6

30.1K 2.8K 182
                                    

Samuel

Me había comportado como un idiota con el pobre chico del cual ni siquiera sabía su nombre, lo deje encerrado en una habitación por varias horas, parecía que no me importaba como estaba, pero si el si me importa, me estaba volviendo loco escucharlo llorar y gritar en la habitación, lo único que quería hacer era correr a consolarlo, tomarlo entre mis brazos y decirle que todo estaría bien, y después llego hacia días que no la veía, tampoco me había acordado de ella, tenía a alguien más ocupando mis pensamientos, me dijo lo mismo que mi mente me dijo la primera vez que vi a ese chico, que me alejara de él, ese es mi plan, alejarme de ese niño, pero no ahora, me gustaría estar con él un poco más, alguien tiene que cuidarlo.

Me dirigí al cuarto a ver al chico, quería explicarle más detalladamente porque lo tenía encerrado, quería que él lo entendiera para que no se enfadara conmigo, quería preguntarle su nombre, tenia curiosidad sobre si su nombre sería tan lindo como él, pero cuando llegue a la habitación, el ya se encontraba medio dormido, tenia lagrimas bajándole por sus regordetas mejillas, y no pude evitar sentir lastima por el pobre y culpa por no haber hecho nada para detener esas lagrimas, lo debí haber dejado dormir, pero no pude, en cambio lo tome en mis brazos y lo lleve al baño, no le había dado la oportunidad de limpiarse ni de cambiarse de ropa cuando lo traje a mi casa, el seguía lleno de vomito, quizás eso fuera un tipo de violación, pero me tome la libertad de desvestirlo y bañarlo, intente hacerlo con cuidado, no quería lastimarlo, no sabía si él era consciente de lo que estaba haciendo, esperaba que no, espero que después no se enfade por esto, solo lo bañe, lo juro, intente no verlo más que como una pieza de porcelana que se podía romper si cometía un error, intente no tocarlo demasiado, pero su piel estaba tan suave que quizás me distraje un poco más de tiempo del debido, pasando mis dedos por su cuerpo, quizás lo observe de mas, pero necesitaba admirar su cuerpo, quizás esta era la única vez que tenía la oportunidad de hacerlo.

Le puse mi ropa, le quedaba muy grande, se veía adorable con mi ropa, me gustaría que vistiera mi ropa siempre, como si él fuera mío, deseaba que él fuera mío y ni siquiera sabía su nombre.

Trate de dejarlo en la cama y marcharme, pero no pude evitar observarlo un rato, incluso después de que se quedo completamente dormido, me quede viéndolo dormir en lugar de ir yo a dormir, pero es que era incapaz de apartar la mirada de ese niño, ya había violado bastante la intimidad del chico pero no pude resistirme a revisar su celular, lo había encontrado en uno de los bolsillos de su pantalón mientras que lo desvestí, no tenia contraseña, lo revise por si podía llegar a conocer a ese chico por medio de su teléfono, pero justo cuando iba a empezar a revisar el teléfono, este empezó a sonar, conteste sin pensar en que le diría a la persona al otro lado de la línea si llegaba a preguntar por el dueño del teléfono.

-¡Guillermo! Al fin contestas, creí que te había pasado algo, ¿donde estas?- era la voz de una chica la que gritaba, al menos ahora sabia el nombre del chico, Guillermo, bonito nombre.

-Mmm, no soy Guillermo, pero el está conmigo, está a salvo, no te preocupes-

-¿Y tu quien eres, y porque esta Guillermo contigo?-

-Me llamo Samuel, soy mmm amigo de Guille- no sé porque le dije Guille, pero me pareció que así me creería, y no pensaría que en realidad lo había secuestrado y ni siquiera sabía su nombre hace un segundo, después de mi respuesta, la chica se quedo en silencio por unos segundos, y cuando pensé que se había cortado la llamada, escuche un grito al otro lado del teléfono.

-¡TE ESTAS FOLLANDO A GUILLERMO!-

-No no, mmm soy solo su amigo, lo estoy protegiendo-

-Pero Guillermo no necesita a alguien que lo proteja, para eso ya tiene a su hermano, lo que él necesita es alguien que le rompa el culo- decidí ignorar las últimas palabras de la chica, y concentrarme en los datos importantes, Guillermo tiene un hermano, un hermano que debía protegerlo pero Guillermo había estado en peligro, y no lo había protegido, ese es el deber de un hermano, yo le falle a mi hermana y odiaba pensar que algo le podía pasar a Guillermo si nadie lo hubiese protegido en ese momento por que su hermano le fallo.

-¿Y tu quien eres y porque crees saber que necesita Guillermo?-

-Soy su amiga, y si le haces daño te mato, y es obvio que se que necesita Guillermo, necesita alejarse de aquel tipo y que algún alpha se lo folle, y tú tienes voz de ser un alpha bueno que sabe como follar omegas, volveré a llamar mañana, asegúrate de que responda.-

Me despedí de la chica, ella confió en mí, no pensó que lo que yo le decía era mentira, confió en que yo no le había hecho ningún daño a su amigo, sin siquiera hablar con él para saber si se encontraba bien, era muy extraña, pero también me inspiro confianza, era bueno saber que Guillermo tenia a alguien que se preocupara por el.

Hasta Que Seas Mío ||Omegaverse|[W]|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora