●Capítulo 11: Nuestro lugar secreto●

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—El mío es mejor que el de ellos, yo te lo presto —habló Thomas.

—¡No quiero sus estúpidos celulares! —gritó y luego fingió un llanto.— ¡Quiero internet, maldito universo!

—¡Están todos de mal humor! ¿Qué les pasa? —se indignó, Emma.

—Y para empeorar las cosas... —musitó Charlie mirando como los estúpidos de Roswell entraban.

Liam miró a Alex y le guiño un ojo.

—No se si soy la única pero con el simple hecho de ver a Liam, se me revuelve el estómago —aseguró la pelirroja tragando saliva en forma de asco.

—Comparto el sentimiento —dije asintiendo.

—No tendría que decir esto porque soy una adulta madura o intento serlo pero ese chico provoca asco hasta en mi —opinó Lana.

—¡Conseguí señal! —gritó Ellie y se paró en una de las sillas.— ¡Se va, no, no, no te vayas, se fue!

Volvió a sentarse y Camille se encargó de tranquilizarla.

—Ajam, chicos, ya he terminado de desayunar así que, adiós, los veo más tarde.—los saludé y me levanté del asiento.

—Voy contigo —anunció Luke y me acompaño hacía afuera.

—¡Hace mucho que no hablamos, Lucas!

—¡Eso es verdad, Eugenia!

—¡Te he dicho que no existe una versión latina para June, Lucas, entiendelo, soy única e inigualable!

—¡Eugenia rima con June, te diré Eugenia!

—¿En qué universo Eugenia rima con June?

—¡En el mío Eugenia, no me discutas!

—¡Eres incurable!

—Por eso me quieres.

—Yo no he dicho que te quería.

—En el fondo de tu corazón hay un espacio enorme sólo con mi cara, Eugenia, lo sé.

Con el sólo hecho de imaginarmelo comencé a reirme a carcajadas. Luke Robertson si era una persona curiosa, raro como el mismo, divertido como ningún otro y por supuesto amable como el mejor.

•••

O M N I S C I E N T E

—¿Katy o Gaga? —preguntó Aaron.

—Gaga, mil veces —respondió Ellie.

—Estoy de acuerdo, te imaginas, nosotros dos, un dueto, Gaga.

—Sería la mejor presentación desde que Madonna besó a Brittney y luego a Christina —recordó Ellie.—Sabes Aaron, seremos estrellas, tu brillaras en Hollywood y yo en Broadway.

—¡Claro que si! —asintió el morocho.— Sabes, yo...

—¡Corran! —se escuchó el grito de Thomas y tras él venían los demás.

—¿Que rayos sucede? —preguntó Aaron y vio como pequeñas bombitas de pintura volaban por todas partes.

Detrás de sus amigos se encontraban los doce chicos de Roswell con baldes repletos de bombuchas cargadas con pintura.

—Estúpidos de Roswell —susurró Ellie y luego comenzó a correr.

Aaron la tomó de la mano y juntos corrieron escapando de la multitud, eran los primeros y con un impulso inesperado ambos cambiaron de dirección hacia el bosque perdiendo por completo a sus amigos y enemigos.

Campamento Zodiacal Where stories live. Discover now