Culpable

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Habían pasado exactamente cuatro horas desde el accidente y la tonta sentencia de castigo, ¿Que se supone que haría ahora el resto del día? Y la noche, se preocupo, no puedo dormir sin Yeri, es la única que me da la tranquilidad para conciliar el sueño, Joy bufó, la culpable fue la enana no se porque me involucran a mi en el castigo, se cruzo de brazos enfadada.

Wendy observaba su pijama dar vueltas en la lavadora pensando en el mango de esta mañana, sin poder evitar sonreír un poco divertida, suspiro, más aun al recordar que Joy se lo había dado secretamente a Seulgi de desayuno, pero la sonrisa desapareció, debía admitir que aún sentía molestia con su maknae, pero algo en verdad le daba mala espina, ¿Que habrá estado tratando de hacer? Usualmente sus bromas son unas ninjas, no así de obvias y expuestas.

La lavadora se detuvo, por lo que despertó de sus pensamientos decidiendo no volver a pensar en ello, de todas formas la menor del grupo siempre era impredecible.

-Seulgi unnie- Joy exclamó hasta encontrarla en el salón - Juguemos a la Xbox-

-Ay no... -

Se supone que hoy iríamos a explorar restaurantes deliciosos, pensó Yeri en Joy, aún enfadada por el injusto trato que le estaban dando pero luego de enfadarse y enfadarse, solo terminó sintiéndose culpable por comprender la logica de sus unnies, tenían sus motivos para sospechar de mí, debía admitirlo pero también deberían creerm...ok no, en verdad no tengo como salvarme, siempre les miento sobre estas cosas, no puedo creer que el día del arrepentimiento haya llegado.

La menor se encontraba junto a la líder, ya que la obligó a acompañarla por otro suavizante de telas y detergente, Yeri caminaba distraida mientras la mayor irradiaba concentracion, estaban en un centro comercial y lo único que podía pensar la maknae era en irse de ahí, sabía que Irene la miraba de reojo cada cierto tiempo y además sabía el porque, esta esperando mi disculpa, penso indignada, cree que me disculpare como siempre hago, lo cual, debo admitir que serviría, luego de eso siempre todo vuelve a la normalidad, pero esta vez en serio no hice nada por lo que no pienso hacerlo.

Luego de aburrirse terriblemente la atención de la menor fue atraída por un local, se acerco a la vitrina leyendo atentamente una promoción "Rastreador de fantasmas 20% de descuento" Yeri entrecerro los ojos aunque había decidido no pensar en esa teoría, la idea de que volviera a pasar esta noche la asustaba un poco, ¿Que haría si volvía a pasar? Pues definitivamente me volveré loca, pensó viendo cada vez más cosas que le interesaban "Lentes para ver fantasmas" "Polvo para espantar demonios" "Vela protectora de hogares" la maknae bufó, si simplemente funcionarán, se maldigo aunque no podía mentir, si se tentaba a comprarlas, su instinto consumista se lo decía, pero ya había pasado por esa etapa, Wendy unnie no me cerro todas mis cuentas en ebay por nada, pensó, pero la tentación era mucha, por lo menos entraría a ver más de cerca pero tristemente fue jalada antes de poder avanzar.

-Vamos Yeri- Irene ya iba con sus compras hechas.

La líder solo quería que su maknae se disculpara y dejar su falso enojo ya, pero como no lo hacía se estaba preocupando, usualmente siempre lo hace luego de sentir la culpa pero esta vez solo la veo un poco decaída y enojada, pensó, ¿Estara entrando en una etapa de rebeldía? ¿Otra más? Bufó, bien, frunció los labios, si no te quieres disculpar, olvidate del helado que te iba a invitar, le saco la lengua mientras la menor estaba de espaldas.

La conozco desde los 12 años y nunca había actuado así, tampoco habíamos pasado tanto tiempo enojadas, la siguió observando mientras caminaba.

La líder gruñó frustrada, sólo juega psicológicamente conmigo, trata que le quite el castigo, Ja, conmigo no puedes Kim Yerim, pensó riendo, no caeré.

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