Capítulo Catorce: Preparativos

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Cathy: Señorita Sheyla ¿Qué significa esto?

Sheyla: Es una fiesta, ¿Por qué? ¿Viene a unirse? - me levanté - mire le presento a, Juan Carlos está buenote, se lo recomiendo - me acerqué a su oído y susurré - la tiene bien grande.

Cathy: ¡Pero que irrespeto!

xXx: Estoy muy decepcionado de ustedes, muchachos.

Era un tipo alto, ojos cafés, cabello negro, se parecía mucho a Pato

Patricio: No puedo creer que hayas llegado a esto - me miraba con decepción.

Sheyla: Ay, pero que culpable me siento - dije sarcástica.

Cathy: Fernando, ocúpate de estos chicos, yo me llevaré a Sheyla - al parecer él era el director.

Fernando: Si, cielo - ¿Escuché bien? ¿Cómo le dijo?

Cathy: Salga por favor - se apartó para darme lugar, yo me volteé hacia los chicos.

Sheyla: Me voy amores pero no olviden lo que les dije, no me fallen.

Cathy: ¿No te fallen en qué?

Sheyla: Directora por favor ¿Qué en su internado no le han enseñado que no se debe andar husmeando en los asuntos ajenos?

Patricio: ¡A mi madre no le hablas así!

Sheyla: Mucho menos tú a mí, así que vete ubicando, candadito.

Patricio: ¿Candadito?

Sheyla: Si, que te las quieres dar de cerrado y cualquiera que te mete la llave te abre.

Patricio: Mira niñita...

Cathy: ¡Pato, basta! No le sigas el juego. Sheyla sal por favor – decidí salir.

Fernando: Tranquilo, hijo - le puso la mano en el hombro a Pato.

Patricio: Si, papá - ¿Papá? Gran concepto tienen de mí los suegros ¿Suegros? ¿Qué tonterías pienso?

Me fui con la directora, Patricio se quedó con su al parecer padre.

Salimos por la puerta principal del internado de chicos, estábamos más cerca de lo que creí del internado de mujeres. Subimos hasta las habitaciones, ahí estaban todas las internas murmurando.

Cathy: ¿Qué hacen despiertas? ¡A su cama todas!

Todas salieron corriendo entrando a las habitaciones, entramos a la habitación; ahí estaban las chicas, todas fingiéndose dormidas.

Cathy: Duerme, mañana te reportas a mí oficina después del desayuno, ya es muy tarde para regaños y castigos, buenas noches - se fue.

Inmediatamente todas las chicas se levantaron y me rodearon.

Natalie: ¿Qué pasó? ¡Cuéntanos todo!

Micheille: ¿Cruzaste? ¿Viste chicos? ¿Tocaste alguno?

Sheyla: Tranquilas, muchachas.

Les conté todo lo que había pasado, al final quedaron sorprendidas, al fin me dormí bromeando en la misma cama con Natalie, me llevaba muy bien con ella. A la mañana siguiente nos alistamos y bajamos a desayunar.

Melissa: ¿Sigue lo de esta noche?

Sheyla: ¡Claro que sigue! ¿Ya corrieron la voz?

Micheille: Claro, no puede ser posible que nos echemos para atrás.

Sheyla: Eso es imposible, vienen los chicos.

Patricio y su madre se sentaron en la mesa frente a nosotras, él me fulminaba con la mirada.

Tomé uno de los palillos de pan que nos habían servido y comencé a lamerlo, lo metía y lo sacaba de mi boca, simulando... ustedes me entienden, Patricio sólo rodó sus ojos, yo solté una carcajada.

Natalie: Lo estás torturando. Se le ve en los ojos que mataría porque ese palillo fuera su...

Sheyla: ¿Su qué? - dije riendo.

Melissa: Eres malvada.

Sheyla: Pregúntale a tu ex novio quién es la malvada.

Melissa: Ni me lo recuerdes, sangraba como vaca degollada.

Micheille: ¡Qué asco, Meli!

Sheyla: ¿Y no has vuelto a ver al cura?

Micheille: Gracias al cielo no. Ni me gustaba.

Sheyla: Con ustedes me siento en muy a gusto, pero me hace falta Angie.

Sonó el timbre.

Melissa: Suerte con la directora Shey.

Sheyla: ¿Acaso voy a jugar póker con ella? No pienso ir a su oficina.

Natalie: ¿Y a dónde?

Sheyla: Las bebidas no se comprarán solas.

Natalie: ¿Y cómo cargarás de regreso esas cosas?

Sheyla: Esto es lo que haremos: Subiré por el árbol hasta el muro, ataré una soga que irá directo en descenso hasta nuestra habitación ¿Sabes cuál es la señal del espejo, no?

Natlie: Si, la que se hace con el sol.

Sheyla: Correcto mi sople. Cuando regrese lanzaré los paquetes por la soga y ustedes los recibirán en la habitación.

Natalie: ¿Segura que podrás entrar y salir sin que te vean?

Sheyla: Por favor, ayer lo hubiera logrado si tú no me hubieras delatado, pero bueno, todo era parte del plan.

Natalie: ¿Estás segura que quieres que te expulsen?

Sheyla: Eso es tan cierto como que a Pato se le paró con lo del palillo de pan y de que las bubis de Luciana son implantes - todas rieron.

Natalie: Sopleta pervertida.

Sheyla: Realista, Vértiz.

Natalie se fue a la sesión de tenis, yo caminé por el salón principal pero por desgracia me encontré a mi peor pesadilla....la CandyLu. ¿A que no le queda bien el apodo?

CHICA MALA - Adaptada ROJASRODIWhere stories live. Discover now