- ¿En qué hospital esta?

- En el Central Hill, cuarto piso habitación 113.

Clarke conocía perfectamente el hospital, había pasado muchas noches junto a su amigo en una de sus habitaciones. Tenía la mejor reputación en oncología de la zona del país y fue horrible conocer que ese hospital no le daban ninguna opción de esperanzas a Wells.

Jaha desapareció detrás de las puertas de acero.

Lexa se acercó a la rubia y la abrazo desde atrás rodeando su cintura y colocando su cabeza en su hombro.

- Lamento que Wells este tan grave.- le susurró al oído.

- ¿Por qué no me dijiste nada?.- preguntó la rubia mirando al piso.

- Él me pidió que no lo hiciera.

Clarke se libero del abrazo de la morena y la encaro.

- Pero soy tú prometida y él es como mi hermano.

- Entiendo que estés enojada, pero no estas enojada conmigo Clarke.

- ¿Entonces con quién Lexa? Si me hubieras dicho quizás podría haber hecho algo.

- Tú me contaste que ese hospital era excelente y estoy segura que buscaron las mejores opciones.

- Pero no las encontró y quizás yo...

- Si el hubiera querido algo de ti hubiera contestado tus llamadas.

- No Lexa, no sabes lo que es estar enfermo de cáncer, la angustia que se siente, el dolor físico, el sufrimiento emocional...

- Entiendo tú impotencia Clarke, siempre intentas arreglar todo pero no puedes arreglar esto.

Clarke había intentado controlarse pero en ese momento, al escuchar las palabras de Lexa no pudo evitar quebrarse. Sus ojos se inundaron de lagrimas que no tardaron en bajar por sus mejillas.

Eran palabras sinceras lo que había dicho la teniente, en ningún momento con maldad o ganas de hacerla sentir mal. Lexa simplemente no era así, ella solo le dijo la verdad, una verdad que quizás desde hace mucho tiempo nunca nadie se había atrevido a decirle.

Se llevo las manos a la cara y dejo que el llanto la conquistara.

Solo pasaron milésimas de segundos antes de sentir el firme abrazo de Lexa rodeando su cuerpo. No la soltó en ningún momento, la acompaño hasta que sus ojos no pudieron llorar mas.

...

- ¿Crees que siga despierta?.- preguntó la teniente.

- No lo sé.- y abrió lentamente la puerta.

Alex se encontraba sobre su cama debajo de su manta, Simba que estaba en el piso levanto la cabecita al escucharlas.

Ambas se voltearon a ver y decidieron que lo mejor sería dejarla descansar, había sido un día largo para su pequeña hija.

Terminaron de recoger la sala y la cocina antes de ir a su cuarto.

- Vaya...realmente quisiera dormir sobre una cama esta noche.- dijo Clarke.

- Lo sé.- la morena se sentía igual.- El martes llega y ese mismo día me encargare que este lista.

La ojiazul se acercó a la teniente que se estaba quitando la corbata.

- Sabes que te amo ¿verdad?.- y terminó de quitarle la corbata para dejarla caer al suelo y empezar a desabotonar su camisa.

- Lo sé.- le contestó para después besar su frente.

Take my body (Clexa)Kde žijí příběhy. Začni objevovat