Memorias ║ Bastian Schweinsteiger

XLVIII

5 de febrero 2012

Ya estaba despidiendo a Bastian, nos encontrábamos en la cochera y me comenzó a comentar algo que me dejó en... no sé cómo explicarlo

-¿Cómo?- le pregunté a Bastian

-¡Que David me pidió tu número!- me dijo casi gritando

-¿Y se lo diste?- pregunté

-No, primero quería que lo supieras - hizo una pausa- le agradaste mucho- dijo

-Pues sí lo noté, ayer en la cena no se me despegó por ningún momento- dije riendo

-Pero sabes, no eres su tipo, eres demasiado buena para él, pronto se dará cuenta de eso- dijo muy seguro

-¡Oh! Entonces lo has de conocer muy bien- dije

-Entonces ¿le puedo dar tu número? - me preguntó

-Si quieres- le dije

-Ok, pero le advertiré que no se quiera pasar de listo contigo- dijo Bastian

-¡Ay Bastian!- dije

-Ya te enojaste- dijo asegurando

-¿Por qué lo dices?- le pregunté

-Porque siempre me llamas Basti y ahora me dijiste Bastian- dijo mirándome

-Perdón, Basti – dije haciendo énfasis en "Basti" y él sólo comenzó a reír

-¿Y nos apoyarás en lo que falta de Champions?

-Obvio sí-

-Más te vale, porque te traje esto- dijo sacando de su auto una caja medianita y me la entregó

-No, no voy a aceptar eso- le dije

¿A quién engaño? Yo soy de las personas que les gusta que les regalen cosas, aunque sea el más mínimo detalle.

- No sabes que es y ya me lo quieres devolver. ¡Qué bárbara eres! –

No dije más y abrí la caja. Era la playera de Bastian.

-No te hubieras molestado-

-Ninguna molestia- me respondió

Dejé la caja a un lado y lo abracé

-Basti, eres el mejor- dije

-Tú eres la mejor- respondió