué al trabajo con cinco minutos de retraso y me rebajaron un 15% mi sueldo por este mes, siempre buscan cualquier excusa para pagarme menos. Estaba limpiando el suelo, cuando se escucha que entra un grupo de personas a la tienda, termino de trapear el piso y camino detrás del mostrador, elevé la vista y me encuentro con el grupo de amigos de Clarie.

-Estas de empleaducho, Mendes? -ignoro lo que dijo y paso el código de barras de los productos que eligió. Dereck, saco bruscamente de mis manos la bolsa de lo que compro y me tiro el dinero en la cara. Junte de suelo las monedas que se había caído y coloque todo en las caja registradora.

-Que cuentas, Mendes? -pregunto otro. No sé porque conocían  mi apellido, no íbamos al mismo salón. Ignore lo que dijo y tome una paño húmedo para limpiar el mostrador-, Te estoy hablando -el mismo chico sorbió de su gaseosa. Me miro fulminante, en su cara apareció una sonrisa burlona. Me mostró su gaseosa y tiro el líquido sobre el suelo. Dejo caer el envase y salió junto a su grupo. Tome el trapeador y me dedique a limpiar su desastre.

-Lo siento, chico -un chico junto el envase de gaseosa y me lo aproximó.

-No lo sientas, hermano, tú no tienes la culpa -tomé el envase y lo tire al tacho de basura.

-Sé que no debo hacerlo, pero a veces, no puedo creer hasta donde llegan para humillar a las personas, no lo tolero pero son mis amigos, y los amigos siempre se respaldan -se encogió de hombros y se apoyo en el mostrador.

-A veces, debemos diferenciar lo que es respaldar de ser cómplice de acciones con intención de perjudicar -me encogí de hombros y seguí trapeando. Clarie, era una buena persona pero hacía cosas malas, me deje someter por ella y deje de ser quién era. Cuando me di cuenta, ya era tarde y ella ya me había humillado a mí.

-Tienes razón, voy a hablar con ellos, me agradaste, como te llamas? Soy Will -extendió su mano. La tome y nos dimos un apretón.

-Soy Shawn, realmente presiento que eres una buena persona, deberíamos juntarnos -escurrí el agua del trapeador en el balde.

-Tienes razón, nos vemos, amigo, hasta la próxima -salió de la tienda, luego de darme una palmada en la espalda y se perdió dentro de un auto.

Trataré de publicar todos los días.

Espero que la esten disfrutando.

Acquaro