Y gracias a eso, me di cuenta de que sentías cosas por mí, no solo porque entendía a las mujeres, sino también porque cometiste un error.

Confiaste ese secreto a todas tus amigas, y ellas no disimulaban lo más mínimo.

Ya yo no era tu secreto, también de ellas.

Cada vez que tú y yo estábamos juntos, hacían una de las suyas. Nos giñaban el ojo o simplemente reían con picardía.

Soy un idiota © [NC #2]Where stories live. Discover now