❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀❀

6.6K 564 210
                                    

Le entregué una bolsa de papel, la tomó de mala gana, ni siquiera la abrió. Apagué el motor.

-¿Qué es lo que te pasa estos últimos días? -No respondió.- Quéjate de lo que quieras quejarte de una buena vez. ¿No vas a decir nada? -Me estaba colmando la paciencia.- Déjame recordarte una cosa, no me estás haciendo un favor por estar aquí, estas recibiendo cosas a cambio. -Volteó a verme como para decir algo pero no se animó- ¿Qué? ¿Ya se te olvidó que estas becado por mí? ¿Ya se te olvido que todo eso -señalé su ropa- yo te lo di? -Bajó la mirada.- ¿Vas a llorar? Se me olvidaba que eres un niño. -encendí el auto.

-No soy un niño. -dijo en voz baja.

-¿Dijiste algo? -lo reté.

-Sí... dije que no soy un niño. Tal vez te lo parezco porque me doblas la edad.

-Bájate del auto. -No hubo necesidad de decirlo dos veces ni siquiera se llevó el regalo.

-Tiene una llamada de la universidad, dicen que es importante.

-Está bien, -quizás había un problema con el cheque- pásame la llamada, Carmen.

-Buenos días, señor de Luque. -saludó la mujer del otro lado, respondí su saludo- Tuvimos un inconveniente con Guillermo Díaz, su becado.

-¿Qué pasa con él? ¿Está bien?

-Él está bien no se preocupe por eso, de hecho habló conmigo hace unas horas y renunció a la beca.

-¿Dejó la escuela?

-No, no, solo renunció a la beca que usted le proporcionaba.

-¿Como pagará la escuela ahora?

-Esa información es privada, no se la puedo brindar.

-Está bien... ¿Dijo los motivos de su renuncia?

-Le repito, que esa información no se la puedo brindar. El motivo de mi llamada es para comunicárselo y hacerle saber que recibirá un reembolso de su dinero.

Lo primero que hice al terminar la jornada de trabajo fue pasar al departamento de Guillermo ya que evitaba mis llamadas.

-¿Guillermo? -Oprimía botones al azar en el interfon.

-Aquí no vive ningún Guillermo. -Me quedaban solo tres intentos más.

-Disculpe. -apreté el siguiente.

-Diga... -reconocí su voz.

-Gui... Guillermo soy Samuel, ¿Podrías dejarme pasar?

-Te estaba esperando. -La puerta sonó, la empujé y subí hasta su departamento, había cajas de cartón afuera de la puerta, toqué.- Esas son todas las cosas que me diste, tómalas y vete. -gritó desde adentro- Ah y perdón por hacerte perder tu valioso tiempo.

-¿Podrías abrir un minuto al menos? -Eso hizo.- Dime que ocurre, no entiendo por qué estás haciendo todo esto...

-Lo que ocurre es que no sé qué ocurre.

-No juegues conmigo.

-Vienes a mi trabajo y me haces renunciar, -navegó en el pasado- me das un empleo y cuando empiezo a sentirme cómodo en el resulta que tus intenciones siempre habían sido otras. Y cuando comienzo a adaptarme a ese nuevo "trabajo" por llamarlo de alguna manera, yo... no sé.

-¿Tu qué?

-No sé... me empiezas a gustar, vale. Y cuando empiezo a pasármela bien a tu lado resulta que pasas de ser serio a ser mamón. No eres la octava maravilla ¿sabes?

-Nunca he sido "mamón" contigo.

-¿Ah no? Que no hable, que hable, que me siente, que me pare, que haga esto, que no haga aquello... no soy un títere.

-Estas cosas pudiste decírmelas mientras comíamos, mientras estábamos en mi oficina, en cualquier lugar. No tenías que hacer todo este drama.

-Para ti, todo lo que hago es drama.

-No todo, pero sí renunciar a la beca ¿Cómo vas a pagar la escuela, Guillermo?, empacar todos los regalos como si yo fuera a aceptarlos de vuelta. Venga, dejemos esta tontería a un lado.

-Para mí no es una tontería. Acabo de abrirme contigo y tú no has dicho nada sobre el tema.

-¿Cuál tema?

-Que, que siento algo. -balbuceó.- Di algo sobre eso.

-No soy muy expresivo...

-Tampoco eres un robot, algo debes sentir.

-Me agrada tu compañía. -Esperó más.- No estoy feliz con que estés dejándome.

-¿Es todo?

-Sí.

-Vale. Fui tonto al no hacerle caso al Guillermo del pasado que me decía "no confíes en ese hombre".

-Veo que no puedo hacer nada para hacerte cambiar de opinión, si estas esperando que me arrodille, si estas esperando que haga alguna cosa especial, no pasará. Si quieres terminar con esto, no puedo mantenerte a mi lado a la fuerza. Pero entiendo tu situación, así que retoma la beca, no esperaré nada a cambio.

-No quiero nada tuyo, ya veré como me las arreglo con la universidad, ya veré como me las arreglo para comprarme cosas costosas que no necesito, ya veré como me olvido de ti. No te preocupes, he sobrevivido sin la ayuda de nadie durante años. -¿A qué había venido hasta acá, a rogarle? Ese no soy yo. Samuel de Luque no baja la cabeza por nadie. Guillermo se había equivocado si creía que me haría cambiar. Saqué mi cartera, tomé el efectivo que traída y lo dejé sobre una de las cajas.

-Vende las cosas, seguro que te alcanza para un año más de escuela. -Fue lo último que escuchó de mí, fue lo ultimo que supe de él.

///

Gracias a quienes leyeron la historia y apoyan votando y comentando


❀ Sugar-daddy ❀ wigetta.Where stories live. Discover now