Desastroso Invierno

Capitulo 17

Los hombres se han ido, excepto Damian. 

Mamá sigue frente a frente hablando con ese hombre, el que podría ser mi padre, y es el padrastro de Damian

— ¿ella es tú hija? — pregunto el hombre

Esta claro que no me quiso, y tampoco siente nada al verme... Se refiere así hacía mi como si nada.

— Si Alej — susurro mamá 

— Se parece tanto a él — opino 

¿qué? ¿a quién me parezco? 

— ¿dónde está él? — pregunto mamá

Se escuchó tan fría, tan llena de rencor, como si quisiera saber sobre ese alguien pero a la vez no.

— Oye, él se fue porque... no podía costear los gastos que le ocasionaban... debía pagar... 

Esto es todo.

— ¿de quién hablan? — pregunte

— De tú padre — mascullo mamá

Oh, entonces... este Alej, no es mi padre. Me decepciona tanto como me alegra...

— ¿qué debía pagar Johan? — pregunto mamá

Johan, con que... así se llama.

— Un tratamiento — admitió

¿un tratamiento? ¿para qué?

— ¿cuál? — pregunto mamá— Él no estaba enfermo...

— Si lo estaba Trisha — susurro Alej

— No me dijo nada...

— El punto es ese, y ya, ya paso.

Mamá se quedó procesando la información unos minutos, nadie habla, pareciera que... no respiran, nadie se atreve a hacer ni un movimiento. ¡Pero yo soy Pascal! y Pascal Fastener hace lo que quiere, lo que se le antoja.

Fastener, Fastener... Trisha Fastener... Yo, yo no tengo el apellido de mi padre.

— ¿cuál es el apellido de mi papá? — pregunte

Mamá volteo a verme y su mandíbula se tenso.

— ¿te llamas Pascal no es así? — pregunto y yo asentí— Pascal Khia Webber Fastener

Webber. Ese sería mi apellido

— ¿Khia? Pero si... no me llamo Khia — dije confundida

— Ese nombre te lo quería poner tú padre, ¿entonces como te llamas?

— Sólo... Pascal.

— ¿quieres tener un segundo nombre? — pregunto

— No, no quiere —grito mamá

 —Quisiera —dije ignorando a mamá

Esta claro que ella no quiere que tenga segundo nombre, quiere llavarle la contraria a mi padre, pero no puedo juzgar su decisión, no se que fue lo que paso con exactitud.

  — Pascal — dijo entre dientes

Me gusta Khia, pero mi nombre no es que combine muy bien con él. Ni con... ninguno supongo.

— Mamá, si tú no tienes más nada que hablar con... Alej, deberías irte con tu prometido a planificar tu boda de ensueño — opine 

Ella me fulmino con la mirada y me tomo fuerte del brazo

— Te prohíbo que hables que hables con este hombre — susurro en mi oído

— ¿por qué? — me alteré— Tienes miedo de que él pueda contarme más sobre mi padre y cambie mi manera de pensar, tal vez papá tuvo una razón para irse, la tuvo, tal vez no es malo, tal vez lo hizo para que nosotros estuviésemos mejor, tal vez, solo tal vez, él no sea tan malo como nos lo has hecho pensar. 

Vi su brazo subir más arriba de su cabeza y cerré fuertemente los ojos esperando el impacto pero este nunca llego, abrí mis ojos lentamente y dos manos, una de cada lado sostenían su brazo en el aire. Eran Alej y Damian quienes habían evitado el golpe.

— No permitiré que le hagas daño a mi sobrina.

Damian noto que su mano hacía contacto con la de Alej e inmediatamente se alejó, me tomo de la cintura y me hecho hacía atrás.

— Se te está haciendo costumbre — opine 

¡Un momento! ¿sobrina?

— ¿Soy... soy tú, tú sobrina? — pregunte emocionada, pero tartamudee un poco

— No de sangre, pero Johan es mi mejor amigo, tú eres como una sobrina para mi ya que eres su hija.

— Ella no es su hija — grito mamá

— Lo es, a pesar de que la haya, los haya dejado, no significa que dejen de ser sus hijos, date cuenta. Nunca podrás tapar a Johan, cada vez que los vez... cada vez que los veo, a Pascal y a su hermano, veo a Johan.

... 

Por suerte para todos, mamá no quiso seguir hablando con Alej, así que los dejamos que hablaran, él, Damian y Domenica. 

Veo a Domenica salir de la cocina, donde estaban hablando y ella me dedica una pequeña sonrisa.

— ¿estás bien? — pregunte

— Él si tiene otro hijo, y... ¿sabes qué? Yo lo entiendo, yo también lo habría hecho, tal vez me hubiese ido dando explicaciones, o llevando a mi otra familia conmigo, lo habría echo, pero no de la manera tan cruel en la que él lo hizo.

Suspiro y siguió caminando hasta el baño.

minutos después veo a Alej salir

— Contigo quería hablar — dije

Él se detuvo en seco y me miro confundido.

— ¿donde está mi padre? — pregunte

Necesito saberlo, es necesario, es algo... que me sanará, que me abrirá los ojos. Me hará darme cuenta de lo que en verdad tengo y lo que no y sobre todo, tengo tantas preguntas por hacerle

— Pascal, no creo que él quiera verte, ni siquiera ha dejado que yo lo vea, me habla estrictamente por teléfono, y se le escucha muy mal.

— Pero tú lo conoces, yo no. Lo único que recuerdo de él es una foto... tenía una foto de niña, la había robado de las cosas de mamá, bueno, a ella se le cayó, prácticamente se le perdió...

— Pascal, Pascal... habla ya — dijo entre risas

— El punto es que... tu lo conoces, lo conoces más que a nadie, lo has visto y has pasado momentos que supongo... han sido incríbles, y los han pasado juntos, él es mi padre y yo sólo alcancé a verlo en foto, esa foto no siquiera vive en mis recuerdos, solo es una borrosa y estúpida silueta.

— Hablaré con él. Le diré que los he encontrado...

— ¿él  nos busco? — pregunte

— No podía, pero... siempre quiso saber sobre ustedes.

— Entonces, entonces él... él querrá verme.

Sonreía como una tonta, me hace mucha ilusión.

— Vendré pronto, quizá pasado mañana....

Damian salió de la cocina 

— Damian y yo tenemos mucho de que hablar — termino la frase

Se dirigió a la puerta y... se fue.

— Pascal, besame, por favor hazlo.

No.