Capítulo 10 Mi Nuevo Camino

480 37 16
                                    

No recuerdo el momento en que me dormí, sólo sentí los rayos de sol entrar por la ventana. Pase mi mano por la cama para tocar a Itachi, pero él no estaba aquí. Me levanté de la cama adormilada, entre al baño y al salir vi que el desayuno estaba en mi mesa, me dispuse a sentarme a comer cuando vi un papel pegado a la mesa.

Preparé el desayuno, disculpa que no me quedará a comerlo contigo. ANBU me requiere muy temprano por las misiones. Iré a una misión fuera de la Aldea. Cuidate mucho cerezo.
Itachi Uchiha.

¿Cerezo? Me quedé sin palabras, ese apodo no me lo dicen desde hace tiempo. Así que se fue, no era novedad ya que siempre estaba ocupado, todo el tiempo estaba fuera y pocos días se quedaba aquí. Me cambié hoy era un día normal donde saldríamos de la Aldea para llevar el pergamino por el cual habían llegado ninjas hace tiempo. Sabía que nosotros seríamos la "carnada" como era misión peligrosa era evidente que ANBU vigilaría desde algún sitio nuestro paso. Salí corriendo al lugar de nuestro encuentro, como siempre Sasuke primero, lo saludé y me senté en el piso a leer un libro sobre la Aldea de la Arena. No tardó mucho en llegar Naruto con Kakashi sensei, Kakashi se veía desesperado y era bastante normal ya que eso pasa siempre que Naruto se propone sacar información de algún tipo y está vez el compromiso de los ex compañeros del sensei.

- Buen día chicos. Hoy misión a la torre del Señor Feudal, meta... Bueno llevar un pergamino a salvo. Propósito desconocido. El pergamino es muy importante tiene un jutsu secreto que nadie debe conocer. Así que tengan.

Nos entregó a cada uno de nosotros un pergamino, todos eran iguales, como siempre Naruto le mato las ganas de abrirlo y Kakashi sensei le dio un golpe en la cabeza.

- Nadie debe abrir el pergamino ya que sólo uno es el original y los otros son copias por precaución de la misión. Al abrir libera un jutsu que los dejaría muertos al instante. Sólo yo se quien lleva el verdadero y por tal sólo yo les daré las indicaciones si encontramos enemigo. Ahora iremos a la misión.

Caminamos hasta la puerta donde salimos velozmente, ya que era de suma importancia que llegará al Señor Feudal para que lo mantuviera a salvo del peligro inmenso que se aproximaría. Estábamos por el bosque cuando paramos para comer algo y reponer energía, me senté debajo de un árbol a comer y a mi lado se sentó Naruto.

- ¿No te parece emocionante? -dijo dando el último bocado a su onigiri-

- Sí, es la primera vez que puedo ir donde está el Señor Feudal, mi papá habla mucho de él. Entonces es un buen hombre.

- Tienes razón cerezo. Anda vamos porque nos estamos atrasando.

Otra vez ese apodo... cerezo, no lograba acostumbrarme ya que pasaron años sin mencionarmelo. Me ayudó a levantar Naruto y volvimos a correr. El bosque se sentía extraño, tal vez era que no veía fin de él, estaba todo tranquilo hasta que el enemigo atacó. Un Kunai me dio en el brazo y otro más me rozo la cara, de inmediato me quedé espalda con espalda con Naruto que era el más cercano a mí. Eran varios enemigos que se dejaron mostrar, la lucha empezó y tuvimos que sólo defendernos para poder escapar.

- Chicos -gritó Kakashi sensei- hoy haremos un sacrificio el que lleva el verdadero pergamino correrá a la torre del Señor Feudal. Así que nos vemos.

Kakashi salió corriendo y detrás de él los ninjas, Naruto iba a correr a protegerlo pero Sasuke lo paro.

- No seas idiota Naruto, si hizo eso fue para ganar tiempo de que huyamos ya que alguien de nosotros lleva el verdadero pergamino.

- Tiene razón Sasuke, tan sólo piensa en lo que dijo. Los otros tres sólo lastiman a quien los abra.

Mientras terminaba esa última frase apareció ANBU, varios de ellos corrieron para apoyar a Kakashi sensei y dos se quedaron con nosotros.

- Bien deben acercarse, ¡quiero el pergamino!

- No es tan fácil. Si hacemos eso nos dejaran morir, así trabajan ustedes. No les importa cuantos mueran si cumplen el objetivo. A demás no sabemos quién lo lleva. -dijo Sasuke decidido-

- Entonces será a la mala.

