XI

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Unas semanas después, SeHun empezó a tener mareos, nauseas y se sentirse enfermo.

Tenía un leve presentimiento de que iba todo eso. Pensaba que ese raro sueño que tuvo; era solamente una premonición de porqué se sentía así. Quizás un pequeño bebé estaba creciendo en su vientre aún plano.








Ese día SeHun se levantó temprano, no quería que sus dos  futuros esposos preguntarán a donde iba, pero su plan se echó a perder justo cuando ChanYeol se despertó.

—¿Ángel? —preguntó ChanYeol, aún con los ojos cerrados.

—Shhh... soy yo, tranquilo —respondió SeHun, bajando el tono de su voz para no despertar a Kai. Aunque dudaba que lo hiciera, ya que éste dormía como oso.

—¿A dónde vas tan temprano? —volvió a preguntar ahora ya más despierto.

—Voy a la farmacia —Contestó SeHun nervioso.

ChanYeol al escuchar que SeHun quería ir a una farmacia, se levantó como un rayo de la cama, y fue directamente al baño para lavarse la cara.

—Channie… —SeHun no quería que ChanYeol lo acompañara, porque sino se daría cuenta de que quizás estaba embarazado. Quería darle la sorpresa a los dos si llegaba a ser cierto de su futuro frijolito.

—SeHun —ChanYeol lo miró serio— déjame acompañarte.

—Bueno —hizo un puchero que fue besado por un sonriente ChanYeol.

Mientras el alto se vestia, SeHun fue a darle besitos en todo el rostro a un dormido Kai.

—Vamos, ángel —dijo ChanYeol mientras se reía de como SeHun no podía despertar a Kai.

—Nunca se despierta con nada —SeHun miraba preocupado a Kai.

—Siempre fue así —ChanYeol sonreía mientras tomaba la mano de SeHun y salía de la habitación.

                          









—¿Me dirás por qué te urge ir tan temprano a la farmacia? —ChanYeol miraba a SeHun, esperando una respuesta— y no me mientas.

—Creo que estoy embarazado —dijo SeHun de repente. ChanYeol frenó de golpe.

—Ángel, dime que no es una broma —ChanYeol lo miraba demasiado emocionado para su gusto.

—No, Channie —SeHun estaba rojito de vergüenza. Tanto así que cubrió su rostro con sus dos pequeñas manitos, era un tomatito viviente.

—Oh por dios, esta es la mejor noticia que me has dicho —agarró las mejillas sonrojadas de SeHun y las beso tiernamente. Empezando a recorre desde su barbilla hasta detenerse en su frente, dejando un último beso en esa zona.

ChanYeol arrancó el auto una vez que se separó de la sonrojada cara de SeHun, entre tanto éste iba pensando en cómo se lo tomaría Kai en el caso de estar embarazado.

SeHun bajo rápido del auto y entró a comprar la prueba de embarazo, ChanYeol pensaba en cómo sería ser padre.

Se encontraba demasiado feliz, rezaba para que SeHun en realidad estuviera esperando un bebé.








Una vez que comprarán el test, ChanYeol condujo rápido pero con cuidado, ya que SeHun podría estar embarazado. Al llegar a la casa, ChanYeol abrió la puerta del acompañante y ayudó a SeHun a bajarse, éste fue velozmente al baño mientras que ChanYeol se comía las uñas de nervios.

—Esto no puede ser... —SeHun miraba las dos líneas que marcaba el test— estoy embarazado... —ChanYeol al escuchar el llanto de su hermoso ángel, entro rápidamente al baño; encontrando a SeHun llorando como un bebé.

—¿Qué pasa? —preguntó ChanYeol mientras tomaba el test y lo miraba entre sorprendido y feliz, el resultado había dado positivo.

—Seremos padres —dijo ChanYeol mientras cargaba a SeHun y subía a su habitación.

Al llegar, se encontraron con Kai recién levantado pero al ver que ChanYeol cargaba a SeHun quien estaba llorando, Kai corrió hacia ellos.

