They Never Know → KaiSoo

c i n c o

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errores que sí importan

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—¿Estás ansioso, verdad?

—Mierda, cállate.

Afortunadamente, Wu Yifan se calló no porque voluntariamente dejara de hablar, sino porque ocupó su boca para algo más útil que las palabras, al menos para Kyungsoo resultaba así. La boca de Yifan era bastante bonita, sus labios no eran muy gruesos pero servían para disparar niveles de placer en Kyungsoo. Todo el nivel qué él necesitaba para olvidar las mierdas que asediaban su mente.

Kyungsoo era demasiado voluble e improvisaba cuando su cuerpo le exigía atención, tampoco consideraba en demasía a quién le entregaba una parte de sí, tenía muchos amantes, aunque ninguno tan recurrente como Jongin. Y de hecho, los problemas de ansiedad de Kyungsoo, esos que lo habían llevado a utilizar los olvidados baños a dos pasillos de la biblioteca, tenían nombre y apellido y él no lo podía concebir, realmente no lo quería creer.

—Realmente estás tenso, uh.

Y odiaba en demasía que Yifan en lugar de usar su boca para masturbar su miembro, ocupara palabras que él no deseaba escuchar. Lo había llamado en medio de una rabieta a él y sólo a él porque de todos Yifan era el amante que no le hacía preguntas más allá de las que él podía manejar, sip, siempre buscaba la forma de molestarlo, pero Yifan no ahondaba en su vida, bueno, Jongin tampoco lo hacía con palabras, pero sí con sus brillantes ojos de cachorro lastimero.

Jongin era el problema. Jongin y su maldito altruismo con Oh Sehun y esas malditas ganas de enseñarle las libretas y los libros muy de cerca, también de sonreírle y ser tan permisivo cuando Sehun se rascaba la cabeza en icónica señal de que no entendía. Odiaba en absurda demasía darle importancia porque Jongin sólo era un amante convencional, uno que lo miraba con adoración y se preocupaba por él, pero que era convencional a fin de cuentas.

—Yifan, no estoy sintiendo nada —se quejó Kyungsoo, tratando de echarle la culpa a su compañero del hecho de que no podía sentir si quiera una corriente en la piel. No como con Jongin, de seguro.

Yifan se esmeró más luego de esa queja, de rodilla, con sus manos a ambos lados de la cadera de Kyungsoo y con el pene de éste hasta el fondo, trató de hacer todo lo posible, Yifan si lo estaba disfrutando, él tenía una especie de fetiche con un pene en su boca, sobre todo si este era el de Kyungsoo, pero él mismo no estaba sintiendo más que ganas de salir corriendo.

Y que Jongin se encargara de sus problemas sexuales como muchas veces lo hacía.

A pesar de lo increíblemente cursi que pudiese sonar, Kyungsoo recordaba la primera vez que Jongin le había comido de punta a punta el miembro, con una entrega y devoción no propia en nadie que hubiese estado entre sus piernas. Nunca pudo entender qué bicho le había picado, Jongin simplemente había dejado de besarlo con esmero para bajar hasta su pelvis y suspirar mientras usaba su lengua para hacer que la espalda de Kyungsoo se pusiera recta como una cabilla dura.

Había sido inexperto, de principio a fin, y casi se ahogó con el semen pero Kyungsoo no cambiaría esa experiencia por ninguna otra. Esos recuerdos siempre elevaban su libido, y con la boca de Yifan en su miembro no iba a ser la excepción, finalmente comenzó a sentir los estragos de un orgasmo, ese cosquilleo empezó a flamear y Kyungsoo medio sonrió imaginando que no era Yifan, sino Jongin.

Era una puta locura.

—Soojung-ah, espera allí. ¡Me pondré las lentillas y salgo!

Fue una mala jugada de la vida que Kyungsoo se corriera justo en el momento en que esa voz perpetuó en el baño que se suponía nadie usaba debido a que la mayoría de los cubículos estaban dañados. Kyungsoo escuchó como Jongin arrastraba los pies y tarareaba ajeno a que en uno de esos cubículos estaba él. Yifan por su parte, como un hombre que no tenía vergüenza de su sexualidad, y mucho menos en un baño, tragó todo lo que pudo de semen y sonrió habiendo completado su trabajo.

Entonces salió sin que Kyungsoo pudiese siquiera salir de su estupor, aún tenía el pantalón por los muslos, y el pene lentamente volviéndose flácido.

Jongin se asustó mucho cuando Yifan apareció de la nada en su campo visual, tenía una lentilla en la punta de su dedo, pero con toda esa luz en el lugar Kyungsoo apostaba que podía mirar con algo de claridad, y lo sabía por la cara que puso cuando se dio cuenta que la persona que estaba en el cubículo, era él, Kyungsoo.

—Hola, cerebrito —saludó Yifan a Jongin, ajeno a todo, llegando hasta el lavamanos y limpiando con descaro las comisuras de sus labios, allí donde habían restos de semen de Kyungsoo—. Nos vemos luego, Do. Ha sido un placer.

Sin apuros, Yifan salió del baño muy campante y mientras Jongin miraba su salida, Kyungsoo aprovechó a abotonarse el pantalón. No importaba, Jongin no importaba. Kyungsoo quería creer que entre ellos dos no había la necesidad de reclamarse exclusividad aunque a Kyungsoo le daban tres paros seguidos cuando Jongin se codeaba con Jung y más reciente, con Sehun. Aún así no había nada más que un convenio en donde Kyungsoo obtenía de Jongin todo el sexo que quería sin quejas.

—¡Jongin, apresúrate. Llegaremos tarde! —gritó Jung Soojung desde afuera, más allá de la puerta.

Jongin bajó el rostro notoriamente afectado, la lentilla que reposaba en su dedo volvió a su contenedor correspondiente y bajo el silencio que había estado reinando desde que entró, volvió a calzarse las gafas. Entonces una vez listo, salió del baño sin voltear a mirar a Kyungsoo, sin una palabra, sin nada.

Kyungsoo tuvo apenas unos minutos para acicalarse y convencerse que no era un problema, para nada. Que Jongin no era su jodido novio ni responsabilidad, y que si el asunto le había pesado demás sería su jodido problema lidiar con ello. Sin embargo le tomó el resto del día llegar a la conclusión, fatídica y casi verídica de que quizá, había arruinado todo con Kim Jongin.

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¡ACTUUUUUU!

K ONDA, no tengo internet, pero tengo una chingu que me da del suyo.

Denle gracias a Rebeca cuyo amor por Kai crece como la espuma,
aunque al mismo tiempo no sabe quién es Jongin 😂