Confesiones de una Aspie

El lado de la ansiedad

Estoy bastante segura de que he vivido con ansiedad desde que tengo memoria, desde antes de tener diagnosticado síndrome de asperger, depresión o TOC. Frecuentemente y casi a diario experimento ansiedad, o una opresión constante. He llegado a plantear e investigar sobre el tiempo y las dimensiones paralelas solo para dejar claro a mi propio cerebro que no hay forma en la que pueda prevenir todo lo que me ocurre. Os sorprendería la de información y libros de Stephen Hawking y Penrose que hay en mi cuarto.

Hay muchas cosas que me dan ansiedad. Saber que algo cambiará mañana en mi rutina (o temer que ocurra incluso sin saberlo) es una de las cosas que más me inquietan, porque las cosas inesperadas de las que no tengo control dan miedo, creo que a todos nos da miedo. Este tipo de cosas como el futuro o la muerte misma, cosas que no entendemos y desconocemos, que no sabemos como vamos a estar o que ocurrirá. Creo que la desinformación es terrible y probablemente es uno de los motivos por los que vivo recolectando datos sin sentido y al azar. Trato de prevenir todo lo que pueda y sacar conclusiones lógicas para rechazar que algo pueda ocurrir o afirmar que pasará. No por paranoia ,porque siendo una persona muy razonable descarto rápidamente cosas imposibles ; sino por ansiedad , quiero saber que va a ocurrir . No puedo estar minutos sin hacer nada porque siento que pierdo el tiempo, tiempo que podría servirme para estar más preparada ante las cosas que me esperan en el futuro.

Con lo mismo el futuro y las probabilidades de que ciertos hechos sucedan me ponen ansiosa, cada vez que tengo que hablar con una institución (o incluso con algunas personas si se de antemano que hablaré con ellas) llevo una hoja con todo lo que debo decir, y qué contestar para las diversas respuestas o situaciones que puedo imaginar que ocurran.

Y por si no fuera suficiente hay más cosas que me dan ansiedad (dejando las manías de las que ya hablé), como los lugares con demasiada gente en los que las personas están demasiado cerca mío. Odio que me toquen , tan siquiera que me rocen un poco con el brazo sin querer, me aparto rápidamente si no he logrado esquivarlo, se me eriza el pelo de la piel e incluso en ocasiones me sale la dermografía. En ocasiones incluso parece que me limpio pero más bien me froto donde me han tocado por pura necesidad. Y ya no hago mención de las veces en las que me veo forzada a un abrazo, un apretón de manos o cualquier cosa así.

Me da ansiedad estar rodeada de personas por ese contacto y porque hacen mucho ruido , también porque a veces temo que me hablen. No soporto ni la sala de espera del psicólogo, quien me preguntó por qué miro "de esa forma" a los demás ya que los voy a asustar. Evidentemente ese es mi objetivo , porque una vez un chico empezó a hablarme en la sala de espera y yo estaba totalmente incómoda con sus preguntas y rogando mentalmente que apareciera el psicólogo y me llamara de una vez. Cuando la sala de espera esta muy llena ni siquiera me siento, me quedo en el pasillo para no meterme en ese entorno ruidoso y poblado.

La ansiedad con la presencia de otras personas es tan fuerte que todavía no estoy acostumbrada en clase. Cuando iba a primaria las clases eran de 20 niños en una escuela pequeña y estaba muy bien, en el instituto aunque me costaba con 30 podía aguantarme; pero una vez llegué a bachillerato las 40 personas de mi clase eran insoportables . En más de una ocasión tuve que salir de clase a relajarme porque literalmente me ponía de muy mal humor y hasta alguna vez me he puesto a llorar al no soportar el ruido. Parecerá una tontería pero tengo un oído tan sensible que por las noches si alguien usa el baño me despierto y no duermo más sea la hora que sea. Solo recordar el ambiente de las clases de tarde me da náuseas, la gente hablando en grupos demasiado alto, objetos volando por el aire, un grupo jugando a darse golpes en un lado, el de atrás golpeándome la silla. Es tan irritante que me dan ganas de pararme y gritarles a todos que se callen, por suerte no tengo el valor de hacer eso y los miro "de esa manera" para que noten mi molestia.

En fin, gracias a toda esta suma de cosas (y las manías) mi nivel de ansiedad es terrible y desde que tengo el diagnóstico se ha visto incrementado por que ahora tengo que preocuparme también de no ofender a nadie , hacer o decir alguna cosa que no estipule en el que yo llamo "el reglamento inexistente de reglas sociales que todo el mundo conoce menos yo". Precisamente escribí este capítulo porque voy a empezar la universidad en unas semanas y mi nivel de ansiedad es todavía más peligroso, como toda una persona sin amistades no tengo ni idea de que reglas no escritas tienen ahí que todos saben gracias a sus amigos que han ido a la universidad.