—¿Qué le sucede? —Kai estaba preocupado.— ¿Qué cojones le hiciste?

—Kai —ChanYeol lo miró sonriendo, eso asustó más a Kai— seremos padres.

Kai quedó blanco como un papel, no podía creer lo que salió de la boca de su mejor amigo pero lo que más le preocupaba, era el estado en el que estaba SeHun. Porqué su muñequito lloraba.

—¿Por qué lloras, muñequito? —dijo Kai mientras quitaba a SeHun de las manos del alto y lo cargaba hasta la cama. Depositandolo con sumo cuidado como estaba acostumbrado hacer.

—Tengo miedo —dijo SeHun una vez calmado.

—¿Miedo de qué? —le preguntó Kai.

—Miedo de que no me quieran más —SeHun empezó a llorar más fuerte hasta que sintió como era abrazado por dos fuertes cuerpos.

—Escúchame bien, SeHunnie —dijo ChanYeol mientras limpiaba sus lágrimas y Kai se encargaba de dar suaves caricias en su espalda— esta noticia es la mejor que nos has dicho, como te dije hoy.

—Yo estoy demasiado contento —Kai le sonrió para tranquilizarlo— nunca te dejaremos, eres nuestro y nosotros todo tuyo. —SeHun se sonrojo por las bellas palabras de esos dos locos.

Ahora sabía que su bebé sería aceptado en este mundo se dejó mimar en esa enorme cama, sabía que nada más le faltaría, sobre todo amor.

                             







Al pasar dos semanas SeHun se encontraba demasiado feliz, sus padres y amigos ya sabían de su actual estado. Todos lo tomaron bien, excepto BaekHyun que pegó el grito en el cielo cuando se enteró pero después de llorar media hora y de decir que su bebito lo haría abuelo, se calmó.
Los preparativos de la boda marchaba bien.

Kai y ChanYeol empezaron a pelear sobre el sexo del bebé, Kai decía que sería niña y ChanYeol niño, mientras que SeHun intuía que sería una hermosa niña pero no decía nada, porque le divertía las disputas de esos dos tontos.

—¡Será niña! —gritaba Kai enojado.

—¡Que no! será un niño —gritaba ChanYeol también.

—¡Se callan los dos! —le gritó SeHun ya molesto de tanto alboroto.

ChanYeol y Kai se callaron de inmediato, SeHun se había vuelto muy mimado y demandador. Si él quería comer torta de chocolate a las dos de la madrugada, tenían que salir corriendo Kai o ChanYeol a conseguir los antojos de SeHun. Si no se encontrarían con jaladas de cabellos y pequeños pellizco.

—Quiero tomar helado. —dijo SeHun— Traigan helado ¡ya!

—¿Vas tú o yo? —preguntó Kai, mientras pellizcaba las mejillas de SeHun.

—Voy yo —dijo ChanYeol para ir por helado para su ángel.

—Buen chico —dijo SeHun mientras sonreía y Kai lo acompañaba con carcajadas.

                              

Después de unos días, SeHun se encontraba caminando hasta la casa de sus padres. ChanYeol y Kai estaban en una reunión importante y él no quería molestarlos, así que salió sin decirles nada.

Iba caminando tan distraído que no se dió cuenta que un auto paro justo al lado suyo.

—¡SeHun! —escuchó que gritaban su nombre, al darse vuelta se encontró con la persona que no quería volver a ver.

—Kri-Kris… —SeHun solo quería correr pero su cuerpo no respondía.

—¡Adiós! —gritó Kris, antes de disparar hacía su abdomen.

SeHun empezó a llorar, pensando en su bebé, en sus dos amores y en que su corta y feliz vida se había terminado demasiado rápido.












                                 

" 𝙢𝙞𝙨 𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚𝙢𝙤𝙣𝙞𝙤𝙨 " % kaihunyeol حيث تعيش القصص. اكتشف الآن