Muñeca francesa

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Entre con Lisa para que viera a Samuel, blanca me quedé cuando escuché lo que dijo Samuel.
-Iba por la calle cuando escuché un derrape ,vi a un coche dirigiéndose a mi,no pude esquivarlo porque subió a la acera-dijo Samuel.
-Entoces no fue un accidente?
-No,alguien intentó matarme-dijo Samuel ,mis piernas flaquearon,me tuve que agarrar a la puerta para no caer-mi amor-me dijo Samuel.
-Seguiremos en contacto-dijo un agente a Samuel -con permiso-salieron.
-Samuel-dijo Lisa -como estas?
-Bien -sonrió Samuel y me miro-no fue nada.
-Como que no fue nada!!!-dijo su madre alterada--te han intentado matar.
-Beatriz, por favor -dijo don Ernesto.
-Papá llevala que descanse-dijo Samuel.
-Yo no me voy me quedó contigo.
-Beatriz vaya y descanse,yo me quedo con el-dije lo más tranquila qué pude porque no quería que notaran el miedo que tenia.
-Yo estoy bien-dijo Samuel-iros a descansar.
-No-me acerqué a el-déjame cuidarte.

Estaba nervioso, eran casi las ocho y no terminaba de decidir que camisa ponerme.
Mi vida –mi madre entró a mi habitación− te ves muy guapo.
− ¿Cuál? –le mostré las camisas.
−La azul cielo mi niño, ¿A dónde vas tan guapo? –la mire sonriendo.
−A la cita de mi vida –mi madre me acarició el rostro.
−Es con Chloe –sonreí y me tomo las manos− no la lastimes ella es una buena chica .
−No la pienso lastimar esa francesita se metió aquí –señale mi cabeza− pero sobre todo aquí –indique mi corazón.
−Me gusta para nuera ella y Andrea son perfectas para ustedes –me dio un beso.
-Como está mi hermano?
-Bien,Andrea se quedo con el,en unos dias le darán el alta.
-Que bien .
−Disfruta tu noche y cuídala mucho .
−Eso haré lo prometo –salió de la habitación y puse mi camisa.

Estaba nerviosa, dios mío Chloe es Flavio me dije mentalmente, pero de nada sirvió es tan lindo y se ha portado tan bien conmigo, que solo espero y todo lo que diga sea real.
Buenas noches –sonreí al escuchar a Flavio− te vez hermosa –me jalo hacía él y me beso.
−Tú también estás muy guapo –acaricie su rostro y me separe un poco de él.
−Lista –puso su brazo y lo tome un poco apenada.
−Flavio nos pueden ver –me miro sonriendo.
−Eso no importa, yo quiero que todo mundo se enteré que estás a mi lado –me puso frente a él antes de subir al auto me acarició el rostro− me gustas mucho Chloe –me tomo del cuello y nos besamos coloque mis manos sobre su cuello y acaricie sus rulitos− me vas a despeinar –dijo divertido.
−Me gustas más despeinados –me abrazo y nos separamos, abrió la puerta del auto y nos dirigimos a un sitio que no sabía cuál era porque todo era un misterio.

Estaba con Samuel el dormía,no podía dejar de mirarlo y pensar en lo que escuché .
(Te intentaron matar,tu no puedes morir, te tengo que proteger aunque me muera de dolor. Prefiero sufrir yo a que tu ...)
-Andrea,mi amor-escuché a Samuel,me limpie las lágrimas.
-Como estas?-me acerqué a el.
-Estabas llorando, mi amor si es por lo que escuchaste...
-Me mentiste-dije seria.
-Mi amor no quería preocuparte, seguro y le fallaron los frenos.
-Lo miré -No me tomes por tonta ,no lo soy.
-Lo se,es que no quiero qué sufras.
-Samuel te podrían haber matado-dije con lágrimas en los ojos.
-Pero no lo hicieron, ven-me senté a su lado -nadie me va hacer nada, tu haces que quiera vivir,ya no estés así,sonríe -tocó mi nariz-sonríe, si?-sonreí -Te amo mi amor, nadie nos va a separar-lo abracé.

