❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀

3.5K 278 31
                                    

-Acabo de abrirme contigo y tú no has dicho nada sobre el tema. -tenía mas de quince minutos afuera del departamento donde habita Guillermo, recibiendo reclamos.

-¿Cuál tema?

-Que, que siento algo. -balbuceó.- Di algo sobre eso.

-No soy muy expresivo...

-Tampoco eres un robot.

-Disfruto de tu compañía.

-¿Es todo lo que dirás? -lo pensé apenas un segundo.

-Sí. -pareció no bastarle, aventó la puerta, pero impedí que se cerrara.- ¿Qué quieres de mi, Guillermo? ¿que me hinque y te pida perdón por ser un idiota? ¿que grite a los cuatro vientos que quiero que estés conmigo? -pero él seguía inexpresivo. Así que guardándome el orgullo en el bolsillo del saco, me hinqué frente a las cajas que hacían de barrera entre los dos, por primera vez en toda la tarde, dejó de verme con rabia.- He pedido soportar que muchos me hayan dejado... pero no tú. -Nadie lo dijo, no salió ningún referí de box a levantar el puño de Guillermo... pero él ganado, un joven con el que yo pretendía jugar, me derrotó... me había enamorado de él. - Quiero que estemos juntos, porque te quiero como hace décadas no quería... y si para que me perdones es necesario permanecer hincado, pasaré siglos si es necesario.

-Venga ya, levántate. 

-¿Me has perdonado ya?

-¿Qué... qué me garantiza que no estás mintiendo solo para salirte con la tuya? -A pesar de mi melodrama, seguía crédulo. sin dejar de mirarnos a los ojos e importándome muy poco la barrera de cajas, me puse de pie, tan cerca uno del otro, se ruborizó... su mirada se desvió a mi boca durante una milésima de segundo, ese fue el incentivo que necesitaba para plantarle un beso. 

Una de mis manos en su nuca, la otra indecisa entre la cintura y la cadera, disfrutando del beso que yo deseaba más que nada en este momento, sentía ambas manos en mi pecho. Terminamos el beso y nos miramos con ansias de más, sin decir nada, entramos al departamento y entre beso y beso terminamos en la cama, antes de tumbarnos en ella, nos tomó unos segundos despojarnos del exceso de ropa. 

Estaba sobre él, besando su cuello, motivado por el sonido de su respiración, sus manos iban de un lado a otro sobre mi cuerpo, sentía mi corazón latiendo con más fuerza que nunca. estábamos ahora pecho contra pecho, con movimientos lentos y a veces rápidos, su espalda se arqueaba, sus  ojos se cerraban con fuerza, me tenía prisionero entre sus  brazos.

Al final, los brazos me temblaban debido a la posición en la que había estado durante el ultimo rato, la habitación se tornó silenciosa. Ya serenos y recostados el uno a lado del otro, pedí...

-Vente conmigo, -Lo voltee a ver y él a mi. Era un adonis.- vivamos juntos... no quiero pasar más tiempo lejos de ti.

-Aún no creo que estés siendo honesto... -por un instante le creí, pero lo delató su sonrisa- sólo bromeo.

-¿Entonces sí? -asintió sonriente y a manera de celebración, nuestros labios se volvieron a encontrar. 

❀ Sugar-daddy ❀ wigetta.Where stories live. Discover now