Día 1.

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Para Gerard era difícil el levantarse todos los días. Eso de la vida cotidiana jamás fue lo suyo. Y es que en su mente, seguía esperando que algo muy genial le pasara algún día y así pudiera salir de esa estúpida rutina cotidiana. La monotonía diaria.

Aunque no consideraba que todo fuera malo en su vida. Bueno. No era alguien muy agraciado. Tenía el pelo largo hasta los hombros, de un color negro demasiado intenso, además de grasiento pues no siempre se lo lavaba. Y aunque contaba con atributos que según su madre, su hermanito y su único y mejor amigo, Ray, eran lo más atractivo de su persona, (Si, hablaba de su nariz respingada y sus ojos verdes), su físico no era algo envidiable ni mucho menos algo que cualquier persona vería y consideraría atractivo. Mucho menos un hombre, ya que Gerard era abiertamente gay.

Razón número uno por la cual era un perdedor.

Que más da.


Y bueno, regresando a lo único bueno que tenía en su vida, en primer plano, y el único, realmente, se encontraba ese gusto, amor, u obsesión a un tipo llamado Frank Iero.

Frank Iero.

Uno de los chicos más populares de la preparatoria local de Jersey.

Frank Iero, mejor amigo de su hermano y novio de la chica más linda de la institución.

Frank Iero, la única persona que cuando pasaba a su lado, no fingía que no existía.

Gerard era Gerard para Frank.

Una vez, incluso, le ayudó a parar la hemorragia de su nariz ya que unos tipos le habían golpeado por no aceptar hacerles una mamada.

Y bueno, recuerda que fueron los veinte minutos más geniales de su vida al lado de Frank.

Su devoción era tal, que era de esos que pegaban fotos de su crush en su pared o en su casillero mismo.

Claro que aún no había llegado tan lejos, ya que alguien podría verlo y lo que menos quería era que fastidiaran a Frank con el chico más perdedor de la preparatoria.

Y bueno. Seguía soñando despierto. Tal vez algún día Frank podría ser algo más que el tipo buena onda que le habla por lastima. Por qué sabía que solo le dirigía la palabra por lastima. Tal vez algún día, Frank sería su amigo. O mucho mejor... Su novio.

- ¿Te traigo un balde?- La voz de su mejor amigo le hizo volver a la realidad, desenfocando a Frank y mirando a Raymond parado al lado suyo.

La puerta de su casillero estaba abierta, así que carraspeó enseguida volteándose a acomodar sus cosas y sacar sus libros.

- No sé de qué hablas.

- ¿A no?... ¡Ahí viene Frank!

- ¿¡Dónde!?- Salta en su lugar y fulmina a Ray cuando esté estalla en carcajadas. - No es gracioso.

- ¡Debiste ver tu cara!.- Quiere golpearle, pero Ray es su único amigo y enserio le aprecia.

Suspira resignado cerrando su casillero y apoyándose en este mientras abraza sus libros.

- Enserio no lo es... Solo déjame soñar despierto...

- ¿Y si le hablas?, digo, ¿qué es lo peor que puede pasar?

- ¿Ser ignorado?, no lo sé.

- ¿No que Frank era el único tipo que te habla aparte de mi?

- Si, cuando no hay nadie cerca.- Masculla en un puchero. Ray solo pude hacer una mueca no sabiendo que decir, viendo entonces ambos como unas carcajadas estruendosas rodean al grupito de Frank y sus amigos.

Los populares les dicen. Una creación de la sociedad de pura mierda que no sirve para una madre más que humillar a la gente, según Gerard.

Este suspira y ve como Mikey entrega una invitación a Bert McCraken, uno de esos tipos que hace lo que sea para conseguir la atención de todos.

- ¿Crees que nos inviten?- Gerard mira a Ray de reojo quien también hace lo mismo y ambos estallan en una corta carcajada.

- ¿A la fiesta de Frank?, ¿bromeas cierto?

- Claro que bromeo.- Afirma el moreno. Ambos continúan riendo para así continuar viendo la escena. Frank abraza por los hombros a su novia y varios les rodean. Mikey está al otro costado entregando invitaciones por él. Invitaciones para la fiesta de cumpleaños del castaño quien al fin cumplía la mayoría de edad.

Entonces empiezan a caminar hacia ellos. Es extraño incluso por qué parece que caminan en cámara lenta y que el viento mueve sus cabellos haciéndolos ver aún más cool de lo que son.

Varios aún les siguen rodeando pero no parece molestarles. Y enserio, quiere que Frank voltee a verle, pero entonces pasa a su lado y este le ignora y está a punto de ponerse triste, suspirando resignado mientras mira a Ray con una mueca y este solo le ve con lastima, pero entonces escucha que las risas se detienen y ahora su mejor amigo tiene los ojos bien abiertos.

- ¿Qué?- Le pregunta. Ray mueve los ojos hacia una dirección tras suya, lo cual le hace girar topándose con el castaño.

- Hey...- Dice alargando la última letra. Gerard solo puede sonreír con nerviosismo.

- Hey.- Responde. Frank muestra una de sus manos que mantiene en su espalda, alargando un sobre color naranja con letras negras que dicen, con todo el estilo del mundo, "Ieroween".

- Es hoy. Espero verte ahí... Tú igual Toro.- Gerard la recibe enseguida como temiendo que se desvanezca y asiente enseguida. Quiere responder pero cuando alza la mirada Frank ya esta devuelta con su grupo de amigos, volviendo a abrazar a su novia y viendo a Mikey verle con fastidio para seguirlos de vuelta y caminar de nuevo.

Aunque realmente no importa.

- ¿Nos acaban de invitar a una fiesta?- Balbucea el moreno. Gerard sigue atónito y repasa cada momento de lo ocurrido en su mente y en ella misma es que está gritando solo una cosa.

"Si."

***
Primero capítulo :)

Ojalá les guste ^^
Frank Tops

En una noche de Halloween. 'Frerard'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora