La amenaza bielorrusa

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Me quiero disculpar por la demora de este capítulo pero me ha pasado muchas cosas personales que no me ha dejado tiempo ni para escribir este capítulo. Y también quiero pedir disculpas por el capítulo tan corto.
Sin más les dejo el capítulo.

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La voz de Anthony se enmudeció, aquellos ojos violetas poco a poco brillaron, su corazón se detuvo por un momento, miró nuevamente al americano para ver si era una broma pero el rostro sereno de su padre le decía lo contrario. En un impulso, saltó de aquella cama y con fuerza y ojitos llorosos se abrazó al ruso que éste con gusto le correspondió. Ambos ojivioletas reían con alegría, pues nunca pensaron que el americano los iba a presentar. El corazón de nuestro gordito americano latía con fuerza y es que ¡Al fin tuvo el valor de decirle a su hijo que el gran amor de su vida es su padre!, pero ahora tenía un problema, ¿Debía decirle a sus demás hijos sobre la relación que tiene Anthony con Ivan? O ¿Debía de callar para que no comenzará una guerra civil en su contra?

La puerta de aquel cuarto se abrió un poquito, dejando ver a un Arthur preocupado, América con tranquilidad le sonrió, haciéndole un gesto con la mano para que entrase junto con un asustado Matthew sostenido de su chaleco nada a la moda. Cuando Anthony vio a su abuelito y tío entrar a su cuarto, no pudo evitar abrir su boca y saltar aún abrazado al gran ruso de casi dos metros de alto.

  - ¡Él es mi papá!  - gritó feliz el pequeño estado, apachurrando más a su papá.

Arthur feliz se acercó ha Alfredo, abrazandole como un buen padre.

  - ¿Si? -preguntó algo tímido el canadiense - Tony, debes de estar feliz, ¿no?

  - Lo estoy, tío - murmuró, viendo a su papi Alfred - porque tengo a mi papi y a papá, ¡Soy el estado más feliz de todo!

Si lo dicho por el pequeño estado de Alaska no hizo morir a nuestro gordis, digo, nuestro nada gordo con grande trasero americano, pues aquí hemos fallado porque la verdad es que el pequeño si hizo morir a su queridísimo papá americano y es que Alfredo alias el país de la libertad al ver que su hijo al fin conoce a su padre y que este muestre una gran sonrisa de felicidad, lo hace el país más feliz de todo el mundo. Mientras que la no tan pequeña familia anglo-eslava se encuentra compartiendo extrañamente civilizada, veamos que está haciendo nuestro pervertido francés, el Neko kawai y el de sexo indefinido, ellos se mantenían hablando de lo sucedido, de vez en vez hablando de la pequeña familia que cada uno tuvo, ya saben, las tantas relaciones que tuvieron y las tantas citas que salieron, sus hijos y sus antiguos tutores. Francis aún recuerda muchas de sus conquistas y dos de ellas, las más apreciadas, aún recuerda a Jeanne d'Arc o como nosotros la conocemos, Juana de arco, esa jovencita que luchó para ayudarlo contra el anglosajón de grandes cejas, como ella fue asesinada, acusada de mentirosa, sospechosa de herejía y blasfema hacia Dios y los Santos, aún recuerda su injusta muerte, la pequeña Jeanne había sentido algo por él como él por ella y su muerte lo devastó, nunca amó ha alguien como amó a Jeanne, su segunda importante relación fue con el cejón, fue una relación que para algunos considerarían tóxica pero para él y Arthur no lo fue, duraron un poco más de que la Segunda Guerra comenzara y había comenzado cuando la época industrial estaba en su total apogeo y ahora, como todo buen francés pervertido, se encontraba saliendo a escondidas con cierto hermano de cierto país de libertad que no tiene nada de libertad porque espía a sus habitantes o eso es lo que dicen las malas lenguas, si, damas y damos, Francis Bonnefoy es novio de nada más ni nada menos que Matthew Williams, Arthur hará scones a la francesa con jarabe de mapple. China aún recordaba los días que sus pequeños niños aún eran unos niños, ver ha ambas Coreas ser felices, Japón siendo más cercano, Honk Kong siendo Honk Kong y su pequeña Taiwán siendo la emperatriz, estar con sus emperadores y conocer cada dinastía, cuando conoció a un pequeño ruso, la época que estuvo al poder del Imperio Mongol, las invasiones de los Hunos, cuando vio todas las dinastías acabarse, cuando Iván se le confesó, su relación con el eslavo, su rompimiento y ahora como que no quiere la cosa sale con Vietnam, si, la jovencita que el gordis atacó un tiempo atrás, La relación con la castaña se podría decir que es tranquila, relajada y algo cursi, llegado a ser agradable y a nuestro chino de sexo indefinido. Japón opinaba de vez en cuando, recordando las efímeras relaciones que tuvo a lo largo de su vida, cuando estuvo con Turquía, aún recuerda los momentos que estuvo con Sadiq y la vez que rompió con él, cuando un día lluvioso en el año de 1983, Inglaterra se le confesó y desde ese momento comenzaron a salir, una relación tierna y llena de momentos tranquilos e informativo, cuando su corazón se destrozó por segunda vez al terminar con Arthur y luego estaba él, Heracles Karpusi, el amante de los gatos y siestas, el filósofo por excelencia y el que tiene una vida sexual más activa que el mismísimo país del amor, ese descuidado chico de ojos bellamente verdes, ese que ha pasado días enteros hablando de filosofía antigua e historias magníficas de Dioses del Olimpo y grandes hazañas de mortales y semi Dioses, ese que ganó su corazón y que ahora está a su lado como pareja. Nuestros tres países favoritos se encontraban recordando sobre amores pasados y amores futuros.

