Staring At The Stars [HyukBin]

Capítulo 8

Para la presentación de fin de año de Hyuk, fuimos invitados al evento. Yo, especialmente me sentía más que ansiosa, emocionada. Después de casi seis meses de terapia había vuelto a caminar, aunque no del todo correctamente, pero al menos ya no requería de muletas o de la molesta silla de ruedas para hacerlo. Y el poder ver con mis propios ojos todo lo que había avanzado Hyuk, fue la mejor de las recompensas.

— ¡Hyukie! — gritó Jeong Hwa al verlo en la entrada esperándolos.

— Jeong Hwa, mamá, papá — comentó Hyuk acercándose a ellos para saludar.

— Hola cariño...

Hyuk nos dirigió hasta el auditorio, en donde el resto de padres y familiares de los de primer año estaban congregados. Después de una breve plática y que nos mostrara nuestros lugares, tuvo que dejarnos y esperamos a que la función comenzara.

Juró que casi lloro al ver en el escenario a Isabela Duran, ella fue la presentadora de ese día, quien se presentó en el escenario después de que el director Cha Hak Yeon dijera unas palabras y la muestra diera comienzo. Todos eran impresionantes, realmente lo eran. Pero para cuando llegó el turno de Hyuk, las lágrimas que había estado contendiendo, surgieron al verlo disfrutar como nunca del baile.

Y una vez que las presentaciones terminaron, un pequeño convivio se había organizado como despedida para los alumnos y familiares. Durante ese tiempo, justo ese fue el momento en el que conocimos al famoso Lee Hongbin, del que Hyuk nos había hablado tanto.

—... Hongbin, ellos son mi mamá, mi papá y mi hermana Jeong Hwa — dijo Hyuk presentándole a su familia a su compañero de cuarto.

— Hola, mucho gusto — mencionó Hongbin con respeto saludando primero a sus padres, pero al posar su mirada en la hermana de Hyuk, agregó un tanto entusiasmado — ¡Vaya! En verdad son idénticos, aunque ella es más bonita — comentó Hongbin sonriendo al ver a la gemela de Hyuk.

«Dios, con razón Hyuk está enamorado, yo ya lo estoy y apenas y lo acabo de conocer... Con esa sonrisa, bien podría morir por ella». Pensó Jeong Hwan al observar la sonrisa con hoyuelos que Hongbin le dedicó.

— ¿Jeong Hwa? — Hyuk la llamó susurrando en su oído.

— ¿Ah? — dijo ella sin dejar de mirar a Hongbin quien platicaba con sus padres.

— Quieres que te traiga un balde, porque la baba se te desborda — le comentó en broma Hyuk riéndose de su hermana.

— ¡Ay, cállate! Ahora entiendo porque no quieres ir a casa los fines de semana — contratacó.

Algunos comentarios más surgieron entre pláticas, hasta que el momento de partir había llegado. Ese día tuvimos que esperar a que Hyuk, regresara hasta los dormitorios por su maleta junto con Hongbin, porque regresaría con nosotros a casa y de paso dejaríamos a Binie en la estación de autobuses para que partiera a la suya.

* * *

Durante las vacaciones de invierno, Hongbin pudo regresar a casa y estar con los suyos. Pero a pesar de que disfrutaba de las fiestas, un gran sentimiento de nostalgia se apoderó de él, específicamente porque ese fin de año, no solo se despedía del que creía era el amor de su vida, sino porque sin darse cuenta, Hyuk le hizo más falta de lo que esperaba, y eso solo lo reflejaba las largas conversaciones que mantuvieron vía telefónica. Puede que Hongbin no lo hiciera con el afán de darle alas a Hyuk, pero es que el menor se había convertido rápidamente en alguien importante para él, y Hongbin no se había dado cuenta de ello.

Apenas y habían pasado las primeras felicitaciones a sus familiares, cuando el teléfono de Hyuk vibró en su bolsillo derecho. Con un vuelco en el corazón, se alejó del bullicio de la fiesta de fin de año que todos los años organizaban sus padres, y al salir al patio trasero para estar más cómodo, se sentó en la mesita de jardín.

— ¡Feliz año nuevo, Hyukie! — se escuchó del otro lado de la línea en cuanto contestó. Era Hongbin.

— Feliz año para ti también, Binie — respondió Hyuk con una gran sonrisa en los labios.

— ¿Y cómo te la estás pasando? Se escucha un gran ambiente ¿eh? — comentó Hongbin un poco celoso.

— Igual que todos los años. Mis padres suelen invitar a los vecinos, por eso es que se escucha algo de ruido.

— ¿Sabes?... Te extraño — dijo Hongbin después de un par de minutos en silencio.

Esas dos simples palabras hicieron grandes estragos en el interior de Hyuk, su corazón dio un brinco y comenzó a latir algo acelerado, junto a la sensación de mariposas que se instaló en su estómago.

— Hyuk ¿sigues ahí? — preguntó Hongbin, al darse cuenta que el contrario no había mencionado palabra alguna.

— ¿Ah? Sí, si... es que me distraje, perdona — dijo sintiendo el ardor en sus mejillas al teñirse de rojo, suerte para él que no estaba enfrente de Hongbin para que lo viera.

— Entonces, supongo que no debería de estar distrayéndote, tú tienes una fiesta en casa. Además nos veremos en un par de días, cuando regresemos a la academia.

El corazón de Hyuk sintió una punzada de dolor mezclada con ¿esperanza?, al escuchar cierta decepción en la voz de Hongbin, así que con apuro trato de remediar su error.

— Está bien, Binie... Pero antes, cuéntame que tal la estás pasando tú, y por la fiesta no te preocupes, con las personas que hay ni siquiera se dieron cuenta de que salí.

La enorme sonrisa que se formó en los labios del mayor no tenía precio, para su mala suerte su familia no tendía a hacer nada especial para la fiesta de fin de año. Lo que se resumía a que después de cenar temprano, él, no tenía absolutamente nada que hacer. Por eso es que disfrutaba tanto de las conversaciones con Hyuk, le gustaba deleitarse con sus pláticas y esa no fue la excepción, ya que estuvieron en el teléfono cerca de dos horas del año nuevo.

* * *

Hyuk se había hecho un nuevo corte de cabello y se encontraba algo ansioso de volver a ver Hongbin. No se lo había dicho, pero le había comprado un presente por las festividades. Ingreso a su habitación llevándose una sorpresa una tanto desagradable.

— ¿Chansik? — mencionó Hyuk al reconocerlo.

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Nos acercamos al final.

Muchas gracias por leer.