"APOLO 182"

XII: HEROES.

"Nunca quisimos hacerte daño. Siempre intentamos darte la mejor vida posible dentro de las posibilidades sociales.

Hemos quemado nuestros silencios y tomamos la decision mas dificil de nuestras vidas.

Perderte a cambio de tu libertad, aunque sea por poco tiempo.

Hemos quebrantado tantas reglas, mi vida, sabiamos que moririamos, sabiamos que tu y Denia seriais algo mas, es maravillosa.

Tu más.

Ojala pudieramos ver en que conviertes este mundo, esta sociedad muerta necesita a alguien como tu.

Necesita esa libertad.

Te necesitan, esta guerra no será por tu sexualidad creeme eso es lo que menos les importa. Esta guerra será por la libertad, pensar con libertad, vivir, soñar... Ser libres.

Aunque veas en tus compañeros que son felices siguiendo las reglas, no es asi. ¿Como pueden ser felices sabiendo que tienen que enfrentarse a guerras continuas contra sus hijos, hermanos... Padres?

Eso son los Rays un ejercito especializado en guerras civiles, control alimenticio, y control de estudio.

Si te das cuenta todo lo que estudiais es para un bien de la sociedad, no sabeis que hay fuera y os hacen de tal manera que ni se os pasa por la cabeza preguntar.

Liberanos.

Se feliz, vive, sueña, haz locuras, pero, sonrie, sonrie siempre. Por nosotros.

Te queremos mi vida.

"Me impresiona no llorar, me impresiona sentirme por una vez querida, querida de verdad".

Sonrio guardando la carta en mi cajon, no sin antes dedicarle un pequeño beso.

" Me siento bien".

Les hecho de menos pero saber que me querian me hace sentir esa paz mental que tanto necesito, aunque estoy bastante tranquila, la verdad.

-¿Se puede? -Emito un sonido como respuesta. -¿Ya la has leido? -Asiento.
-¿Y que, que tal? ¿Estas bien? ¿Te han explicado todo? ¿Te han dicho lo mucho que te querian?

-Para para... Sooo... -Rio. Denia sonrie y me da el paso para hablar. -Por una vez sean abierto a mi y eso me deja bastante tranquila. Ahora siento que si que me querian y que solo intentaban protegerme, debo ser muy importante para ellos.

Denia me levanta el menton. -Lo eres.

-Ahora lo se. -Sonreimos y nos abrazamos. -Ham... Denia.

-Dime. -Señalo mi toalla. Se sonroja y mira hacia otro lado. -Perdona, te-te dejo que te vistas.

Cierra la puerta dejandome mi privacidad. Me visto y bajo.

-Mmm... Huele bien. -Denia pone las cosas en la mesa.

-Espero que te guste. -Asiento mientras me siento y coloco las manos alrrededor del plato. Dejo que el olor de meta en mia fosas nasales. "Huele tan bien".

Pruebo el primer bocado. " Dios esta malisimo. Puag. Traga traga, te esta mirando." -Mmm... Que... Rico. "Asco."

-¿Que tal esta?

-Mmm... Bueno. -Sonrio.

-Mientes fatal, trae anda. -Coge mi plato junto al suyo y los tira.

-¿Sabes? Cocinare yo.

-Vale, es algo que nunca se me dió demasiado bien. -Me sigue a la cocina. Me ayuda a sacar los cacharros y a hacer la cena.

Despues de cenar y recoger me voy a la ducha.

-Espera. -Me mira con duda. -Te espero en la habitación de tus padres.

-¿Y por que no en la mia? Haber no pasa nada por que durmamos juntas.

Asiente con algo de duda pero me hace caso y miemtras ella va a la habitación yo me meto en el baño.

Una ducha tranquila, lavado de dientes y con pijama en mano.

-¿Ya estas? -Asiento. -Bien pues... ¿Dormimos? "Quiero que caiga esta noche pero... ¿Como? Dejo bastante claro que hasta que yo no estuviera bien no haríamos nada... Piensa".

Me tumbo en el lado derecho de la cama, se ve preciosa con mo pijama, no para de sonreir, juro que esa sonrisa hará que cometa muchos errores.

Apoyo mi mano en su cadera, Denia la observa por unos segundos y luego sonrie. Sigo el juego acariciando su costado. " Como me gustaria acariciar su piel..." Cierro los ojos ante la imaginación de ese tipo de contacto.

Entre abro los labios notando como mi respiración se empieza a agitar.

Entonces cuando ya me rindo sus labios chican contra los mios, atrayendome mas a ella.

Lleva el control total de mi cuerpo, incluso se pone encima apoyando su cuerpo en el mio. En un momento sus rodillas acaban a un lado de mis piernas, desabrocha los botones de su chaqueta acabando en sujetador.

No la miro con deseo es mas la miro con un cariño dificil de explicar. Denia tampoco muestra emociones sexuales al contrario como yo, todo es cariño.

Acaricio por fin, su piel, es tan suave que en un acto involuntario cierro los ojos sintiendola mas.

Sus labios de nuevo junto a los mios.

Suelto su pelo dejandolo caer como una cascada por sus hombros, lo acaricio mientras se forma una sonriaa en mis labios y otra en los suyos.

Me siento en la cama con todo su cuerpo sobre mi, y por primera vez me atrevo a besar su cuello, a acariciar su espalda y a besarla con cierta lujuria.

-Te quiero Becs. -Sonrio besando su nariz.

-Yo si que te quiero Denia. -Me abraza haciendome caer en la cama.