La Dos Caras De Un Mismo Destino ( Vondy ) completa

47' capítulo

Luego preparó una taza de chocolate caliente para Lucas y llamó suavemente a la puerta de la habitación. 

-Gracias (dijo Dulce) le vendrá bien. El pobrecito está helado.
-¿Cómo se encuentra?
-Agotado. Espero que se quede dormido enseguida.
-Veo que Rudy ya se ha tumbado en la alfombra después de hacer su trabajo.  Ese cachorro merece una medalla, no se ha movido de su lado.
Dulce esbozó una sonrisa.
Christopher bajó al cuarto de estar y echó un tronco en la chimenea antes de dejarse caer sobre el sofá.

_____

Dulce bajó al cuarto de estar sin hacer ruido.
La chimenea estaba encendida y a la luz de la lámpara,  vio a Christopher dormido en el sofá.
Al ver que el flequillo le caia sobre la frente,  como si fuera un niño , se inclinó para besarlo...
Estaba arropándolo con una manta cuando abrió los ojos. Su mirada era un poco vidriosa y turbadoramente sexy.

-Hola (murmuró) ¿Cómo está Lucas?
-Ha tardado un rato en dormirse , pero no creo que despierte hasta mañana.
-Me alegro...

Christopher se incorporó,  desnudandola con la mirada,  y Dulce sintió un aleteo en el estomago.  Se habia acostado con el una vez y se habia dicho a si misma que no significaba nada, pero en esta ocasión sabía que estaría arriesgando el corazón.
Tal vez hubiera sido más sensato quedarse arriba.

-Siéntate,  Dulce (dijo el entonces) lo has pasado muy mal y tienes que descansar un poco.
-Ese es el mejor consejo que he escuchado en toda la noche.

Mientras ella se dejaba caer sobre el sofá, Christopher empujó una otomana.

-¿Mejor?
-SI, mucho mejor.
-¿Quieres un café?
-No, gracias. Eso me mantendría despierta.

Christopher enarcó una burlona ceja. Pero no insistiria,  estaba segura .
Tenía demasiado orgullo para eso. Lo que pasara,  si pasaba  algo,  sería decisión suya.
Christopher le levantó los pies para ponerlos sobre la otomana y solo entonces se dio cuenta de que seguía llevando las zapatillas empapadas por la nieve.
Con cuidado,  el se las quitó,  sacudiendo la cabeza.

-Pobres pies, son como dos bloques de hielo. Espera , vuelvo enseguida.

Salió de la habitación y volvió un momento después con una toalla y un frasco de contenido misterioso. Sentándose de nuevo en el sofá,  se colocó sus pies sobre las rodillas y empezó a darle un masaje.
Dulce cerró los ojos mientras Christopher le secaba los helados pies con la toalla, húmeda y caliente.
La sensación era tan agradable que los ojos se le llenaron de lágrimas.
¿Alguien en toda su vida había hecho algo así por ella?

-Has aprendido esto del demonio,  junto con el masaje en los hombros ¿Verdad?

Bromeó,  para disimular lo que sentía.
Christopher esbozó una sonrisa.

-Si,claro, a cambio de mi alma.
-Seguro que lo haces con todas las mujeres.
-Solo con las que tienen los pies helados.

Christopher abrió el frasco que había llevado con el. Era una crema que olía a sándalo y con la que le dio un masaje en el empeine y la planta de los pies , creando chispas de placer que le subían por las pantorrillas, los muslos y ......

Bueno chicas os dejo otro capítulo más espero que os haya gustado este míni maratón :) besos