Mientras a la lejanía del país de las libertades con un presidente de color que es tan cool como el alcalde de uno de los pueblos de Alaska y es que ese alcalde es un gato, ¡Un hermoso gatito que firma con su huellita de patita!, me desvío, me desvío, bueno, como estaba diciendo, a la lejanía del continente americano, cerca del continente europeo, se encuentra una hermosa chica de cabello platinado, ojos tan bellos y piel de porcelana, todos que la vean dirán lo mismo, es una muñeca viviente pero está muñeca no es tan frágil como piensan, es de armas tomar, literalmente lo es, si te acercas a ella con intenciones nada sana es probable que te tengas que despedir que tú junior, si tocas a SU amado hermano es mejor que tengas ya un testamento escrito y un lugar de entierro, su forma de matar puede ser diferente pero con la misma arma, un hermoso y afilado cuchillo de 22 cm, la belleza de esa chica sólo es una máscara, el nombre con que la llaman es Bielorrusia, Natalia para su jefe y Nataliya para su amado hermano Iván.

Los gritos de los guardias del Kremlin se escuchan por los pasillos de estez un aura amenazadora se siente a adjunto rincón y un presidente eslavo se encuentra revisando algunos documentos, la puerta se abre de golpe y el brillo de una afilada arma se hace presente, Belarús entra con elegancia pero amenazadora, aunque con algo de miedo bien disimulado, pues la única persona en que puede controlar a la bielorrusa, a parte de Ucrania, es el presidente Putin; los tacones de la joven se escuchan por la inmensa oficina del eslavo y sin esperar más, golpea la mesa con sus finas manos.

  - ¡¿Donde está mi amado hermano?! - exigió con rabia, pues al ir a casa de su hermano no lo pudo encontrar, ni el general invierno le respondió aquella pregunta - ¡Responde!
Putin miró con seriedad a la chica y sin inmutarse le respondió.

  - No tienes por qué saberlo. Señorita Natalia le voy a pedir que se retire de mi oficina en este instante o me tendrá obligado a usar la fuerza bruta

Natalia con cólera enterró su cuchillo en la madera de caoba bellamente trabajada, apretó su delicada mandíbula y aguantando sus ganas de matar a Ese hombre, se retira, sin antes de sentenciar.

  - Tienes 48 horas para que aparezca Iván, 48 horas, si no aparece en ese tiempo, la guerra será declarada y te destruiré a ti y a Tú gobierno que se interpone en el amor entre mi hermano y yo. ¡¿Entiendes?! ¡Solo tendrás 48 horas a partir de ahora!

La puerta de madera fue cerrada por un fuerte portazo y de entre sus labios un aspiro se escapó, ya se estaba cansando de la actitud de la jovencita, ya no sabía que más hacer para que entendiera que su nación no aceptará contraer matrimonio con ella, tenía que hacer algo o probablemente esa loca comenzaría una guerra por un mero capricho, y como ella dijo, tenía solo 48 horas, sólo eso o entraría en guerra contra Bielorrusia.

Un matrimonio arreglado y Una semana al estilo americanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora