Capítulo 15 : El fin

111 7 3
                                    

Capítulo 15 : El fin

Cerraba y abría los ojos. Pero nada funcionaba. La sangre seguía en el piso. Yo seguía en la esquina paralizada con los ojos como platos, observando lo único que me quedaba de Daniel. Mis lágrimas seguían bailando en mis mejillas hasta llegar al suelo. Seguía sin entender el porqué de esto. Ya no me preocupaba nada. Mi alma estaba muerta, mi corazón latía pero sin ningún sentido. Estaba perdida en un inmenso dolor que no cesaba. Encerrada entre cuatro paredes lúgubres. Estaba congelada en un eterno invierno.  ¿ De verdad una persona merecía tanto sufrimiento por una horrible venganza ? La  cruda realidad de esta historia me resultaba repugnante.  No podía ser que existiera gente como Robert o los padres de Daniel, no podía ser que su psicopatía no se viese a simple vista.

Interrumpiendo mis pensamientos la puerta de hierro se abrió. Pero no quise ver quién era. Seguí llorando, absorta en mi realidad, en mi dolor.

- ¿ Cómo estás ? - Le creí oír decir mientras se acercaba a mí, era Robert. Tenía el mismo tono de voz que cuando venía a pedirme perdón después de una discusión.

- Vete. - Levé la mirada para verle a los ojos, estaba llena de rabia en mi interior. Solamente quería vengar la venganza.

- No puedo dejarte…- Hizo una pausa para tragar saliva- Recuerda todos los momentos que hemos pasado juntos. Los felices que éramos tú yo, siempre tú y yo. Te quiero Elena, siempre te he querido desde aquella vez que nos vimos. 

Mi mente se traslado a nuestro primer encuentro. Yo estaba en una cafetería comiendo como una cerda, sin peinar, sin maquillar, en chándal. Él estaba en la mesa de enfrente, con un traje precioso que le quedaba genial. Con una sonrisa en la cara, con sus hermosos ojos color miel atrapándome son su mirada. A partir de ese día fui casi a diario a la misma cafetería para poder ver a ese chico que tanto me había atraído. Un día Robert se me acercó y se presentó, esa tarde la pasamos juntas. Charlando, paseando por toda la ciudad. Todo era tan mágico. ¿ Cómo podía pensar que el Robert que sería mi novio tiempo después de esa tarde podría llegar a ser un monstruo ? ¿ Cómo pensar que era un maltratador ? ¿ un asesino ?  

Todas esas preguntas hicieron que mi alma se llenará aún más de rabia y mi corazón gritara: “ ¡MONSTRUO ASESINO!“ , esa palabra resonaba en mi cabeza y botaba de un lado a otro como una pelota, él era el verdadero asesino y no Daniel.

- Entre tú y yo nunca hubo un nosotros. - Dije con la voz ronca , llena de sed de venganza. Al mismo tiempo que lo decía me levanté para hacerle frente aunque las piernas me temblaban no sé si era por la rabia acumulada o por el miedo que sentía.

Robert se percató de mi nerviosismo y se apresuró a intervenir para intentar aprovecharse de mí. 

- Vamos Elena. Ya no está Daniel. ¿ Qué vas a hacer ahora ? ¿ Pegarme ? Tú no eres así. No eres capaz de matar a nadie. - Dijo con la voz muy suave como si le estuviera hablando a un niño pequeño. 

- ¿ Sabes qué ? Tienes razón Robert, yo no soy como tú. No sería capaz de matarte, - Me acerque a él , ni siquiera sabía que iba ha hacer. Le miré a los ojos. Me quedé en silencio unos segundos y mi mente cambió de estrategia ni siquiera sé porqué lo hice pero me acerqué a sus oídos  y con la misma voz suave con la que él me había hablado minutos antes le susurré : “ Volvamos a empezar de nuevo”. 

- ¿ Me quieres ? 

- Sí. - Algo en mi mente me obligó a decir esa afirmación. 

- Por fin vuelves a hacer como antes. - dijo ilusionado. 

- Nunca he cambiado. - Dije mirándole a los ojos con una dulzura claramente fingida. 

Él se acercó a mí, me agarro por la cintura y me atrajo así. Sus intensiones eran claras : Besarme. 

La venganzaWhere stories live. Discover now