- Intentalo dos de estos pergaminos son señuelos que al abrir lastiman a quien lo hizo. Son dos de ustedes así que si uno abre el equivocado el otro tiene otra oportunidad, pero aún así es 50% tener el correcto o morir.

Sasuke se veía confiado y yo trataba de mantener a Naruto callado para que no intentará hacer una de sus locuras más. Sabía que ANBU trabaja diferente a los demás ninjas, alguna vez Itachi me contó de que era ser parte de ello.

- Ahora ustedes nos escoltarán hasta el Señor Feudal. Y sino abriremos los pergaminos y no nos importa explotar. -dije sin titubear-

-  Sakura-chan estas loca -dijo Naruto con asombro-

- Lo estoy, no tengo miedo de morir aquí. Pero si moriré me llevaré a alguien conmigo. -puse cara de loca-

- Maldita niña psicópata. Ya veo porque eres ninja. Bien vámonos -dijo el enmascarado-

No tardamos mucho ver la torre a lo lejos pero todo este camino fue muy difícil ya que debíamos cuidarnos de los enemigos y ANBU. Un reto suicida prácticamente. Corríamos por el bosque cuando tropecé y perdí mi pergamino. No quise decir nada ya que si hablaba podríamos morir en ese instante pero si era el mío el verdadero entonces nos matarían sin piedad. Me quedé todo el camino en silencio hasta llegar a la torre, al llegar estaba Kakashi al lado de los ANBU saludando y llamándonos.

- Bien chicos entreguen su pergamino.

Tanto como Naruto y Sasuke sacaron su pergamino mientras Kakashi hacia la misma acción. Kakashi tenía ya los pergaminos en la mano cuando noté su cara de preocupación.

- ¿Dónde está el tuyo Sakura?

- Lo perdí sensei -me hinque al piso-

- Bien. Debemos irnos. Nada debemos hacer aquí.

- Sakura -escuché al unisolo de Sasuke Naruto-

- Lo sé, por mi culpa fallamos ¡Perdon!

- ¿Dé que hablan? ¿Creyeron que les daría un pergamino original? Esto sólo fue una prueba para ver qué tan hábiles son como ninjas, el equipo que traía el verdadero pergamino llegó y se fue hace un momento. Dejenme decir que pasaron está prueba.

Todo el camino de regreso a casa me fui apenada y con la cabeza abajo. Si hubiera sido real mi pergamino estaría muerta, era tan evidente. Naruto como siempre fue animado contando a Kakashi nuestro camino y cada detalle en particular. Llegamos con el Hokage, dimos el reporte y sin más me fui corriendo a mi casa.

Mierda, una y otra vez era la palabra que sonaba en mi cabeza por ser tan estúpida en una misión así. Al llegar a mi casa sin decir nada me puse a entrenar estaba tan enojada conmigo que sacar la rabia en entrenamiento era la mejor medicina. Mis manos sangraban y mis piernas estaban tambaleando ya.

- Hola -dijo Kakashi y yo cayendo al piso-

- Me asusto sensei. -me ayudó a levantar y se sentó en el piso-

- Estas herida ya. Pero no vine a eso. Noté como estabas después de regresar de la misión. Naruto me contó todo, tu valentía fue muy impresionante.

- Pero perdí el pergamino y si hubiera sido real la misión habría fallado.

- No importaba el pergamino, importaba que no dejarán morir a sus compañeros. "Aquellos que rompen las reglas son escoria, pero aquellos que dejan a sus camaradas son peor que escoria".

- No lo entiendo.

- Mi propósito era mostrar que tan buenos son como equipo y los sacrificios por ellos. Y tú pasaste esa prueba.

- Pero no soy buena como Sasuke, él es inteligente y pelea muy bien, incluso Naruto puede ser muchas cosas pero no ha fallado en las misiones, su torpeza y cabeza hueca lo hacen un súper ninja. Yo me quedo atrás de ellos. Siempre creí ser una buena ninja pero no es así. -empecé a llorar- Yo me creía una ninja magnífica pero no hago más que llorar y fracasar.

- Tal vez tu talento sea diferente. Sólo buscalo. -me abrazo y me recargue en su pecho-

- ¿Buscar?

Buscar mi lugar. Eran las palabras que no lograba comprender. Pero debía intentar. ¡Buscar mi lugar! Mi nuevo objetivo.

Mi nombre es Haruno Sakura Där berättelser lever. Upptäck nu