Estaba sumamente nervioso con Chloe todo era diferente y no quería estropear esto que apenas estaba comenzando y la lleve a la casa en la playa que acababan de remodelar después del incendio.
Ven –le extendí mi mano y ella me miro un poco sería.
−Flavio yo –me acerqué a ella recargándola en el auto.
−Chloe me encantas y quiero que pasemos una velada linda –ella suspiro.
−Necesito que seas sincero Flavio de verdad yo no quiero sufrir –le acaricie el rostro.
−Y no vas a sufrir, me gustas eres una persona muy linda que se me metió aquí –tome con mis manos sus manos y la puse en el corazón− te juro que por nadie he sentido esto que estoy sintiendo por ti –me tomo de la nuca y me beso.

Cuando llegamos a la casa tenía miedo, no quería volver a sufrir, mi relación anterior me costó mucho trabajo superarla y no quería pasar por lo mismo, pero Flavio ha sido tan lindo que no podía evitar sentir, entramos a la casa y tenía preparada una cena, había pétalos y flores adornando el lugar y las luces eran tenues.
−Nada de velas –rompió Flavio el silencio− la última vez que hubo esto termino en incendio –sonreí con eso, se acercó a mí y me dio una copa de champagne− brindemos por nosotros y porque estemos juntos siempre –juntamos las copas y brindamos, se acercó a mí y me beso− tus besos son deliciosos .
−Debe ser el champagne –él negó y empezó a besar mi cuello.
−Toda tú eres deliciosa –volvió a subir a mi boca− ¿cenamos?
−Si –estaba nerviosa.

La cena fue muy amena Chloe me contó cosas de su vida, decidimos caminar un poco por la playa.
−Es muy lindo el mar –lo miraba perdida en él, me puso detrás de ella y la rodee por la cintura.
−No tan lindo como tú –bese su cuello, mientras ella ladeaba su cara, la gire y tenía los ojos cerrados delinee su rostro y vi una pequeña sonrisa, ver su cara era muy lindo, tome sus labios.
−Tus besos son muy ricos –dijo sonriendo mientras, nos besábamos, baje nuevamente por su cuello cuando los besos subieron de intensidad, llegando a sus hombros , ella me tomo el rostro.
−Flavio yo –coloqué mis labios en los de ella y no la deje hablar.
−Te amo Chloe –sus ojos se cristalizaron y nos besamos con pasión, metió sus manos por debajo de mi camisa, mientras yo acariciaba su cuerpo tan perfecto, con delicadeza baje el cierre de su vestido aunque lo que quería era arrancárselo de un solo tirón esa mujer me estaba volviendo loco, cuando el vestido callo en la arena, la mire estaba fascinado su cuerpo era perfecta− eres una muñeca –ella sonrió desabrochando quitando mi camisa y dejando un beso en mi hombro, tome su rostro y la bese lleno de lujuria y pasión mientras la acomodaba en la arena, empecé a besar todo su cuerpo, quite su brassier y acaricie sus pechos dio un pequeño grito de placer y tome su rostro− ¿estás segura? .
−Si –su voz estaba llena de placer, la tome el rostro nuevamente y la bese, baje por su cuello besando su cuerpo sintiendo como cada beso la excitaba más, quite la última prenda de ella al igual que la mía y me acomode para entrar, sentí sus manos apretando mi espalda, la mire a los ojos esos ojitos verdes que me encantan −Te amo mi muñeca francesa .
−Yo también te amo Flavio –ese te amo me hizo volar y la bese, perdidos en el placer y el amor del momento.

Estuve con Samuel hasta que se durmió salí de la habitación e hice una llamada.
-Géraldine Je suis Andrea, je veux que tu me faire une faveur-dije llorando.

La otra cara del amorWhere stories live. Discover now