- No veo tu nombre ni en el mando ni en la tele - dijo Ten, con sonrisa de superioridad, mientras la encendía.

En un arrebato, de ira, Kun, se situó frente a la televisión, extendiendo los brazos al máximo, impidiendo así que Ten pudiera verla.

- ¡Kun, sepárate! - gritó Ten.

- ¡Nunca!

- ¡Que te separes joder!

Pero el chico hizo que no lo escuchaba. El tailandés, cada vez se enfadaba más, mientras que en el rostro del chino, cada vez se formaba una sonrisa más amplia.

La chica, que seguía en una esquina del sofá, observando la pelea que estaban teniendo los cantantes, no se podía creer que discutiesen por algo tan absurdo e infantil como la programación televisiva. Siempre se los había imaginado, ligeramente más adultos en ese aspecto. Quizá era porque a ella y a Kim les solían gustar los mismos programas y, por lo tanto, no había discusiones acerca de lo que se veía. Pero por lo visto, en aquella casa, por lo que ella había visto en sus visitas, había gustos muy variados como para ponerse de acuerdo en qué ver.

- ¿Qué pasa aquí? - dijo Haechan desde la puerta de la sala.

- ¡Kun no me deja ver la tele! - espetó Ten.

- ¡Tú no me dejas ver lo que quiero ver! - replicó Kun.

- Aaaah - dijo el chico, pasando de largo.

Los chicos siguieron así durante un buen rato. Ninguno estaba dispuesto a ceder.

- ¿En serio? ¡Los niños son más civilizados que vosotros! - dijo Yuta entrando en la sala.

- Aun así no tiraron el mando por la ventana - dijo Taeyong, esbozando una sonrisa, justo tras Yuta.

Yuta puso los ojos en blanco y avanzó hacia el sofá. Taeyong, miraba divertido la escena creada por sus compañeros de grupo.

- Por favor - Yuta le arrancó de las manos el mando a Ten y cambió de canal -¡dejaos de una vez de gilipolleces! ¿Taeyong, qué quieres ver?

- Pues la verdad es que me da igual, pon en dónde quieras.

- Guay.

En apenas un minuto, Yuta había zanjado la discusión que durante quince minutos habían mantenido Ten y Kun. La sorpresa que sentían ambos chicos, no podía compararse a la de Liora. Nunca se hubiera imaginado que Taeyong, ante una pelea se quedara impasible mientras que Yuta solucionaba el problema.

- ¿Por qué no hizo nada? Se supone que el líder está para eso - dijo Liora pensativa.

Pero rápidamente se dio cuenta de la estupidez que acababa de decir y, se avergonzó ligeramente de sí misma de haber pensado aquello. Sin apartar la mirada de las sorprendidas, pero contrariadas caras de los chicos, Liora, se acurrucó como buenamente pudo en su esquina del sofá. Aunque por desgracia, esta postura no duró mucho, debido a que Renjun, entró decidido a sentarse en la esquina en la que estaba ella. Con un leve bufido, la chica se levantó del sofá y se posición detrás, justo entre Yuta y Taeyong.

Desde ese momento, los chicos comenzaron a entrar masivamente en la sala, cada uno con su desayuno en la mano y sentándose en la esquina del sofá o del suelo que más les gustaba. A Liora le sorprendía cómo podían caber tantas personas en aquella sala, especialmente en el sofá.

- ¿Quién ha acabado los cereales? - dijo Johnny, desde la puerta de la sala, con una caja en la mano.

Doyoung y Taeil intercambiaron miradas.

- ¡No! - dijo desesperado - ¡No puede ser! Sabéis que son mis favoritos - protestó.

- Hay café en la cafetera - dijo WinWin sin darle importancia a lo que estaba sucediendo.

Behind The Wall [NCT]Where stories live. Discover now